El gato y el ratón

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Me escondo entre sus brazos, su cuerpo es lo suficientemente grande para cubrirme casi por completo.

-Shhh tranquilo, no pasa nada - otro trueno suena en el cielo, chillo, no me gusta la lluvia, odio los truenos y los rayos, me regresa al día en que perdí a mis padres.

-Quiero que se acaben - sujeto con fuerza su camisa -No quiero seguir recordando -

-¿Recordando qué?- el pasa su dedo por mi espalda.

-El día que los perdí a ambos, el día que perdi a mis padres -

-¿Me quieres contar?- lo pienso por un momento, ¿De verdad me vas cuidar? -No tienes que hacerlo si no quieres - Si no me mato o me dejó estando mal, no va a hacerlo ahora ¿Cierto?-

-Mis padres estaban buscando un nuevo lugar para vivir, había empezado la temporada de invierno y nuestro refugio se inundó - trago - Estábamos corriendo entre las calles, las alcantarillas estaban repletas de hielo y agua, era imposible para nuestra especie pasar por ellas, somos muy pequeños - sonrió débil - Estábamos pasando por al frente de un restaurante callejero, la comida tenía un olor muy bueno, teníamos días sin comer algo realmente delicioso - las escenas de ese día vienen a mi cabeza - Mis padres me pidieron que me escondiera mientras ellos buscaban algo para comer, yo no quería que me dejaran solo pero mi tamaño no ayudaba mucho - las lágrimas salen sin ningún control - Cuando se acercaron a los botes de basura la persona encargada los vio, tomo una olla con aceite caliente y los baño, mis padres chillaban, se retorcían sobre el suelo, el hombre tomo el bote de basura y los aplastó con fuerza - el me abraza - Vi como asesinaban a mis padres, los mataron ante mis ojos - el dolor en mi pecho se hace más fuerte - Y todo por un poco de comida que nadie se iba a comer ya -

-Lo lamento, lo lamento tanto - sus brazos me toman con tanta fuerza que siento que está sosteniendo cada pieza rota - ¿Qué edad tenías?-

-13 años, desde entonces vivo completamente solo -

-Eras un niño, un bebé - me aleja un poco - Ya no estás solo, lo prometo, yo estaré contigo, te voy a cuidar de todo - se acerca y me da un beso en la nariz - Es muy tierna la manera en que la mueves - siento las mejillas calientes - ¿Puedo saber en qué lugares has vivido desde entonces?-

-Uhh, en un colegio - me río - Era divertido asustar a las monjas, También viví en una biblioteca, me encantaba cuando cerraban, podía volver a mí forma humana y leer todos los libros que yo quisiera, también viví en un cine pero sólo duró una semana, ellos fumigan muy seguido y su veneno es muy potente -

-¿Cómo llegaste aqui?-

-Conseguí la casa cuando aún estaba desocupada, entre y el lugar me gustó, una de las tablas estaba mala así que fue fácil quitarla, me quedé en ese pequeño espacio todo este tiempo, conocí a Jongin y a Kyungsoo en cuanto se mudaron, son muy amables, ellos me daban comida antes de que tú te mudaras aquí - quitó las pelusas imaginarias de su ropa - Me sentí cuidado por ellos y su hijo - sonrío.

-¿Tú eres quien limpia mi casa, verdad?- asiento - Eres muy organizado - me encojo de hombros.

-Me como tú comida, la pago limpiando tu casa - levantó la mirada y lo veo directo a los ojos, son tan hermosos, esas manchas verdes con marrón - Pensé que no te dabas cuenta -

-Como no darme cuenta, soy un desastre, tejo todo regado y cuando llegó todo está en su lugar - me río - Ya no tienes que vivir en ese lugar pequeño, ahora está habitaciones tuya, puedes devorarla como desees - bajo la mirada -¿Qué sucede?-

-Me cuesta vivir como humano, no tengo ropa, solo un par de boxer que me regaló Kyungsoo - acomoda mi cabello atrás de mi oreja.

-Yo me encargo de eso, te daré todo -