Capítulo uno

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—Desde la parte en que cambian a la formación final —indicó el Seojoon, a lo que nosotras asentimos—. Cinco, seis, siete, ocho.

La música comenzó y así mismo la coreografía.

Teníamos visibilidad de todas en el grupo debido a los grandes cristales frente a nosotras que reflejaban nuestros movimientos y formaciones.

The Ladies Clan.
Somos un grupo de baile formado por cinco chicas, y nuestro entrenador y representante, Park SeoJoon.

Nos conocimos gracias a que todas logramos sobrevivir a las audiciones para la mejor agencia de baile, y digo sobrevivir porque son realmente estrictos.

"—Técnica, precisión, ritmo y pasión; es lo que hace a un buen bailarín. " recuerdo que nos dijeron antes de dar los nombres de las personas que habían logrado entrar.

Pero hasta ese momento no éramos aún un grupo.

SeoJoon es uno de los entrenadores y, luego de estar tres meses en "periodo de prueba", entre veinte bailarines, nos ha escogido a nosotras siete con la idea de participar en el evento de baile más importante de la ciudad: Show your moves.

Un evento en el que participan grupos de bailes, pasando por distintas categorías y estilos, pero donde solo hay espacio para tres ganadores; y en el cual resultamos con el primer puesto.

El año pasado también quedamos campeonas en la competencia nacional, y ahora nos preparamos para las semifinales en Dance Around The World, la competencia más importante a nivel mundial.

Debíamos dar lo mejor de nosotras, era la primera vez que un grupo de chicas llegaba tan lejos en este tipo de competencias.

—Necesito más expresión, Hana —exigió SeoJoon.

Sin dejar de hacer la coreografía, crucé hacia la segunda fila de la formación final para tomar mi puesto y hacer la parte final. La música dejó de sonar y mantuvimos la posición final durante unos segundos antes de tomar aire y regular nuestra respiración.

El Señor Park aplaudió durante unos segundos y se acercó a nosotras.

—Ha sido un buen trabajo por hoy, chicas —felicitó—. Cuídense y no dejen de trabajar en la coreografía. Las veo el lunes —nos dio una sonrisa y una pequeña reverencia.

Fui a tomar un poco de agua para luego ir a los vestidores por mis cosas.

—Necesito tomar una ducha en este instante —comentaba Hana llegando a mi lado.

—Opino lo mismo. Hasta aquí apesta —se burló Mai, quien venía detrás de ella.

Hana y Mai, las hermanas Yang. Ambas están llenas de la misma energía, son dos chicas con las que puedes hablar y nunca faltarán las risas.

—Pierdes el poco de humor que te queda, hermanita —atacó Hana.

Mai la miró con los ojos entrecerrados y Hana le mostró su lengua, como una niña pequeña.

—No comiencen —advertí tomando mis cosas.

—Sí, mamá —dijo Hana divertida. 

—¿Harán algo esta noche? —preguntó Lea llegando con nosotras —. Dahae y yo pensábamos salir esta noche, ¿Quieren venir?

Shin Lea, mi mejor amiga. Es una castaña oscura a la que le encantan las fiestas y gastar dinero en compras. Pero, cabe destacar, que sabe cuál es su límite. Es inteligente y determinada.

—¿Rossi? —preguntó Hana con una sonrisa.

Rossi es un bar que solemos frecuentar. No es un lugar muy concurrido, eso nos gusta, y nos hemos hecho amigas del hijo del dueño del lugar, por lo que somos algo así como "clientes especiales".

—Rossi a las nueve —contestó Lea.

Y así se formaban la mayoría de planes en nuestro grupo. Las cosas salían así: espontáneas. Nos gustaba salir y pasar tiempo juntas, han sido casi tres años en los que hemos convivido y nos hemos vuelto muy cercanas.

—¡Oigan! Hacen planes sin mi —reprochó Yuahn, la líder del grupo.

Todas reímos ante su reproche. Normalmente Yuahn se quedaba planeando los siguientes ensayos y posibles eventos junto a SeoJoon, y algo nos decía que ese par se traía algo.

No lo negaré. Es un hombre, unos siete años mayor que nosotras, pero muy atractivo.

—Claro que no —dije mientras la abrazaba fingiendo consolarla —. Iremos a Rossi a las nueve, no hace falta decir que esperamos verte ahí ¿O si?

—Estaré allí —respondió con alegría —. Debo irme, las quiero —lanzó un beso al aire para todas.

—Cuidate —dijimos al unísono.

Al terminar de tomar nuestras cosas, caminamos hasta el ascensor y una vez allí bajamos hasta el primer piso. Las hermanas Yang se despidieron de nosotras y tomamos caminos diferentes.

Lea y yo compartimos un apartamento, no está lejos de la agencia por lo que es fácil llegar caminando.

En el camino hablábamos de la semifinal, la coreografía, qué nos pondríamos esta noche y otros temas sin importancia.

Eran las 6:35 p.m. cuando llegamos al apartamento. Tomaríamos una ducha, comeríamos algo para no ir con el estómago vacío y por último sería arreglarnos para salir.

—No tardes —dijo Lea con una sonrisa burlona.

Reí. Era ella quien se tardaba casi una hora en el baño, quién sabe haciendo qué.

Entré a la habitación y dejé mis cosas en su lugar. Mi teléfono vibró avisando que me había llegado un mensaje.

Ladies Clan 💋

[ Yuyu: Chicas! Cambio de planes ]

[ Hanana: ¿Ya no iremos a Rossi? :( ]

[ ¿Que pasó, Yu? ]

[ Yuyu:  *Foto* ]

MaiMai: Por mí esta bien

[ Cuenten conmigo! ]

[ Y con Lea también 😂. Está tomando una ducha pero segura no dirá que no]

[Hanana: Sameeee ]

[ Lea <3 : Ustedes digan fiesta y ahí estaré ]

[ Yuyu: Paso por ustedes a las nueve💕 ]

Una notificación me hizo salir de la conversación grupal.

Lea <3

[ ¿Ya estás gritando de alegría?  👀 ]

[ Muy graciosa tú ]

[ Jajaja no soportas mi humor, mujer ]

[ Es tu oportunidad, ponte preciosísima  ;) lo volverás loco ]

[ Él y yo solo somos amigos, Lea ]

[ Nunca dije lo contrario y no he nombrado a nadie ]

[ Te odio ]

Dejé el teléfono a un lado y me tiré a la cama con una sonrisa en el rostro. Otra notificación hizo que volviera a tomar mi teléfono. 

Jooheon 

[ Te veo esta noche ;) ]

[ Te veo en la noche, Lee ]

Cuando nadie ve; Lee JooheonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora