Un hada entre los especialistas

Capitulo 13

Horas antes | Narra Artis

En estos dos días que llevo por el bosque, estuve observando desde lejos a mis compañeros especialistas, todos estaban como Hunter, ojos negros y sonrisas realmente aterradoras...

Entre dentro de Alfea, sabiendo que ahora estarían todos en clase, o eso pensaba, la nueva directora Rosalind me paro por el camino.

— Artis, ¿no deberías de estar en clase? - dijo detrás mía

— Así debería de ser

— ¿Y por qué no estás en tu clase?

¿Porque Andreas le da pereza enseñar a los otros a usar el arco y me usa a mi como profesor? Señora debía de darme su sueldo a mi... En fin.

— Bueno, estoy tratando de solucionar una cosa - dije sin girarme, sabía que si lo hacia la vería de esa manera.

— Mm, gírate

No me gire.

— He dicho que te gires

Seguía sin girarme

— ¿Acaso me estas ignorando? - dijo dándome la vuelta a la vez que me ponía unos grilletes como los que le había puesto la directora Dowling a Beatrix en aquella ocasión. Dolía y mucho — Bueno, esto iba a ser antes o después, llevarlo al calabozo

Y bueno así es como acabe en esta cárcel de hadas.

Bien, mucha gente en una celda estaría modo bolita en una fcking esquina o en su cama echado tan tranquis, ¡pero no! Yo al contrario estoy haciendo abdominales. Ya sé, vais a decir ¿Pero no era que tenía esos grilletes raros roba magia? Sí aún siguen ahí, pero había una razón por la cual hacía esto.

Si mantenía mi mente ocupada a lo mejor el efecto de la alucinación pasaba, pero no fue el caso, así que recordé estas cosas raras y pensé, quizás si me ponen esos grilletes la magia quedaría alumnado por tanto debía ponerme esos grilletes. Aún nadie ha bajado aquí, así que estaba más aburrido que una mona por esa razón me puse a hacer abdominales.

-Así que, haciendo ejercicio, teniendo en cuenta que esos grilletes duelen como demonios, lo digo por experiencia

Al oírla me descolgué de la barra para mirar a mi... ¿novia? la verdad no sé lo que es ahora, dejémoslo en ex.

-Estaba aburrido, nada interesante que hacer en esta mierda de celda al igual que no hay nada que hacer, así que para no volverme majara en el encierro decidí hacer ejercicio... Pero ahora la pregunta es ¿Qué haces aquí? – pregunte al ver que entraba a la celda con unas cuerdas

-Vengo a matarte – dijo atando mis manos a las barras de arriba de la celda.

Puta que oferton, lo que quería, nótese el sarcasmo, en fin. Tortura para el menda.

Narra Darcy

Estábamos caminando por los alrededores, aunque más bien buscábamos a Artis. Key nos guio hasta el ala oeste donde habían tenido a la ex loca/psicópata de nuestro querido hermanito. Escuchamos un grito, el cual venia de dentro de esas antiguas instalaciones.

-Ya me ocupo yo – dije para usar mis poderes de teletransportación

Me encontré a Artis metido en una celda, mientras que estaba atado de las manos en dos de las barras de arriba de él mientras Beatrix le torturaba.

- ¿¡Por qué mierda no te mueres?! – grito Beatrix

-Porque estoy contando 100 – 7 para aguantar el dolor y no acabar muriendo... - dijo Artis levantando lentamente la cabeza para mirarla. (lo del 100-7 es una referencia a Tokyo Ghoul ;3) – Además, necesitaras más poder para matarme

-Es cierto – dijo la nueva directora acercándose a Artis. – Yo me ocupo de él, Beatrix ocúpate de sus hermanas

Después de oír eso me pire de ahí lo más rápido posible junto con los demás, teníamos de planear un plan y rápido antes de que lo maten.

Narra Artis

Genial, estoy jodido ahora mismo.

-Bueno, Artis, ¿cómo conseguiste la llama azul?

-Ehm, nací con él, ¿Por qué? ¿Sabías del mito verdad?

-Así es, digamos que quiero ese poder y para conseguir lo tengo que matarte

-Y una mierda – dije para empezar a crear fuego a mi alrededor consiguiendo liberarme de esos estúpidos grilletes y cuerdas, mi mirada se posó en la directora. – Es mejor que no me amenaza de nuevo, sino deseara estar muerta de verdad – dije yéndome sin más de ahí ya que no se movió de donde estaba.

- ¿Cómo es posible que atravieses la trampa sin hacerte daño?

-Soy alguien que tiene un poder muy antiguo, es lógico que la magia "moderna" no me afecte

Me fui corriendo de ahí, fui a buscar a mis hermanas me encontré con Beatrix congelada junto con Riven y Dane intentando descongelarla, trágico final para ella, seguí corriendo y me las encontré.

Stormy, Darcy y Icy me miraron ya que Key ladro y se lanzó a mi para empezar a lamerme. -Yo también te echaba de menos, pequeño, chicas, ¿dónde está mi espada?

-Aquí – dijo Icy dándome la espada

-Voy a hacer que esto acabe ya – dije desfundándola, cerrar mis ojos para suspirar y al abrirlos mire hacia el frente, otra vez mi alrededor se volvió oscuro.

-Veo que has conseguido librarte de la alucinación, y yo pensando que eras un inútil – dijo el otro Artis

-Acabemos con esto quieres

-Oh, se te ve con ansias de acabar con todo este royo – dijo, aparecieron delante de mí. – Bien, empecemos

Como en cada pelea de espadas, cada uno de los dos nos estuvimos probando, las cosas como son él era mucho mejor que yo ya que como era de esperar tenía mucha más fuerza e incluso más destreza, pero, creo en mí y por esa razón deje que cometiera el peor error que podía haber.

Hice que acabara detrás de mí, como era de esperar me rodeo el cuello con su brazo.

– Parece que este es tu final pequeño Artis- dijo muy confiado de sus palabras.

– ¿Estás seguro?

– Pues clar...

No deje que acabara la frase ya que atravesé a los dos con mi propio arma haciendo que esta se romperá, la oscuridad empezó a desaparecer me dejo ver a mis hermanas que estaban llorando.

– Artis... busca a R, ella tiene el cacho que falta del.... pergamino - dijo el otro Artis a la vez que me daba un pedazo de metal

El otro Artis desapareció, haciendo que yo empezará a escupir sangre, coloque mi mano en la herida y comenzó a sanarme, cosa que sorprendió a mis hermanas, me levante ya que me encontraba en el suelo. – Mm, solo hay una mitad del pergamino, la otra mitad lo tiene Rosalind - dije dándole la parte del pergamino a Darcy. – Vuelvo en seguida

Me fui hasta el despacho de la directora me puse a resolver los papeles del despacho, pero, nada, creo que iré a hacer le una visita al cementerio.

Tal y como dije fui al cementerio, era raro, pero no me encontré con nadie por el camino, era algo raro, pero, llegué rápido hacia el cementerio aun que tanta tranquilidad y todo tan... desértico, no me da muy buena pinta, que digamos.