Jason ha renunciado a sus planes de venganza, pero sigue luchando por controlar su propia oscuridad y hacer las paces con los Titanes y Bruce. Todo va a peor cuando termina atrapado en otra Tierra, obligado a enfrentarse a aquello que más teme y odi...
Ahora se vienen 2-3 capítulos más tranquilos para ir construyendo un poco la relación entre Jason y Courtney.
Sinceramente, Jason ya había olvidado lo que era pasar unos días tranquilos sin que nadie intentase matarte. De no ser por el pequeño e insignificante detalle de que estaba seguro al 98,7% de que nunca volvería a su Tierra, casi podría tomarse esto como unas merecidas vacaciones.
Habían pasado exactamente 15 días desde que llegó a Blue Valley. En ese tiempo básicamente había estado trabajando en el taller de Pat, y entrenando. Exceptuando un par de ocasiones contadas, no había acompañado a la JSA en ningún momento. No era que tuviese nada en contra de ellos (de echo parecía que ahora ya todos le aceptaban sin ningún problema) pero ya había dejado claro desde el primer día que solo les ayudaría de vez en cuando si ellos lo necesitaban, y la mayor parte del tiempo no parecían necesitarlo. A fin de cuentas, llevaban casi dos años haciendo esto juntos, obviamente sabían lo que se hacían.
De todas formas pasaba la mayor parte de su tiempo libre con ellos, entrenando o dándoles algunos consejos puntual. Siendo sinceros, tenía que admitir que no se desagradaba del todo pasar tiempo con ellos, incluso se sorprendía de vez en cuando disfrutando de su compañía...
... Especialmente de la de Courtney.
Ella era con la que pasaba más tiempo de todos. Para justificar su repentina llegada a la ciudad, y que hubiese sido contratado en el taller tan deprisa, habían inventado la historia de que era un familiar lejano de Pat (El hijo de un primo segundo, o algo así) y se iba a quedar en Blue Valley por unas semanas, o un par de meses. Eso también había provocado que las dos primeras noches las pasase durmiendo en el sofá de la casa de Courtney, antes de encontrar un piso barato en las afueras donde poder mudarse.
Courtney le había estado contando prácticamente todo sobre como se había formado la nueva JSA, que había ocurrido con la antigua, su padre, la ISA... La verdad, le había contado tantas cosas que, si bien su intensión había sido revelar lo mínimo posible de si mismo, al final le había acabado contando también algo de su pasado, especialmente su infancia en Gotham y su tiempo como Robin.
Una parte de él se repetía que no era buena idea formar relaciones muy estrechas con nadie de esta Tierra, en caso de que finalmente pudiese regresar a la suya en algún momento pero, sinceramente, dudaba que eso fuese nunca a pasar, de después de dos semanas y, de todas formas, no era como si planease invitar a Courtney a salir ni nada parecido, tan solo se estaban haciendo amigos...
"Hey, Jay"
Jason levantó la cabeza del motor que estaba revisando para ver justamente a la chica que había estado ocupando sus pensamientos dirigiéndose hacia él, con una sonrisa en su rostro.
"En realidad, prefiero que me llamen Jason"
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"¿En serio? Yo diría que Jay te pega más. Va más acorde con tu imagen" Se burló Courtney, con una sonrisa picara.
Jason rodó los ojos, pero la más leve insinuación de una sonrisa se estaba formando en sus labios "Lo que tú digas, Court. ¿Donde están los demás?"
