Empezar contigo

Duele

“En ocasiones duele más quedarte donde sabes que te estás lastimando, duele más tratar de salvar lo que hace tiempo se está cayendo a pedazos, duele más dejar de ser tú por querer aferrarte a los planes, las promesas y las sonrisas que un día calentaron tu pecho. Y no, no lo tomen a mal, yo también soy de esos que ven las películas románticas y se emociona al ver que el amor lo supera todo, que se intenta un millón de veces y que no se rinde ante nada, pero a veces simplemente entiendes que estás tocando la puerta incorrecta, a veces simplemente tienes que caer cinco o seis veces con la misma piedra, a veces tienes que apostar contra los pronósticos, porque tenías que hacerlo, tenías que quitarte la duda de saber si funcionaría al final.

En ocasiones es mejor irse, agradecer la coincidencia, saber que pusiste cada gramo de tu alma en ello, saber que la felicidad en esos brazos alcanzó el punto final y es tiempo de darle la bienvenida a la tristeza, a la nostalgia, a esa melancolía de extrañar el lugar que pensaste sería tu hogar, volver al café para uno, rutina para uno, desayuno para uno.

En ocasiones es mejor irse, amar en silencio y de lejos, aceptar que te dolerá el corazón y el alma al ponerle mute a esa voz, esa risa y ese cuerpo, porque ese es el precio  de las despedidas, pintar de nuevo los futuros y empezar a construirte una vez más”.