𝙼𝚎𝚗𝚜𝚊𝚓𝚎𝚜 𝚍𝚎 𝚞𝚗 𝙸𝚍𝚒𝚘𝚝𝚊 (𝚟𝚘𝚕𝚞𝚖𝚎n 𝙸𝙸) «𝐑𝐢𝐮𝐦𝐛𝐚»

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La adopción de Alex y Noa (2/2)

Rius paseaba por el patio del orfanato, veía a muchos niños. Algunos jugando, otros hablando, algunos se acercaban a las personas mayores que se encontraban allí

Rius: Awww, por una parte me alegra que haya tantos niños y niñas. Pero por la otra me entristece que sea así-.

Vió como un grupo de niños jugaban “mundo”, sonrió enternecido. Notó que uno de ellos empezó a saltar pero resbaló y se cayó, el pequeño lloró ante el raspón que tenía en su rodilla

Sus amiguitos lo ayudaron a pararse y lo llevaron a una banca cercana, hablaron con él y luego se fueron, no sin antes abrazarlo

Rius: Mmm, tengo una idea — este se acercó al pequeño y se sentó calmadamente a su lado — hola pequeño, ¿Qué sucedió? — claramente lo sabía, pero de esa manera era más fácil entablar una conversación-.

X: Um — el pequeño tenía moquillos, que rápidamente fueron limpiados con un pañuelo por el albino — jeje, gracias. Y... Bueno-.

Rius: Está bien, cálmate ya pasó — le dijo con ternura, mientras que con una de sus manos tomaba su mejilla y la limpiaba de las lágrimas caídas. El pequeño rió un poco-.

X: Es que, al jugar con mis amigos, me caí y me hice este raspón — señaló con su dedito — y me duele-.

Rius: Bien, haré algo, ¿Sí? — de su bolsillo sacó un pedazo de papel higiénico y una curita. Mojó el papel con un poco de agua de una llave y limpió el pequeño raspón, seguido le colocó la curita y le dió un besito en esta — ¿Mejor?-.

X: Mejor— le dió una sonrisita — Por cierto, me llamo Noa, ¿Cómo se llama usted?-.

Rius: Mi nombre es Ramón, pero puedes llamarme Rius-.

Noa: Señor Rius, ¿Ya pensó en adoptar a un niño o niña?— le preguntó tímidamente-.

Rius: Nop, aún no, aún sigo buscando a un pequeño, ¿Tienes a alguien en mente?-.

Noa: ¡Yo! ¿Puedo ser yo? Ya sé ir al baño — le dijo con un ligero sonrojo-.

Rius: Rió levemente ante el compartimiento del pequeño de ojos color verde — Por supuesto que sí, me gusta mucho tu personalidad tan activa jaja — el pequeño sonrió con un brillito en sus ojos — ¿Vamos? — se puso de pie y le dió su mano, a lo cual este le dió la suya-.

Estaba caminando alegremente cuando recordó algo sumamente importante

Noa: Am, ¿Señor Rius? — este detuvo su andar-.

Rius: ¿Qué pasa pequeño?-.

Noa: Creo que, no podré ir con usted — se soltó de su agarre-.

Rius: ¿Qué? ¿Por qué? — su expresión de felicidad cambió a una de tristeza-.

Noa: Es que... Tengo a mi hermano, y él es el mejor hermano de todos, siempre nos apoyamos uno a otro — jugó con sus deditos — Él es mi mejor amigo, y si él no viene conmigo entonces no iré a ninguna parte. Nosotros venimos en un paquete-.