Mellizos Malfoy

¡Darian Malfoy! ¡Draco Malfoy!

El 05 de junio de 1980 el último matrimonio de la familia Malfoy tuvo a dos hijos... Draco Malfoy y Darian Malfoy...

Ellos fueron criados como reyes, siempre tenían todo lo material que pedían... Pero como todo tiene un precio, siempre vivieron intentando ganar la aprobación de su padre Lucuis Malfoy quien nunca parecía estar conforme con ninguno de sus hijos... Por otro lado Narsissa si era buena haciendo el papel de madre

Siempre crecieron con la importancia de la sangre por delante, debían quedar en la casa Slytherin y ser los mejores alumnos... Todo por aprobación de Lucuis

Eran unos mellizos de cabello rubio platinado, el chico con el cabello corto peinado hacia atrás y con gelatina para cabello, la chica con un largo de casi hasta sus nalgas, extremadamente liso natural, no tenía ni una arruga su cabello

Draco era más alto que Darian por al menos 10 centímetros, el crecía mucho y ella no lo hacía casi...

El cuerpo de la chica era bastante desarollado para tener 11 años, el de el chico era normal...

Los dos tenían mirada fría y penetrante, y su rostro que solo decía una palabra “Maldad”...

Ellos eran muy reconocidos por todo el mundo mágico, prácticamente famosos, debido a su riqueza y a su padre el cual trabaja en el ministerio de magia... Por esta misma razón todos sabían que los mellizos Malfoy no eran de juegos, eran determinados, centrados, ambiciosos, astutos, egoístas y sobre todo con una belleza sobre natural... Lógico puesto que ellos tenían descendencia veéla...

Vivían en una gran mansión, muy oscura y tenebrosa pero a ellos les gustaba

Ellos solían ser muy fríos con todo el mundo, pero entre ellos eran un amor en persona... Eran más cariñosos cuando no estaban en público... Tenían que mantener una reputación impecable pero era inevitable sonreír con sinceridad cuando se trataba de ellos entre los mismos

NARRA DARIAN

Me encontraba en la estación con mi familia, estábamos los cuatro con vestimenta muy elegante y formal

Recuerden, mantengan su reputación impecable... Queden en slytherin... No se junten con sangres sucias y no sean una decepción para en apellido Malfoy- Dijo Lucuis mirándonos fijamente, nosotros solo asentimos abrazamos a Narsissa y entramos a el tren agarrados de mano... Cómo siempre solíamos caminar

D... ¿Y si no quedo en slytherin?- Dijo Draco

Eso no pasará, D... Todo estará bien- Dije sobando su espalda mientras buscábamos un compartimiento vacío, al encontrarlo nos sentamos y hablamos todo el camino

Al llegar pusimos en marcha el plan que nos había dicho nuestro padre “Hacernos amigos de Harry Potter”

Ahora pasarán por esa puerta hacia el gran comedor junto a sus demás compañeros... Pero antes serán seleccionados en una de las cuatro casas de acuerdo a los rasgos de su personalidad... Las casas son Gryffindor, Hufflepuff, Ravenclaw y Slytherin...- La profesora Mcgonagall siguió hablando pero la verdad dejamos de prestar atención

Ella es Darian y yo Malfoy, Draco Malfoy... Deberías tener cuidado de no equivocarte con tus amistades y juntarte con los mejores- Dijo Draco extendiendo su mano hacia Harry Potter, la verdad a mi no me gustaba hablar mucho así que me límite a observar, solo hablaría si era necesario

Creo que el único equivocado aquí eres tú- Dijo Harry Potter a lo que yo puse cara de asco hacia el y luego al estúpido a su lado que se rió por la situación... Una de las pocas cosas que no soportaba era que se metieran con mi hermano así que lo defendí

¿Te da risa la situación? Yo ni siquiera tengo que preguntar tu nombre, ese cabello, esa ropa vieja y usada, ese olor... Tienes que ser un Weasley- Dije con tono frío que aseguro hizo estremecer a más de uno que me escuchó

Draco sonrió orgulloso de mi, los dos nos limitamos a volver a nuestros lugares y seguir escuchando el discurso de la profesora... Luego de un rato entramos a en gran comedor y al vernos y reconocernos solo se callaron, algunos hacían comentarios como “Si verdaderamente hermosos” “Me dan miedo” “Son lindos pero se que no les llegó ni a los talones” cosa que a Draco y a mi solo afectaba en nuestro ego que cada vez subía más

Comenzaron a llamar alumnos para escoger sus casas

¡Malfoy Darian!- Dijo la profesora, Draco me sobó la espalda haciendo que mis nervios bajarán notoriamente

Mmm, fría, mala hasta los huesos... Ambiciosa a más no poder... Yo digo ¡SLYTHERIN!- Yo crucé miradas con Draco y los dos teníamos la misma sonrisa orgullosa en nuestro casi idéntico rostro... Lo único distinto era que sus ojos eran más tristes que los míos y su nariz un poco más grande, de resto los dos éramos iguales, con los ojos grises y labios ligeramente gruesos

Me senté en mi mesa en un asiento asegurándome que había otro asiento al lado para mi hermano...

Ho-hola...- Escuché decir a un chico rubio más grande que yo... Lo ignoré y seguí con mi mirada fría en mis uñas

¡Malfoy Draco!- Escuché que llamaron, sin llevar mi mirada a el estaba atenta

Mmm, buscas sed de aprobación... Eres malvado con las personas... Astuto y muy ambicioso creo que estás bien en ¡SLYTHERIN!

Sonreí orgullosa de mi mellizo sin despegar mi mirada de mis uñas, el se sentó a mi lado y puso su mano en mi muslo como casi siempre hacía

Hicimos contacto visual, de esos en los que nos comunicabamos, estábamos orgullosos el uno de el otro por la casa en la que habíamos quedado

Soy Adrian Pucey- Dijo el mismo chico que antes me había saludado

Draco le lanzó una mirada asesina por haber dirigido su palabra a su melliza... Yo miré al tan Adrián con cara seria, Draco y yo cruzamos miradas y luego voltee de nuevo a Adrián para mirarlo con asco

¿Crees que si quisiera saber tu nombre... No lo hubiera preguntado?- Dije para proceder a comer una manzana roja y Draco una manzana verde

Luego de cenar los prefectos nos dieron un recorrido por todo el castillo y luego por slytherin

Draco y yo nos separamos para ir a nuestras nuevas habitaciones la mía por el lado izquierdo que era el de las mujeres y la de Draco por el lado derecho que era el de los hombres

Al ser una Malfoy tuve una de las mejores habitaciones y no la compartiría con nadie

Entré, ordené mi ropa, libros, cama y baño al observar bien me di cuenta que la sala común y las habitaciones estaban bajo el lago negro...