Naruto: las dos perspectivas

Capítulo 142: El regreso del Kazekage

En los bosques del País del Río, tras ya un buen rato de la finalización del combate entre el Equipo Kakashi y Chiyo con los Akatsuki, Deidara caminaba por el lugar ya sin brazos y tambaleándose, con heridas bastante profundas y un cansancio más que notorio.

-(Al menos logré escapar, tsk, debo encontrar mi brazo derecho con el anillo para volver)- pensó Deidara.

En los escombros de lo que alguna vez fue una cueva que servía de base para los Akatsuki, y el lugar dónde Sasori murió: dos personas se encontraban caminando por esa cueva buscando algo entre las marionetas, una de esas personas no era otra que Zetsu, quién llegó frente al difunto Sasori.

-Así que esta era la verdadera forma de Sasori- dijo el Zetsu Blanco.

-¡Lo encontré, lo encontré Zetsu San!- exclamó la otra persona junto a Zetsu, quién tenía una voz bastante aguda y que le daba un tono infantil al hablar. Esta persona era un hombre con una máscara naranja cubriendo su rostro, una máscara con un agujero que le dejaba ver con su ojo derecho, un ojo derecho que era de color negro. Este hombre tenía una complexión delgada y una estatura de unos 185 CM, su ropa consistía en una camiseta de manga larga de color negro y un pantalón del mismo color, su cabello era negro, corto y despeinado. El enmascarado tenía en su mano el anillo de Akatsuki que antes era de Sasori.

-¡Supongo que ahora puedo unirme a Akatsuki ya que hay un cupo libre!- dijo el enmascarado.

-Idiota, no es tan fácil- dijo la parte negra de Zetsu.

-¿Por qué no? Tobi es un buen chico- dijo Zetsu Blanco.

-Vámonos- dijo Zetsu Negro.

-Bien, Zetsu San- respondió el enmascarado llamado Tobi.

En las afueras de Sunagakure, ya en el amanecer al día siguiente, todas las personas de Sunagakure que no habían ido a ver a Gaara esperaban en la puerta de la aldea el regreso de su Kazekage con todos los que habían ido a buscarle. En un momento, a lo lejos, todos vieron a los ninjas de Suna que se habían ido tras el Kazekage regresar, con Gaara, quién era cargado por Temari y Kankurō en cabeza. Las personas que veían ahora por primera vez desde el ataque de Deidara al Kazekage estallaron en aplausos y en ovaciones hacia el Kazekage, ovaciones que luego se convirtieron en una avalancha de personas que se acercaron a Gaara, Baki fue el primero en ponerse delante de Gaara, con una cara que reflejaba su tranquilidad tras el final de todo aquello que tanto estrés le causó al Jōnin.

-Me alegro de verte bien, Gaara- dijo Baki.

-Es todo gracias a ellos- dijo Gaara. Baki miró entre la multitud hasta ver a Katsumi no muy lejos de Gaara.

-Gracias- dijo Baki mirando a la rubia.

-Yo...no me agradezca, no hice nada realmente- dijo Katsumi mientras se rascaba la cabeza. La multitud de aldeanos se apartó dejando un pasillo, un pasillo por el que Kankurō y Temari se disponían a avanzar con Gaara cargado.

-¿Listo?- preguntó Kankurō.

-No, ella primero- dijo Gaara. Detrás de ellos 3, 4 ninjas de Sunagakure cargaban una especie de camilla con una bolsa negra que contenía dentro el cadáver de Chiyo.

-Bien- dijo Temari. Los 3 hermanos se apartaron y dejaron paso a los ninjas de Suna que cargaban a la difunta Chiyo, nadie emitió una sola palabra mientras ellos pasaban en señal de respeto hacia la difunta anciana.

Un rato después, en la Mansión del Kazekage en Sunagakure, Gaara, Baki, Temari y Kankurō estaban en Sunagakure frente a Katsumi y Sakura, quiénes cargaban al aún cansado Kakashi. La aldea tras todo el bullicio por la vuelta de su Kazekage se había calmado un poco, pero aún permanecía presente.