XIV

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POV Lisa.

_Nos ha abandonado_le digo al gato naranja que se sube junto a mí en el sofá. Me bufa, como si supiera que ha sido mi culpa -Oye, no es mi culpa que te haya olvidado.

Me recuesto en el sofá y Min-ki aprovecha para subirse sobre mí y caminar hacia mi cara.

_No quiero iniciar una pelea.

Pero el gato me mira con sus intensos y enojados ojos verdes.

_Lo sé, fue mi culpa que se haya ido_suspiro_lo siento.

El gato me pega un manotazo.

_¡Oye!_exclamo llevando una mano a mi mejilla_¡¿Por qué has hecho eso?!

Cierro los ojos, estoy cansada, no he podido dormir en toda la noche y ahora tengo que soportar al maldito gato enojón.

_¿Quieres que la vaya a buscar, verdad? No tengo idea de donde puede estar Min-ki, y sabiendo cómo es Jennie nunca me lo dirá... y ahora dejaré de hablar contigo porque parezco una psicópata.

Me preparo un café fuerte y lo bebo entre suspiros. Me ducho con la esperanza de sentirme mejor pero nada parece alegrarme.

Entro a la habitación de Jennie todavía con la toalla envuelta en mi cintura,Min-ki me sigue insistente, como si fuera un molesto recordatorio de que me comporté como una imbécil con ella.

Me siento en su cama y noto que ha olvidado algunas cosas, entre ellas los retratos de la pequeña mesita de luz.

La foto de sus padres sigue allí, y me da una idea. ¿Jennie podría haber ido a la casa de sus padres? Es tan orgullosa que lo dudo, pero tal vez en un arranque de enojo fue lo único que se le ocurrió.

Me levanto de la cama rápidamente y me visto, pero cuando estoy a punto de salir del departamento Min-ki me muerde los jeans.

_Quieres que te lleve?_exclamo _Dime, ¿dejan subir animales en el autobús?




...


El autobús está lleno, y Min-ki no deja de removerse y bufar en la mochila,haciendo que varios pasajeros se giren a mirarme.

Me muerdo el labio inferior, estoy perdiendo la paciencia con ese gato sucio, pero intento controlarme, sabiendo que es querido por mi compañera de piso.

Un asiento se vacía y me siento. Coloco la mochila sobre mi regazo, pero aun así el gato no deja de moverse. La mujer sentada junto a mí me mira frunciendo el ceño.

_Min-ki gatito bueno_susurro sobre la mochila, pero eso no hace más que molestarlo y la mochila cae de mis piernas al suelo. Intento agarrarla pero el gato comienza a hacerla mover por todo el autobús, dando un espectáculo de mochila andante.

Me levanto rápidamente y camino entre la gente intentando atrapar la mochila, llamando la atención de todos los pasajeros.

_¡Min-ki!_susurro gateando en el suelo_¡Ven aquí!

Pero el animal se sigue moviendo por todo el autobús enojado.

Después de un momento logro atrapar la mochila.

_No se permiten animales aquí _dice el conductor enojado que ha parado el autobús.

_Lo siento.

My Rommate | Jenlisa G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora