¡ C I N C U E N T A Y S I E T E ! | ❛ por ti y por mi. ❜

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Cha volvió a revisar la misma hoja por quinta vez. Le ardía ver a Minho cerca de Mingi, y hace un momento se los había encontrado en la entrada de su casa.

Por fin lanzó los papeles con frustración y volteó a su teléfono. Lo tomó y finalmente cayó en volver a ver aquellas fotos antes de su boda, cuando aún estaba con Minho.

Hyunjin solía tomarles muchas fotos cuando estaban juntos, y todas se las mandaba. Jeongin acostumbraba tomar el teléfono de Jisung y solía enviarle fotos de todo lo que hacían junto a Minho.

Con Lee había sentido algo que hace mucho tiempo no sentía, algo que sólo con Jungwoo sintió.

Minho tenía algo... "especial" que nadie más tenía.

Era su sonrisa.

Su mirada.

Su cariño.

Su carácter.

Su fuerza.

Su forma de manejar las malas situaciones.

Su manera de ver la vida.

Porque más allá de lo atractivo que era físicamente, Minho era lindo en todos los sentidos.

Se sentía como un adolescente con un amor imposible.

Y si, admitía completamente que todo era su culpa, su miedo al "¿Qué dirán?", a no saber como manejar la situación. Tendría un hijo y eso no era cualquier cosa, quería que su hijo creciera en un hogar, que no le faltara nada y estar al pendiente de él.

¿Pero acaso lo estaba haciendo con sus propios hijos? Sus hijos lo necesitaban mucho, y parecía como si hubieran vuelto a hace cuatro años.

─¿Por qué no se divorcia?─ preguntó Yugyeom dejando el café que Bang le había encargado.

Chan apagó su teléfono. ─¿A qué te refieres?─ preguntó, sabiendo claramente a lo que se refería.

─¿Puedo?─ preguntó Yugyeom señalando el asiento frente a él.

─Adelante.─ respondió Chan acomodándose en su lugar.

─Señor, llevo 16 años trabajando para usted, y conozco perfectamente a su familia y en especial a usted,─ indicó Yugyeom señalándolo. ─hasta hace poco más de un año yo seguía viendo a un hombre amargado de la vida que trataba a sus hijos como si fueran un objeto o como si no estuvieran.

Bang arqueó una ceja.

─Disculpe, señor, pero es la verdad.─ respondió Yugyeom encogiéndose de hombros.

─¿Me vas a aconsejar o a recordarme el pésimo padre que soy?─ preguntó.

─Ambas.─ respondió. ─Bueno, y es aquí donde llega quien todos creíamos como un niñero más, que duraría cuanto mucho dos semanas, como todos los demás. Sin embargo, eso no fue lo que pasó. Minho es una persona muy fuerte, que sabe lo que quiere y hace lo que sea para lograrlo, logró ganarse a cinco niños qué estaban igual o peor de deprimidos que usted.

─Yo no estaba deprimido.

─Por supuesto que lo estaba, señor. Y disculpe lo que le voy a decir, pero si yo fuera uno de sus hijos, habría hecho lo mismo que hizo Félix cuando fue en busca de Minho aquel día que se fue... Señor... Sus hijos siguen creyendo que no los quiere, y a decir verdad yo, y todos los que hemos pisado esta casa por un solo día vemos exactamente lo mismo...

𝗻𝗼 𝘁𝗲 𝗮𝗰𝗲𝗿𝗾𝘂𝗲𝘀 𝗮 𝗽𝗮𝗽á ꗃ᤻ chanhoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora