Prólogo: mamá, papá y como sobrevivir a la fama.

52 2 0
                                    

Prólogo: mamá, papá y como sobrevivir a la fama.

Casi todo el mundo piensa que llegó a este mundo porque sus padres deseaban tener un hijo, yo supe desde muy pequeña que mi nacimiento no había sido una cosa planeada. No os cuento esto porque tenga un trauma infantil, o porque me abandonaran al nacer, nada que ver. Que mi nacimiento no fuese una cosa esperada no significa que mis padres no me quieran, lo hacen. Mi padre me ama con locura, soy su ojito derecho y mi madre también me quiere, aunque en su caso a veces es difícil de adivinar. Se que mi nacimiento no fue deseado porque mis padres no se quieren, jamás se han querido y pese a que cuando nací intentaron estar juntos fue algo imposible. 

Mi padre es Ryan Burns, mejor conocido como el vocalista de The Lords, un grupo británico que se formó a finales de los ochenta y que se ha ganado un puesto en el top 10 de los mejores grupos ingleses de los últimos tiempos. Me horroriza pensar en mi padre como en una especie de Justin Bieber pero supongo que en su época lo fue... cuando se lió con mi madre tenía solo 18 años y ella 20. Mi madre, Rachel Jones, era y sigue siendo una reconocidísima modelo, vivió su época dorada durante los 90 y cuando se enrollaron ambos estaban al inicio de su carrera. 

Ser una celebrity baby no es tan bueno como suena, por un lado no discutiré que al tener unos padres forrados de pasta tienes todos los caprichos que quieres pero, por otro lado, es un rollo ver aireada la vida de tus padres en las revistas del corazón. Mi madre, es mi madre y la quiero pero debo admitir que también es una cabrona y un zorrón, le hace la vida imposible siempre que puede a mi padre y a mi me taladra la cabeza día si y día también, además va por su tercer marido. Papá es... papá, tiene un gran corazón, es tranquilo, algo despreocupado y tiene esa actitud de rockero que vuelve locas a las chatis, tampoco es ningún santo, no hay mes que no abras una revista y no se le vea acompañado por alguna chica guapa y demasiado joven para él. Durante un período de tiempo, en mi temprana adolescencia, me vi tentada por ese mundo de glamour, brillos, fiestas privadas, etc. A los 15 años me ofrecieron convertirme en modelo, no cabe duda que hubiera podido serlo, mis progenitores son tremendamente atractivos y la mezcla genética funcionó bien. Tengo el físico de mi madre: alta, delgada,... con algo más de curvas, nunca he seguido la dieta tan estricta que siguen las modelos por lo que tengo unos buenos y saludables kilos más que ellas en el cuerpo. La forma de la cara también es suya. Los ojos, azules, son herencia de mi padre ya que mamá los tiene verdes; y el cabello, pelirrojo, me viene también por parte de padre, aunque él es moreno, mi abuela paterna en su día fue pelirroja. Hice un par de sesiones de fotos, posé con mi madre para una revista de moda, pero me di cuenta que ese mundo no era para mi. Tuve una experiencia algo desagradable con un fotógrafo al que tuve que pararle los pies, y también viví un nada agradable episodio que involucraba drogas y alcohol. Yo misma fui quien le pidió a mis padres que me alejaran de todo eso, no quería seguir viviendo ni en Los Ángeles, ni en Nueva York. Me vine a Londres, a casa de mis abuelos paternos que seguían viviendo en la misma casita de Notting Hill en la que habían vivido siempre y estaban muy lejos del mundo de las celebritys. 

Lo creáis o no, he sido totalmente feliz en el anonimato. Casi nadie sabe quienes son mis padres por lo que llevo una vida muy normal: fui a la universidad para estudiar una carrera que ni siquiera tenía claro que me gustara, como todos mis amigos. Estuve un año de erasmus en Italia y hace solo dos veranos recorrí Europa con mi mejor amiga en un Interrail, sin a penas dinero ni lujos, pero fue la mejor experiencia de mi vida. Hace poco más de un año me independicé, en un momento de revelación tuve claro lo que quería hacer, me gustaba la música, mucho más que eso, me encantaba, pero a parte de desafinar como un gato al que han atropellado y tener cero aptitudes para tocar ningún instrumento, estaba el hecho de que continuaba queriendo ser anónima. Decidí que quería abrir un pub, un pub donde hubiera música en directo y donde los músicos desconocidos y con talento pudieran darse a conocer. Admito que nada de eso hubiera podido ser posible sin la ayuda de mi padre, él me dio el dinero para abrir el local y me presentó algunos de sus contactos en la industria. No se que era exactamente lo que estaba haciendo bien pero el hecho es que el pub funcionaba, cada noche se llenaba de gente, hubiese concierto o no y dos de los grupos que habían tocado allí habían conseguido firmar con una discográfica. Después de un año los contactos de mi padre casi eran innecesarios, se que al principio me hicieron caso por ser hija de quien era, pero estaba claro que a estas alturas confiaban en mi criterio musical, muchos cazatalentos de otras discográficas se presentaban en mi local cuando yo anunciaba en concierto a un grupo nuevo. Además, me estaba forrando... bueno no me estaba haciendo millonaria pero las cosas iban muy bien, le hubiera devuelto a mi padre el dinero que me prestó para empezar, pero ni siquiera quiso oír hablar de ello. Así que esa era mi vida, tranquilidad, música, buenos amigos y anonimato ¿una chica puede soñar, no?

Celebrity BabyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora