Capítulo 29: Detrás de escena

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Ozpin se tomó un momento y se quedó mirando en silencio ... el mayor error que había cometido.

¿Realmente podría hacer esa afirmación tan fácilmente?

Estaba seguro de que si pensaba un poco en ello, podría recordar un crimen o un error peor que había cometido y que le causaba aún más vergüenza o arrepentimiento. Ese era el mayor problema de tener una lista tan larga de agravios y errores de juicio ... no podía decidir cuál lo perseguía más.

Aunque era seguro que este era el más grande de los últimos tiempos. Había asumido un deber, un voto solemne y un trabajo para protegerlos del mundo cuando más lo necesitaban.

Y aquí estaba ... admirando su falta de acción y su falta de protección.

¿Lo odiaría ella? Si todavía estuviera despierta y pudiera hablar ahora mismo, ¿los maldeciría? No la culparía si lo hiciera. Incluso esperaría que ella lo hiciera.

Pero ella no pudo. Y es más que probable que nunca vuelva a tener la oportunidad de hacerlo. Debido a su fracaso, sus días estaban contados. Y todo lo que podían hacer ahora era aliviar su sufrimiento y hacer que los últimos días fueran cómodos.

...

Eso fue miedo. El mismo tipo de miedo desenfrenado que tenían los niños cuando se enfrentaban a la oscuridad. O los adultos tenían la idea de que estaban solos. Esta abrumadora y asfixiante sensación de incertidumbre que los tenía a todos, la gente elegida para mantener la cabeza fría y serena, corriendo en pánico. Porque ahora ... se enfrentaban a lo imposible.

Excepto que ya ni siquiera podía llamarse así. Porque sucedió. Este era simplemente un territorio inexplorado. Y si le sucedía a uno de ellos, existía la amenaza de que le podría pasar a cualquiera de ellos ahora también. Lo que significa que tenían que tener cuidado con esto y prepararse para posibles emboscadas posteriores. Una Doncella perdida fue una gran y trágica pérdida. Pero si esto les pasara a todos ...

...

Ahí estaba de nuevo. Estaba pensando más en el alcance de lo que podría estar sucediendo en lugar de centrarse en la víctima.

Esta pequeña ... esta joven ... su futuro le fue arrebatado por el sustituto de una vida de soledad y deber ... y ahora incluso eso le fue arrebatado por-por ...

...

Ozpin se quedó sin palabras. Simplemente dejó que el tono del sistema de verificación de signos vitales llenara el silencio y se quedó esperando.

Hasta que los sonidos de los tacones al chocar contra el suelo empezaron a resonar en el enorme subsuelo.

"Hola Glynda." Dijo sin siquiera darse la vuelta para dirigirse a su confidente más cercano.

"Hola profesor." La profesora rubia respondió con un tono reservado al encontrar al director en el sótano de la escuela con su 'invitado'. Miró hacia atrás para contemplar el pasillo insoportablemente largo y grande que tenía que atravesar para llegar a este punto del pasillo y agitó la cabeza con cansancio. "Es enloquecedor pensar que los constructores e ingenieros estaban en su sano juicio cuando decidieron hacerlo. construye un espacio así de grande debajo de la escuela ".

"Sí, bueno, si alguien llegaba tan lejos y estaba tratando de reclamar un tesoro o un artefacto que se escondía aquí, querían asegurarse de que los perpetradores al menos no se sintieran cómodos con su victoria". Una sonrisa irónica apareció en el rostro del director al pensar, "Un desafío final a lo que sea o quienquiera que haya roto nuestras defensas, supongo".

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