Nuevas Sensaciones (Saiki x Kaido)

Única Parte

El chico de cabellos rosas se encontraba tumbado en su suave y cómoda cama, hacia apenas un 1 o 2 minutos que su madre lo acababa de llamar para que bajara a la primera planta, ya que había ido al supermercado a comprar gelatina de café, escogiendo la marca que Saiki más amaba. Saiki miraba al techo, el amaba con todo su corazón la gelatina de café, pero después de comerla por toda su vida sentía que esté dulce manjar se volvía parte de su rutina, con pesadez bajo a la cocina, tomo una copa de vidrio donde venía la gelatina, encima puso un poco de crema dulce, tomo una cuchara y se sentó dispuesto a degustar su gelatinoso chuche.

Tranquilamente la degustaba, hasta que el ruido de un móvil lo interrumpió de su agradable momento, era su padre, quién pidió que le llevará unos tomos de manga que había olvidado en casa, el no quería hacerlo, quería seguir comiendo la única cosa que aún por poco lo hacía sentir algo más que un vacío. Su madre al ver su reacción de no querer hacerle ese favor a su padre se ofreció para llevar los tomos con su padre, Saiki sabía que el trabajo de su padre estaba lejos y se sentía mal por hacer que su madre fuera hasta la oficina de su padre, tenía que elegir; la gelatina de café o su madre, después de reflexionar evidentemente eligió la gelatina de café. Su madre salió de casa y Saiki sintió un poco de paz al sentir su casa vacia.

Después de un rato acabo su gelatina, sabía que su madre tardaría en llegar, justo en ese momento el timbre sonó y sin previo aviso la puerta de su casa se abrió, irrumpiendo su paz.

-¡Compañero! Toque el timbre pero como nadie abrió entre - dijo Nendou abriéndose paso.

-Ni siquiera esperaste que abriera - dijo Saiki viendo a Nendou

-¿Encerio? Bueno, pasaba por aquí y decidí venir a ver, es que estaba por hacer la de todos los días pero mi madre llegó y ya no pude- explico con serenidad y sin titubeos

-¿La de todos los días? ¿A qué te refieres con eso? - en su vida había escuchado una expresión asi, sabía que Nendou era raro pero le dio curiosidad saber a qué se refería.

-¿Qué? ¿No lo sabe mi compañero? Estamos a punto de graduarnos y ya cumplimos la mayoría de edad ¿Y no lo sabes? -Nendou lo dijo sorprendió para luego hecharse a reír -Ya veo, mi compañero solo quiere ponerme en una situación incomoda, no caeré está vez- así como es de raro, salió corriendo de la casa de Saiki mientras reía.

Saiki a veces se lamentaba por tener un compañero tan raro como Nendou, pero aún así sentia curiosidad por saber que era eso que todos los chicos de su edad hacían y el no.

Tomo su celular y busco lo que Nendou le dijo, no encontró un significado tal cual, pero encontró otros sinónimos.

-Paja, jalarsela, la de todos los días, masturbarse...- había aún más sinónimos, pero con eso le basto para saber a qué se refería Nendou, con cara de asco quitó el móvil, de su vista.

A pesar de la repugnancia que le había causado lo que Nendou le quiso decir, seguía curioso, "¿ Por qué es que todos los chicos lo hacen?" Se preguntaba lleno de curiosidad decidió buscar como es que se hacía esa tal paja, buscado encontró que necesitaba una fuente de exitación, pensó en alguna fuente pero no tenía ni idea, busco por el internet videos para adultos, al fin y al cabo el ya tenía 18 años, ninguno le causaba nada, hasta que llegó a contenido para parejas gays, lo cual le hizo sentir un cosquilleo.

Aquel cosquilleo lo hizo sentir un extraño placer que le erizo la piel, fue un momento fugaz que disfruto completamente, ahora estaba excitado y tenía la necesidad de otra sensación así, por más que regresaba su mirada a la pantalla del móvil no lograba volver a sentir aquel cosquilleo.

Hasta que a su mente llegó aquel chico de cabello azul claro llegando a blanco, aquel que creía tener poderes que despertó algo en el en ese momento, asustado por esa sensación regreso la mirada a su móvil, donde los videos seguían reproduciéndose, sin poder evitarlo imagino a Kaido en aquella posición, lo cual lo hizo tener un grave problema. Había conseguido lo que quería, exitación, pero no como el imaginaba, sabía que en ese punto debía comenzar la de todos los días así que tomo valor, tragó saliva y con sus manos comenzó el trabajo, el líquido pre-seminal comenzaba a salir, y una extraña sensación lo recorría, por completo, a pesar de todo le gustaba, comenzaba a disfrutar el momento, le llevo tiempo para sentir un cosquilleo en la dona baja del abdomen, sin pensarlo le llegó un pensamiento fugaz nuevamente del peli-azul llegó asi a su clímax.