Warriors🛡Ivar&Eyra🛡

Over Again.

Ivar

Estoy a punto de matar a ese hijo de puta, se ha atrevido a golpear a Eyra, la vi observarme y solo eso basto para que se levantara y lo degollara.

-¡El maldito usurpador ha muerto! Yo he tomado el lugar que por derecho me pertenece y a quien no le guste, este sera su maldito destino. -señalo el cuerpo, llena de furia se giro y se alejo del lugar.

Lentamente fui detrás de ella, llegamos al gran salón, ahí ya se encontraban los cristianos y sus padres.

-Reina. -el maldito cristiano de la otra vez la miro preocupado. -Ragnar ha asesinado a un joven que se encontraba hablando mal de usted.

Aquello me sorprendió, mire a Eyra y se encuentra igual que yo.

-¿Como? -pregunte.

Todos me miraron.

-El siempre lleva una daga, le saco los intestinos. -su cristiano me miraba mal.

Mire a Eyra, ella también me miraba, suspiro y giro hacia el maldito obispo.

-¿La familia lo sabe ya?

El negó.

-Y mientras no les des a su rey, mas se van a revelar. -Floki la miro burlón.

Eyra suspiro.

-¿Cuando se van a su expedición? -observo a los cristianos.

-Hoy partimos. -el obispo tomo su mano.

-Bien, ¿y ustedes cuando parten con mi tío? -tomo asiento en su trono.

-En unas horas. -Halfdan se acerco a ella.

-No me parece bien que te quedes sola, hija los niños estarán solos también. -Helga la miro preocupada.

Eyra le sonrió con ternura.

-Me se cuidar madre y además, no estaré sola, se que si algo se llegase a presentar, Ivar nos protegerá, ¿no es así? -me miro

-Con mi vida. -lo dije sin dudar.

Vi la felicidad que cruzo por su mirada, la furia en la de los cristianos y la burla en la de Floki.

-Todos vayan a empacar, todo estará bien.

De eso no hay duda, siempre contara conmigo, no dudaré en ayudarla y cuidarla, no solo a ella, nuestros hijos siempre estarán protegidos por mi.

(...)

-Madre.

Sonreí al ver a los niños correr hacia la falda de su madre.

-¿Pero que les ha pasado? -pregunto divertida al verlos llenos de lodo.

Me acerque hacia ellos, Eyra me miro con una sonrisa.

-Estábamos peleando con las espadas que nos ha dado Arthur. -Flokfdan contesto con emoción.

-¿Las guardaron? -acaricio la cabeza del mas pequeño.

-Si madre. -le sonrió.

-¿Quien es el? -me apunto el pequeño.

Eyra sonrió y beso su frente.

-El es Ivar The Bonless, su padre niños.

-Si alguno me llama lisiado, tendremos problemas. -los mire "serio"

Los mire, quiero ver como reaccionan ante esto, Flokfdan sonrió.

-Te recuerdo, tu tallabas mis juguetes, antes te arrastrabas.

Sonreí y asentí.

-Lo sigo haciendo, dejaste tu caballo favorito al irte. -lo saque de mi pantalón y se lo tendí.

Sus ojos brillaron y se acerco a mi.

-Padre. -murmuro y me abrazo.

Mentiría si dijera que aquello no me emociono, sentí como mi corazón se sentía completo, lleno de felicidad, lo abrace con un poco mas de fuerza.

-¿El es mi padre?

Sonreí al ver a Eyra asentir, se acerco un poco a mi, me observo atentamente y negó.

-No, mi madre dice que mi padre se arrastra.

Sonreí, me aleje de Flokfdan con una sonrisa, me senté con un poco de dificultad, Eyra se acerco y me ayudo a retirar las prótesis, las tomo junto con la muleta y se levanto; mire fijamente a mi hijo pequeño y comencé a arrastrarme hacia el, creí que se asustaría, pero lo único que hizo fue sonreír y se acerco a abrazarme.

La idea de ser padre había sido totalmente enterrada, después de lo de Freydis nunca imagine que seria posible y ahora tengo a mi hijo entre mis brazos, un hijo de sangre, un hijo que puede caminar y no es otra ilusión.

-¿Volveras a dejarnos?

Su pregunta me rompió el corazón, mire a Eyra y ella me sonrió.

-No, no me iré a ningún lado, aquí me quedare con ustedes tres. -bese su frente.

-Reina, los cuernos han sonado, un barco se acerca. -una esclava le aviso.

Me tense, Eyra lo noto y negó.

-Niños ayuden a su padre, pongan sus prótesis de nuevo, iré a ver de quien se trata. -acaricio sus cabezas y después la mía. -Vete a mis aposentos, no te buscaran ahí.

Asentí y ella salio.

-Vamos padre, vamos al aposento de madre. -Ragnar comenzó a caminar.

Seguí a mis hijos, no les molesta que su padre se arrastre, eso me gusta, al igual que su madre, me miran con una sonrisa.

El tiempo que estuvimos aquí, les enseñe a tallar en madera, ellos me enseñaron un juego que ellos mismos crearon, jugamos en el tablero que tiene Eyra aquí y me contaron historias; son unos niños buenos, su madre los ha criado muy bien.

-Ivar. -Eyra entro y nos observo. -A dormir niños, ya es tarde.

Se quejaron, pero terminaron por hacerle caso a su madre, los beso en la cabeza y cuando estuvimos solos se dejo caer frente a mi, se estaba tomando la pierna con gesto de dolor.

-¿Aun hay dolor? -me acerque y comencé con un pequeño masaje.

-En ocasiones, he forzado mucho la caminata. -me miro y acaricio mi rostro.

-¿Quien llego? -tome una de sus manos y deposite un beso.

La vi sonreír.

-Me quieren en la guerra.

La ira comenzó a crecer dentro de mi.

-¿Pelearas junto a Björn? -la mire mal.

Negó con una sonrisa.

-Se que no habrá guerra.

La mire confundido.

-Te conozco esposa, algo haz planeado ya.

Asintió.

-Lo hice, ex esposo.

Sonreí, eso me dolió.

-¿Me dirás?

Negó.

-Tendrás que confiar en mi, Ivar.

Debo de estar mas loco de lo que pensaba, confió en ella con mi vida, se que no haría nada para dañarme y puedo confiarle mi vida.