U n o

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Cada mañana soltando un suspiro camino lentamente hacia la estación de trenes, cada paso que doy me acerca más a mi destino, y podía sentir dentro de mi pecho como mi corazón latía desbocado.

Todos los días me siento en este vagón, imaginándome el como estarás esta mañana, si estarás de buen humor, si estarás soñoliento o simplemente el como estarás.

Sumisa en mis pensamientos capte el ruido de unas pisadas que se acercaban lentamente.

Sentí un escalofrío al verte, allí te encontrabas, sentándote justo frente a mi en aquel vagón en donde va y viene el silencio.

Si fuera más guapa y un poco más lista
Si fuera especial, si fuera de revista
Tendría el valor de cruzar el vagón
Y preguntarte quién eres.

Empecé a jugar nerviosa con mis dedos, mirando hacia el suelo, preguntándome si habías notado algún cambio en mí.

Todos los días me levanto temprano, para elegir que ropa que usar, hasta deje crecer un poco mi cabello, en un intento de llamar tu atención.

Pero no me observaste y eso hizo que se estrujara mi corazón, divague con mi mirada el amplio vagón suspirando por ti y por este silencio que nos consumia.

Jueves⛅ h.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora