— Algún día la encontrarás cariño — dijo su madre al ver que su hija tocaba su muñeca distraídamente. Ajustó las coordenadas de la cápsula de escape rápidamente.
— Mamá... — dijo la chica al borde de las lágrimas.
— Rao te guiará. Estarás a salvo y él te guiará a encontrar a tu alma gemela — sonrió, sabiendo que sería la última vez que vería a su hija —. Cuida de Kal-El. Son los últimos hijos de Krypton.
— Es hora — dijo su padre, dando un último abrazo a su hija al tiempo que las paredes de la cueva se sacudían —. Te amamos, Kara.
Con un último esfuerzo, subió a Kara en la cápsula de escape y presionó uno de los botones. Se alejó, permitiendo que se sellara antes de verle despegar.
A lo lejos, la explosión del planeta se reflejó en el cristal de la cápsula. Lágrimas comenzaron a correr por el rostro de Kara.
...
— Puedes ir a descansar, Supergirl — escuchó la voz de Alex en el comunicador —. No creo que haya algo de que preocuparse esta noche.
— Está bien — dijo con un suspiro. Había pasado tiempo desde la última vez que ese pensamiento había cruzado su mente.
Continuó su vuelo y, mientras vigilaba, notó que su hermana tenía razón. Había resultado ser un día tranquilo y la noche parecía no ser la excepción. Decidió dar una última ronda antes de volver a su departamento. Había escasos edificios con la luz aun encendida. L-corp era uno de ellos. Durante unos segundos consideró visitar a la CEO de la empresa, cuya relación amistosa progresaba lentamente. Desde aquel primer día había notado algo especial en ella, pero no estaba segura de que era exactamente ese algo.
Vio la luz apagarse y continuó el vuelo. Asegurándose desde la distancia que Lena llegara segura a su departamento. Una vez que todo estuvo en orden emprendió el vuelo hacia su departamento, o eso hubiera hecho, si una especie de portal no hubiera interferido en su camino.
...
— ¡Ayu..! — escuchó a lo lejos —. ¡Le...!
Escaneó la zona y localizó casi de inmediato el lugar de procedencia del grito. Voló hacia allá en cuestión de segundos y sin pensarlo, entró en el agua.
— Todo estará bien — dijo a una niña, que no había notado antes, que se encontraba cerca de la orilla.
Escuchando el lento latido de su corazón, colocó a la mujer boca abajo y levantó sus caderas suavemente. La acción hizo que un poco de agua saliera expulsada de su boca. Le dio la vuelta lentamente y la colocó boca arriba, comenzando a aplicar RCP. La niña a un costado de ambas había comenzado a llorar, haciendo que sus nervios se alteraran un poco. Continuó con la acción hasta que la mujer tosió, expulsando un poco más de agua. Abrió los ojos, la sorpresa evidente en ellos y escuchó su corazón latir de nuevo a un ritmo regular. Se separó de ella, buscando a la niña, que hasta ese momento pensó, sería la hija.
— ¡Mamá! — dijo la pequeña entre lágrimas, abrazándole a pesar de la ropa húmeda.
— Todo está bien, cariño — la mujer comenzó a acariciar su cabello —. Todo estará bien.
Con un suspiro, Kara se levantó y miró a su alrededor por primera vez. Estaba lejos de la ciudad y el sol estaba cubierto por unas espesas nubes, haciendo que el lugar luciera lúgubre y poco apropiado para nadar. Miró a la mujer de nuevo. Tenía el cabello pelirrojo oscurecido por el agua y la ropa comenzaba a pegársele al cuerpo. La niña en sus brazos tenía la cabeza enterrada en su cuello y su llanto se había calmado.
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Mi presente eres tú
FanfictionSupergirl se encuentra patrullando la ciudad, cuando un portal se abre de la nada, llevándole consigo. ¿Qué pasará cuándo aparezca en un sitio completamente desconocido en el momento exacto para salvar la vida de una persona? ¿Cómo cambiará su vida...