Capitulo 1 💚(parte 1)

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Dos años antes...

Pipipipipipi

El ruido de la alarma irrumpió en los sueños del rizado haciendo que este soltará un bufido antes de levantarse a apagarla.

Cuando apago la alarma pudo ver la hora en su celular, las seis y veinte, está bien, el tenía tiempo las clases empezaban a las siete y diez, lo que le daba casi una hora para arreglarse.

Dejo su teléfono en la mesita de noche y fue a ducharse.

Salió de la ducha, se lavo los dientes y salió del baño, fue directo a su armario para coger su ropa, era el primer día de clases no tenía por qué ir tan arreglado, eligió unos skinny jeans negros, una camisa blanca sencilla con palmeras deliniadas sin color y unos converse blancos.

Termino de arreglarse y bajo las escaleras con su mochila en el hombro, se dirigió a la cocina en dónde estaba su madre de espaldas a él y en la encimera de la cocina se encontraba su desayuno ya listo.

Anne estaba en el lavaplatos, no se había dado cuenta de la presencia de su hijo, hasta que dio la vuelta sobre sus talones, dió un respingo cuando vio la figura de su hijo recargada en la puerta, el rizado rio por lo de su madre y se acercó a una silla cerca de la encimera antes de hablar.

—Buenos días, mamá— dijo con una gran sonrisa en la que se le marcaban sus hoyuelos.

—Buenos días, cariño—la pelinegra hablo, también con una sonrisa.

—Perdón por asustarte debí avisarte que estaba aquí— tomo una tostada de su plato mientras miraba fijamente a Anne.

—Oh eso...— dijo soltando una carcajada no tan ruidosa.—no te preocupes cariño—. el rizado asintió con una sonrisa la cual Anne le devolvió.

—Bien— finalizó agarrando otra tostada y llevándosela a la boca.

Termino de desayunar y subió a su habitación para volver a lavarse los dientes. Lo hizo y bajo a la planta baja, estaba Anne sentada en el sofá viendo su novela de la mañana, se acercó a ella y le dejo un beso en la mejilla y dijo.

— Hasta luego, mamá—. Anne volteó y le regaló una sonrisa a su hijo.

—Suerte en tu primer día—. Le devolvió el beso en la mejilla izquierda en dónde se podía observar un hoyuelo.

—Gracias, adiós.— dijo agitando la mano en forma de despedida. El rizado salió de su casa para emprender camino a su instituto que quedaba a menos de tres calles, en 5 minutos ya se encontraba en frente de la institución, entre toda los adolescentes pudo divisar una cabellera rubia, era Niall, el rubio en cuanto lo logro ver le regaló una de las sonrisas que lo caracterizaba, se fueron acercando y esquivaron a muchas personas en el camino, quedaron frente a frente y se hundieron en un cómodo abrazo.

—Te extrañe Ni— dijo Harry sin separarse del abrazo y abrazando con más fuerza a su amigo. Y es que Harry no había visto a su amigo desde que el se fue a Irlanda con su familia para las vacaciones, y el rubio volvió hace a penas 3 días y la verdad que lo extrañaba muchísimo, ahora los dos se verían toda la semana ya que asisten en la misma escuela y prodran ir a las casas de ambos para pasar el rato como lo hacían antes de las vacaciones y Harry no podía estar más contento.

— Que cursi eres Styles...— El rizado levanto la cabeza del pecho del irlandés para verlo a los ojos, Harry hizo un puchero y Niall se vio obligado a completar la frase —... yo también te extrañe rizos.

Y a Harry se le dibujo una enorme sonrisa por lo que Niall dijo, siguieron abrazados hasta que una voz a lo lejos los saco de su ambiente.

—¡Chicos!— era Jacqueline, la mejor amiga de ambos, se podría decir que eran el trío más genial de toda la escuela pero eso solo ellos se lo creían. Jacqueline Gómez es una estudiante de tercer año de la secundaria, ella es Salvadoreña pero toda su familia visito Inglaterra hace dos años y ahí fue como ella y los chicos se conocieron, ella estaba con sus tres hermanas, Jennifer (22), Juliana(18), Katherine (10) y ella cumplía sus doce años ese mismo día (28 de Diciembre), luego de su visita volvieron a su país pero unos meses después su familia decidió mudarse cuando Jacqueline había terminado su segundo año de secundaria y también por qué Inglaterra le resultó muy agradable, ya llevaba un año en el instituto y ahí estaba, lista para empezar el tercer año, para los chicos ella era una persona a la que amaban demasiado y le tenían un cariño inmenso.

Secretos  «Larry Stylinson»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora