Loving You Is Easy (Austin Mahone & Ariana Grande)

Capítulo 2

Ariana's POV:

Me levanté temprano. Desayuné. Y fuí directo al estudio. Llegué y estaba mi manager con un chico, supuse que era Austin y así era.

-¡Ariana! ¡Hola!-Dijo Scooter alegre.

-Hola -Dije sonríendo.

-Ven, aquí está Austin. -Dijo Scooter guíandome.

-¡Ariana! Hola, tanto tiempo sin verte. -Dijo Austin sonríendo, y tenía una hermosa sonrisa.

-Hola, Austin -Me acerqué.

-Empezemos. -Dijo Scooter agarrando unos papeles.

Nos mostró la canción, era muy romantica.

-¿Quién la escribió?-Pregunté a la vez que leía.

-Yo.-Dijo Austin.

- Se nota que estás enamorado. ¿Quién es la afortunada? -Pregunté.

-Mis Mahomies. La escribí pensando en ellas y su amor incondicional. -Dijo Austin.

-Oh. Y, ¿Que tal las cosas con Camila?-Pregunté.

-Terminamos. Pero quedamos cómo amigos. -Sonrió falsamente.

-Está todo listo, grabemos. -Dijo Scooter interrumpiendo.

Grabamos y quedé enamorada de la canción. Luego Austin se acercó a mi, y pude ver sus hermosos ojos color hazel.

-¿Cuándo podemos vernos? Ya sabes, para hablar de la canción, los ensayos, las presentaciones y esas cosas. -Dijo Austin y me guiñó un ojo.

-¿En mi casa está bien? Tengo un piano. Pasame tu número y te envío mi dirección por mensaje. -Dije.

-Okay. Te veo allá. -Dijo y anotó su número en una hoja de papel.

-Es un placer trabajar contigo. -Dije y sonreí.

Fuí a almolzar con mi Nonna y me dí cuenta de que no recibí ni un mensaje de Sean. Qué raro.

Tocaron el timbre y fuí a atender, era Austin.

-Hola -Sonreí.

-Hola, Ari. ¿Puedo pasar?

-Claro -Reí.

Cuándo estaba con él no sabía que me pasaba y se sentía bien, muy bien. Ensayamos en el piano y le invité algo de beber.

-¿Y que tal las cosas con Big Sean? -Preguntó Austin y bebió un poco de su jugo.

-Bien. El es tierno.-Dije.

-Me alegro. -Dijo y llegó Touluse y lo lamió.

- Creo que te quiere. -Reí.

-Es tierno. -Sonrió.

-¿Seguimos?

-No. Tengo que irme. Debo trabajar en mi próximo album.

-Está bien. Seguimos otro día.

-Por supuesto.-Se levantó.

Nos abrazamos y lo acompañé a la puerta. Se fué y me quedé sóla en casa, entonces llamé a Sean.

-¿Hola? -Contestó Sean, se lo escuchaba nervioso.

-¡Hola!, ¿Puedes venir a mi casa? -Dije.

-No, lo siento. -Parecía que estaba con alguien.

-Okay.

-Fin de la llamada-

Esto era raro, el nunca se negaba a venir.