Capítulo 8 "Elegido"

10 2 1
                                    

Hola de nuevo, soy Sergio. Les hablaré por un rato que ha ido pasando. En resumen, Mizuki se disfrazó de sirviente para ver al rey, y sin darse cuenta, cometió muchos errores como romper el tesoro nacional, el plato favorito de su majestad, dañar el jardín, etc. Ahora está en una celda y la van a llevar delante del rey. Ahora si les dejo con Mizuki. 

He estado encerrada por dos horas y los guardias han llegado. Me llevaron a la fuerza ante la sala principal pero al entrar, reconocí dos voces conocidas. Era primer hermano y el rey. Que vergüenza e intentaba taparme la cara pero creo que mi hermano se dio cuenta al sentir mi olor. 

El olor es muy común en nuestra raza, es lo que ayuda a las madres encontrar a sus hijos. Una madre antes de morir o de separarse, le deja su poder a su primer hijo así fue como mi hermano lo obtuvo. 

Mi hermano agachó su cabeza al oír todos mis travesuras en el castillo y quería que la tierra me tragase. 

- Alto - grito uno de los sabios molesto - Esta joven merece la pena de muerte

Al oír esas palabras se me paro el corazón y dirigí la mirada hacia primer hermano que estaba sorprendido. 

- Mi rey, tengo algo que pedirle - dijo primer hermano arrodillado ante Yuudai que estaba sorprendido

- Continua - dijo serio 

- Podría perdonarle la vida a mi hermana. Le prometo dar todas mis tierras por la vida de mi hermana - sabía que mi hermano tenía la deuda con el vampiro pero ahora yo le aumenté su deudas. 

- Kamal, tendré una reunión a solas en tu casa mañana. Ahí decidiré si perdonar a tu hermana y lo que me propusiste - dijo y mando a los guardias soltarme y mi hermano me jalo del brazo hacia la salida. 

Por todo el camino, hubo un silencio incómodo. Llegando a casa, todos se sorprendieron verme junto a Kamal. 

- Floyd, enciérrala en su cuarto y no tiene permitido salir - ordenó cuando subió los escalones 

- ¿Qué has hecho? - preguntó quinto hermano mirándome 

- Primer hermano tiene una deuda con el rey de los Lobos por mi culpa - dije y me fui corriendo a mi habitación llorando. 

Al entrar, veo que Sergio aparece y se sienta en una silla. 

- De nuevo te metiste en problemas, no? - dijo y asentí la cabeza - Deberías estar agradecida que tu hermano no te haya castigado de otra manera - señalo el látigo que estaba colgado en la pared. 

- ¿Qué debo hacer? - pregunté mientras me limpiaba mis lágrimas 

- Deberías buscar un vestido adecuado para la visita del rey - le mire con una mirada asesina - No me mires así, deberías tomarlo como una oportunidad para conquistar el corazón de Yuudai 

Creo que esta fue la primera vez que desee matar a una persona.  

- Cállate - le grité y le quise dar un puñetazo pero se apartó y mi puño terminó en el piso causando un gran dolor - Por lo menos quédate quieto para poderte golpear - susurré 

- No quiero que en mi bello rostro quede marcas - dijo y me irrito más. 

Estuve todo el día intentando golpearlo pero al final me rendí y me eché en mi cama. Él se sentó a mi lado y acarició mi cabeza. 

- Aunque el rey te rechacé, puedes contar conmigo - dijo y desapareció 

- Sergio, cuáles son tus verdaderas intenciones? - me pregunté y sin darme cuenta me quede dormida 

Apuesta arriesgada (Finalizada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora