Capítulo 15

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  Li Ang se sorprendió por un momento y Song Yang fue perdido en sus pensamientos.
  
  "¿Cuál es el problema?", Preguntó Li Ang, mirando a Song Yang con perplejidad.
  
  "Está bien, acabo de verte mirando atentamente", dijo Song Yang con una sonrisa. Por supuesto que no podía notar el pánico en su corazón. Justo ahora, Li Ang parecía irse, lo que asustó mucho a Song Yang. Sin embargo, ahora, al ver a Li Ang girar la cabeza, sintió que estaba pensando demasiado.
  
  El marido y los tres se tomaron de la mano y pasearon por la calle. Hay mucha gente aquí y los caminos también están dispersos. El esposo y la esposa lo discutieron y decidieron ir al restaurante y vender el faisán que capturaron.
  
  Obviamente, Song Yang estaba muy familiarizado con la búsqueda de un restaurante. Tomó la mano de Li Ang y los dos giraron a izquierda y derecha hacia un restaurante. Un letrero colgaba en la parte superior del restaurante llamado Qingfenglou. Tan pronto como Song Yang se acercó, el ayudante de la tienda lo saludó felizmente. Song Yang silenciosamente metió un centavo en su mano. El ayudante escondió secretamente el dinero en su bolsillo.
  
  El ayudante se fue, y después de un tiempo, el comerciante salió con una balanza en la mano. Al ver a Song Yang, el comerciante sonrió y dijo: "Maestro Song es realmente bueno verlo. Acabo de comprar un conejo no hace mucho, y esta vez obtuve un faisán".
  
  Song Yang sonrió y dijo: "Gracias, comerciante, ten tómalo. Todos somos de hogares humildades. Si no fuera por el favor de Dios, que pudiéramos conseguir alguna presa, nuestra familia se moriría de hambre ". El comerciante sonrió y dijo:" ¿Será mismo que el precio anterior? "
  
  Song Yang Sonrió y dijo: "Gracias al comerciante, solo peselo al precio anterior". El comerciante lo sacó y lo pesó, eran unos 5 kilos (catties), 20 centavos por peso establecido, unos 100 centavos sumados .
  
  "Maestro Song, esta gallina pesa 5 kilos, son cien, por un kilo se da veinte centavos (yuanes), ¿qué te parece?", Dijo el comerciante con una sonrisa.
  
  "Gracias por el comerciante, lo aceptamos por este precio. El comerciante es una persona sincera, creo que no engañará a nuestra gente humilde". Song Yang sonrió y asintió.
  
  El comerciante sonrió, sacó una moneda de plata y se la dio a Song Yang. Song Yang le agradeció repetidamente y luego la familia salió del restaurante.
  
  "Este es el esposo de Song Gongzi, parece que no es una persona mundana". El comerciante miró a Li Ang y dijo con una sonrisa. También sacó un caramelo de su bolsillo y lo puso en la mano de Li Yuan.
  
  Una familia de tres salió feliz.
  
  Li Yuan tomó el caramelo y lo metió en la boca de Li Ang, "Papá, come, dulce".
  
  Li Ang sonrió y tocó la cabecita de Li Yuan. El pequeño llevaba una trenza altísima y se veía muy de espíritu local. Ang Lee le quitó la envoltura de papel al azúcar y luego se la metió en la boca al pequeño y dijo: "Yuan'er, estás listo para comer ". Li Yuan vio que su padre realmente no quería comérselo, así que se comió el caramelo con la boca. Es tan dulce.
  
  Song Yang miró a Li Ang con un poco de celos y gimió: "Mira a este niño Yuan'er, desde que te despiertas, solo piensas en ti y ya no puedes pensar en mí".
  
  Li Ang sonrió y apretó Song Yang. Con una mano delgada, sonrió y dijo: "Bueno, estoy pensando en eso naturalmente"
  
  Song Yang lo miró, sonrojándolo, sin decir nada.
  
  Después de tomar el dinero, el esposo y el esposo lo discutieron y decidieron comprar arroz. Cuando llegué a una pequeña tienda de arroz, una anciana estaba custodiando la tienda de arroz. Cuando la anciana vio a Song Yang, sonrió y dijo: "Xiao Song, ven a comprar arroz hoy".
  
  Song Yang sonrió, asintió y dijo: "Sí, tía, ¿hay arroz barato?"

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