Fierce ~Nuevas Especies Fanfic~ #1

Capítulo 10.

Fierce se encontraba dando vueltas en su habitación. Desde que había vuelto de trabajar no podía dejar de recordar lo que pasó con Lauren. Sus cuerpos moviéndose, jamás se había sentido tan conectado a alguien como a ella. De alguna extraña forma, se sentía solitario ahora que estaba lejos de ella, no podía olvidar su cuerpo, sus palabras, sus gestos, no podía olvidarla.
Por más que intentaba dormir, no lo lograba, el aroma de aquella hermosa mujer aún seguía en su cuerpo, por ello no quiso ir a bañarse, necesitaba sentirla aunque sea de esa forma.

Jamás me había sentido de esta forma. ¿Qué me está sucediendo? No puedo evitar oler su aroma en mi piel como si fuese un adicto, tampoco puedo olvidar todo lo que hicimos. ¡Es absurdo! ¿Realmente una humana me tiene así de obsesionado? ¿Qué hizo para tenerme así?.

Gruñó de frustración, sintiéndolo  resonar en su pecho. Estaba furioso. No podía aceptar el sentirse más que atraído a aquella peligrosa mujer, porque para él lo era, no sabía mucho de ella más que era una espía y la mujer más atractiva que había visto en su vida. Y eso no le gustaba, odiaba sentirse atraído hacia una mujer humana de la cual no solo él desconfiaba, si no también su familia, por que Justice había aceptado que trabajara en Homeland para descubrir sus verdaderas intenciones pero no habían descubierto nada al respecto aún. Esa mujer era un misterio. ¿Estaba del lado de ellos o solo es una espía mandada por el gobierno de Estados Unidos? O peor aún, ¿una espía de Mercile?, negó con la cabeza Fierce, algo dentro de él le decía que confiara en ella, que era una buena persona, pero prefería ignorarlo, no quería confiar y salir engañado.

–Necesito olvidar lo que pasó. No volverá a pasar jamás. –se dijo a sí mismo Fierce y después de bañarse, fue al bar de Homeland para divertirse con sus amigos un rato, necesitaba un respiro.

–Qué bueno que viniste, Fierce. –dijo Slade cuando lo vio acercarse a la mesa donde estaban él, Harley, Fury, Tiger y raramente Valiant.

–Necesitaba un respiro... –dijo Fierce y todos asintieron con la cabeza, entendiendolo.

–A veces salir un poco con amigos hace bien ¿No lo crees? –dijo Tiger mientras golpeaba su hombro bromeando.

Fierce solo giró sus ojos, Tiger amaba fastidiarlo.

–¿Cómo están yendo las clases? Escuché que tienes una compañera de trabajo humana MUUUUY interesante. –dijo Fury y Fierce gruñó levemente.

–Ni me hables de esa mujer. Tendré que dar las próximas clases yo solo. Es irresponsable, soberbia, engreída, mandona, agh, la detesto. –exclamó con enojo Fierce y todos en la mesa se miraron entre ellos sin decir nada.

–Así empieza todo, Fierce. ¡Ah, qué recuerdos! Cuando ví a mi Doc por primera vez... –Slade se quedó mirando a la nada mientras recordaba su historia con su mujer y Fury rió.

–¿Quién diría que terminaríamos acoplados a hembras humanas...? –Fury, Slade, Tiger y Valiant sonrieron, mientras Harley y Fierce se quedaron callados.

–Hablando de nuestras mujeres... ¿Cómo está Tammy, Valiant? –preguntó Slade.

–Feliz, cuidando de nuestro cachorro, aunque estoy algo... Preocupado. Por eso vine hoy. –dijo Valiant y su semblante cambió drásticamente a uno muy serio.

–¿Qué sucede? –preguntó Harley.

–Hoy recorrí como siempre la Reserva y olí a una desconocida, pero su olor estaba mezclado con el de alguien. –confesó Valiant y todos lo observaron.

–¿Una desconocida? –dijo Tiger. –Pero si a las hembras no les gusta ir a La Reserva porque La Zona Salvaje es peligrosa...

–Si, pero lo más raro de todo esto es que... No olía completamente a Nueva Especie. –Valiant observó las expresiones de confusión de todos y aclaró –Su olor tenía algo raro...parecía estar en celo y...algo más había en el aire que no logré identificar.