capitulo 45 un tiempo libre

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Momo: y bien? –dijo tranquila mientras veía como Izuku estaba pensativo-

Izuku: no entiendo como tu familia es tan endemoniadamente rica –dijo viendo toda una montaña y un gran pedazo de bosque perteneciente a los yaoyorozu-

Momo: esto es lo más grande que tenemos así que supongo que mi padre quiere evitar problemas y quizás impresionarte –dijo tranquila-

Izuku: momo –dijo viéndola- soy un idiota...

Momo: atrabancado, con complejo de mesías y que cree que no necesita a nadie...

Izuku: y por qué sigues conmigo? –dijo viéndola- mírame –dijo intentándose señalar- soy un desastre en toda la expresión, porque sigues esforzándote conmigo –dijo recordando las marcas de los peluches, esas quemaduras que el ocasiono-por qué?

Momo: Izuku –dijo viéndolo- desde pequeña se me enseño a perseguir lo que quiero y luchar por ello, y a ti te quiero –dijo con una sonrisa- se quién eres, eres todo lo que dije, pero también siempre intentas mejorar este mundo, intentas darle oportunidades a niños que ni siquiera ellos se imaginan que necesitan, Izuku tu estuviste conmigo cuando todos mis tutores se fueron y no decidiste ser un estúpido mayordomo que intentara seguirme me preparaste, me entrenaste y cumpliste tus promesas, nunca me dejaste, y aunque luego tengas malos momentos tú me importas como sé que si alguien me lastimara tú le quebrarías las manos

Izuku: bueno creo que es cierto –dijo con una pequeña sonrisa- aunque también le daría una descarga eléctrica

Momo: de eso hablo –dijo sonriendo- eres la persona más brillante que conozco y hay veces que me considero si te meres...

Izuku: no termines esa frase –dijo viéndola directamente- yo tendría que decir eso, solo mírate eres perfecta, hermosa y una genio aparque que tu lealtad es indiscutible, tierna y cariñosa a tu manera, cualquiera estaría feliz de estar a tu lado

Momo: entonces sintamos afortunados de tenernos –dijo sonriéndole- ahora deja esa onda depresiva, necesitas trabajar y yo estaré a tu lado te guste o no aquí estaré para ti como sé que tu estarás al mío –dijo sonriendo mientras caminaba a la caballa-

Izuku: sr yaoyorozu, no sé si esto ya está predestinado pero cuando regrese le deberé agradecer –dijo sonriendo mientras con las muletas se movilizaba la caballa era grande, hecha de madera de una calidad ridícula parecía el lugar de sueño que el siempre espero, con dos recamaras, una cocina, sala de estar, dos baños y una terraza era tranquilizante-

Momo: bueno empecemos a lo que vinimos –dijo mientras dejaba una mochila y guiaba a Izuku a una parte del bosque-

Izuku: al mal paso a darle prisa –suspiro- mantén tu distancia no quiero que te lastimes –dijo mientras veía como momo creaba un escudo anti electricidad- a veces olvido que ustedes también avanzaron en estos meses –suspiro- bien concéntrate –dijo mientras intentaba sentarse, no tenía que hacer gran cosa esta vez solo probaría sus escudos-

Momo: es increíble –dijo impresionada Izuku lanzaba rayos literalmente su cuerpo intentaba regular la electricidad que se desbordaba pero parecía que "creador" buscaba que Izuku entendiera el daño que podría hacer, el no tener una extremidad le daba una enorme desventaja y su cuerpo era inestable, momo no entendía que estaba haciendo solo podía ver ese color verde tan caracterizo-

Izuku: vamos, vamos –dijo mientras una enorme pared color verdes se empezaba a crear cortando algunos árboles de las puntas Izuku no sabía cómo regular y sentía como se convertía en una bomba- demonios –dijo suspirando y desactivando sintiendo un gran costo de energía, era doloroso- maldición

El escudo de la pazDonde viven las historias. Descúbrelo ahora