Ya cayó el gatito

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Maratón 2/6?

El pelirosa apagó su teléfono y lo guardo en su bolsillo trasero de su pantalón, bebió lo último que quedaba en la copa entre sus manos para después dejarla en la barra y a pasos lentos y mirada desafiante se acercó hacía el chico castaño oscuro que se hallaba a un par de metros.

El castaño al darse cuenta de que el pelirosa iba hacía el, se sintió demasiado nervioso, bajo la mirada y fingió que no le había visto.

— Hola.— Le saludo tranquilo

— Oh, hola.

— Bien, seré directo. Desde hace rato que no me quitas la mirada ¿Sucede algo?

— Ah... Eh... Mmm.... Amh...— El castaño no podía articular palabra alguna, estaba muy nervioso por haber sido descubierto

Jimin soltó una risa divertida, pues la actitud del chico era muy graciosa, se veía tan asustado como si Jimin fuese a golpearlo.

— Oye, tranquilo, no voy a hacerte nada.

— Am, yo... Lo siento, n-no que-ria incom-modar— Hablo aún nervioso

— Soy Jimin.— Se presentó estirando su mano en saludo

— Si lo sé.— Habla sin pensar

El pelirosa le mira algo confundido pero no le da mucha importancia pues es muy conocido entre sus compañeros del colegio.

— Soy Taehyung.— Se presenta igualmente

— Un gusto Taehyung. ¿Sabes? Tu nombre y rostro se me hacen familiares

— ¿En serio?

— Si... Pero no recuerdo de dónde ¿Nos hemos visto antes?

— B-bueno, íbamos juntos en secundaria.

— ¿En serio?

— Si, te sentabas junto a mi y-

— ¡Claro! Ya te recuerdo, ¡Dios, TaeTae! ¡Dios, has cambiado mucho! ¿Puedo abrazarte?— Le interrumpe asombrado y emocionado

— Si, claro.— Acepta sonriendo 

— Dios, no puedo creerlo, perdóname por no reconocerte TaeTae.

— No te preocupes, no te culpo.

— Pero bueno, cuéntame ¿Cómo estás? ¿Cómo te ha ido?

— Bueno, mis estudios van bien gracias al cielo, aunque... Bueno, matemáticas..., sabes que nunca ha sido lo mío.

— No eres el único.— Ríen

— ¿Recuerdas cuando en el examen el maestro Xian nos saco del salón por haber abierto el libro?— Rieron divertidamente ante lo que el pelirosado dijo

— Como olvidarlo, nos reprobó y luego nos separó de lugares.
— O cuando la profesora de inglés nos hizo bailar y cantar para no reprobar.— Recordó el castaño

— Si, fue vergonzoso tener que hacerlo frente a todos.— Admitió el pelirosa

— Sobre todo porque cantamos el abecedario en ingles.— Dice el castaño entre risas

— Tuvimos que presentarnos dos veces por eso.— Recuerda entre risas

Y así se quedaron un tiempo hablando de todo un poco, recordando sus épocas de secundaría, evitando los temas delicados obvio.

Solo es un Juego |AU Kookmin|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora