DESDE NUESTRAS CENIZAS

CAPÍTULO 9- ¿QUIÉN TIENE EL PODER?

ARIZONA

No podía creerlo, Callie se había acostado con Penny, es decir, se que aún son pareja, pero pensé que ella estaba intentando terminar con todo eso y no creo que así lo esté haciendo. Pero, ella me reclama a mí y desconfía de mí, cuando debería ser al revés. ¡AL DEMONIO CON TODO ESTO! Llamaré a Carina, necesito la ayuda, así que decidí llamarla, ella me respondió, le dije lo que necesitaba y estuvo en una hora en mi departamento. Le abrí, tomé mi calmante y ella me colocó una crema que le había pedido. Le dije que se quedara a dormir; puede ser que lo esté haciendo por despecho, pero por las dudas que necesitara ayuda nuevamente, mi pierna me estaba molestando bastante últimamente; ella accedió a quedarse y cerré con seguro la puerta por las dudas que entrara Sofía. Luego, solo nos acostamos, ella me abrazó y nos dormimos. No hubo insinuación entre nosotras, Carina era muy ubicada, no pasó nada y solo nos dormimos.

Me desperté y vi que Carina se estaba vistiendo. La miré, me senté en la cama y le hablé.

Buenos días, Carina. ¿Qué sucede, a dónde vas?

CARINA: -Me acerqué del lado de la cama de Arizona, me senté y acariciaba su cabello detrás de la oreja- Buenos días, preciosa. ¿Ya te sientes mejor?

ARIZONA: Oh, si, muchas gracias. ¿Por qué te vas tan temprano?

CARINA: -Le di un pequeño beso a Arizona en sus labios, pero ella me apartó- Lo siento, necesita hacerlo. Me voy temprano porque no quiero que Sofía me vea, no quiero causarte más problemas. Además esta vez debo irme a Seattle urgente.

ARIZONA: -Carina me dió un pequeño beso pero la aparté- Sofía te conoce, no habría problemas, pero si, tienes razón. Pero ¿Qué sucede que debes ir urgente a Seattle?

CARINA: Mi papá viene de Italia y quiere ver a Andrew, pero ellos no se llevan bien, necesito estar presente, Andrew no responde ni uno de mis llamados. Está saliendo con Meredith, ¿Lo sabías?

ARIZONA: Oh, no lo sabía, que tal Andrew, eeeh!! Pero, desayunamos y te vas, ¿de acuerdo?

Carina accedió a quedarse a desayunar, me coloqué mi prótesis, me vestí y fuimos a preparar el desayuno. Luego de un rato de preparar el desayuno, ya eran las 6:30 de la mañana, estábamos desayunando y de un momento a otro apareció Sofía en la cocina. ¡NO PUEDE SER!

SOFIA: Mami... mami

ARIZONA: -Sofía vino hacia mí queriendo empezar a llorar y se escondió en mi pecho- ¿Qué sucede, cariño?

SOFIA: Tuve una pesadilla, mami. No quiero ir al colegio, ¿puedo ir al trabajo contigo?

ARIZONA: Tranquila, cariño. Claro, irás conmigo y luego iremos por un helado, ¿de acuerdo? Mira, te acuerdas de Carina, ella vino a visitarnos.

CARINA: Hola pequeña, tenía mucho que no te veía. Estas hermosa.-Sofía me miró, me sonrió y me respondió amablemente-

SOFIA: De acuerdo, mami, me agrada la idea. Hola, Carina, gracias.

CARINA: Bien, ya debo irme, me encantó verlas. -Sofía seguía en los brazos de Arizona, me acerqué le di un beso en su frente y un beso en la mejilla a Arizona- Arizona, llámame si me necesitas de nuevo o por cualquier cosa. No lo dudes.

ARIZONA: De acuerdo, cuídate y muchas gracias por venir. -Carina se fue-

SOFIA: Mami, ¿Carina es tu novia de nuevo?