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Jungkook tenía una pelea con sus yo internos.

-Eso era lo que querías.

-Corre y consuelalo tú, dile que lo amas.

-No, tu lo odias, siéntete feliz, te ama y llora por tu falta de cariño. Lo lograste campeón.

-Solo tu sabes tus verdaderos sentimientos, ojalá que no sea muy tarde el día que te arrepientas.


Ojalá que ese bebé no esté lejos de tu el día que con todo tu corazón desees besarlo y abrazarlo.

El día que necesites gritarle que lo amas.







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Jimin se empezaba a rendir contra sus ilusiones, mientras una suave mano acariciaba su cabeza.

-Duerme mi pequeño.

Al poder cerrar sus ojos y que pudiera dejarse llevar por la ilusión, una imagen se hizo presente.

-Jungkook es bueno, el te quiere.

Él se veía de niño, y podía ver a su abuelo.

Él quería acercarse, sentía que en su cuerpo no existía ese miedo, cómo cuando su abuelo lo abrazaba y le prometía que todo estaría bien.

-Yo seré esa estrella que nunca dejará de brillar, esa que cada que mires el hermoso oscurecer su brillo te robara la atención, seré esa hermosa estrella que estará dispuesta a escucharte y a verte llorar. Y cada que lo hagas también estaré a tu lado, aferrándome a ti, aunque no me veas yo siempre estaré ahí mi bebé.

Seré cómo los rayos del sol o cada paloma que se pose en tu ventana cada que estés sólo, seré esa esperanza que necesitas, seré la respuesta de tus preguntas. Seré la luz del oscurecer y la flecha que te guiará al verdadero camino, solo debes creerlo, ser fuerte y seguir lo que quiere tu corazón, recuerda mi pequeño, yo estaré ahí.


Recuerda que yo te amo con todo el corazón.







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Y el día siguiente llegó, no hubo ni un solo momento que Jin no haya estado a su lado, que Taehyung le preguntara a Lisa por Jimin, que Jungkook se haya esforzado por no ser débil ante su corazón y que se negara hacerle caso a ese alguien que le decía que todo era su culpa.


Porque. "No lo era".


-Te necesita, ve a verlo. Dile lo que sientes.

-No sientes nada, no te engañes, lo odias. No lo olvides.

-No puedes resistirte ante tu herido corazón, no sufras.

-El bastardo enfermo, lo logró. Él lo destruyó.

-El le arrebato todo lo que le pertenecía, el malogro su infancia, él lo hirió, logro que su abuelo lo haga con cada falta de atención que le daba. Con cada; juega conmigo que fue ignorado.

Jungkook ya no resistía y eso ni un puto yo podría cambiarlo.


Todo eso estaba matándolo.


Necesitaba olvidar los dulces labios de Jimin, su tierna mirada y su suave piel.










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Mientras Jungkook trataba de entrar en "razón" tocaron su puerta, y antes de que decidiera abrir se abrió por si sola.

Ahí estaba Jimin, acercándose a él, con miedo al rechazo, sin querer darlo a notar.



-Hy-hyung.- La dulce voz del menor, era quizás lo único que Jeon necesitaba para entrar en razón.- es-esta bi-bien?.-Tenia miedo, pero estaba combatiendo su amor contra el temor, y el amor iba ganando.



-Jimin lárgate a tu cuarto.- Y Jungkook trataba de no mirarlo, de rendirse ante lo que quería ser.

Los ojitos del menor se cristalizaron, bajó su mirada, y sus manos temblaban, estaba siendo rechazado.


Otra vez.




-hy-hyung.- Sollozo, su voz era entrecortada y sin querer lágrimas bajaban.



No hagas esto más difícil Jimin, ahora solo quiero tomar fuerza para volver a sentirme como antes, no quiero lastimarte.

Ahora no.

-Hy-hyung no meig meignore, po por fa favor.- Quiso acercarse, y es que temía, temía que lo lastimen, pero también sentía que amaba a su hyung.


¿Que debería hacer?

-Ya te dije que te vayas.- Jungkook se paró, y abrió la puerta logrando que Jimin lo mire.- Fuera.

Está situación era tan difícil, la situación estaba rompiendo los sentimientos del más pequeño y aunque trato de negarse, asintió.



Quería que su hyung no estuviera molesto, y solo le obedecería, no había servido tratar de ser sincero, de que su hyung se entere cuánto lo amaba.

No había servido luchar contra su mayor miedo.

¿Porque? Porque su hyung parecía no importarle y así fue. Salió del cuarto, y se asusto al sentir cómo él otro cerró la puerta con brusquedad.

Ni siquiera un animal merecía ser tratado de esa manera y la tristeza consumió el ser del menor, haciendo que llorase.


Hyung ámame, ámame otra vez.

No podía ser fuerte, nunca pudo, pero estaba intentándolo.

Quiero que me abrace.



Tristemente justo en ese momento Jungkook estaba tratando de negarse a eso.


¿Él destino que tenía planeado para ellos?









Créditos a su autora original.
seokjinl1905



Aicko Min 💜



Errores que vean, me dicen para corregirlos.

AUTISMO (Kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora