Después de aquella noche donde se hizo un pacto, todo pareció volver un poco a la normalidad en la mansión Phantomhive, a pesar que no todos recuperaron sus energías, se sentían mejor que el día anterior. El día se encuentra nublado, Sebastián está seguro en que escuchó un trueno, a pesar que un ser humano normal no notaría ese sonido, eso bastaba para saber que el día y la tarde iba a llover, quién sabe cuándo se calmaría el clima.
Tuvo que seguir ayudando un poco a los incompetentes sirvientes, a veces tenía que contar gatos imaginarios para mantener una gran paciencia con ellos. A pesar en que había planeado lavar mantas, tuvo que suspender aquella actividad.
―Finnian, revisa el invernadero ―ordenó.
―¡Sí, Sebastián!
Él suspiró mientras lava la vajilla que le hubiese tocado a Bard, sin embargo, no confiaba en él ni estando con energía, no sabía qué podría hacer. Volvió a suspirar.
―No pareces estar muy motivado hoy, cuervo ―habló haciendo que Sebastián mire a un lado.
―¿Qué estás haciendo aquí? No pareces estar siendo muy discreto.
―Estaba un poco aburrido, intenté asustar un poco a los empleados, pero decidí que la sirvienta es mejor para asustar. No me mires así, no le he quitado energía, solo quería divertirme un poco, cuervo.
―Ya deja de llamarme cuervo. ―Secó un plato, lo organizó y volvió a lavar otro.
―Pero es parte de tu especie, así que te queda muy bien el apodo cuervo, cuervo. ―Se sentó en el mesón de la cocina―. ¿La mansión siempre es así de callada?
―No, este día parece ser la excepción, no olvidemos que eso tiene que ver contigo, has absorbido tanto de sus energías que no tienen suficiente para divertirte.
―Oye, no frunzas el ceño, cuervo, ustedes los demonios con correa tienen el humor más extraño que he visto.
―Vienes por un poco de mi energía ¿verdad?
Dimitri amplió su sonrisa intentando verse inocente.
―Vaya, cuervo, ¿tan poca estima me tienes que tienes que rebajarme solo por un interés?
Sebastián también esbozó una sonrisa llena de hipocresía.
―Es normal que pregunte eso, después de todo, hicimos un acuerdo en que querías mi energía, no es de extrañarme que vengas solo para eso. Si quieres hacerlo, hazlo de una vez, estoy ocupado.
―Perdóneme, señor cuervo ―dijo en tono burlón para luego sostener la barbilla del contrario―. No sabía que te tomabas tan enserio tu deber, me alegra no ser tú en estos momentos.
―Los íncubos deberían presentarse por la noche, es inusual ver uno en el día.
―Los íncubos somos demonios, después de todo, lo que me diferencia de ti, es que no necesito un amo y mi método de alimentación es diferente a la tuya. ―Acercó el rostro de Sebastián―. Tu le robas el alma a los demás con un beso.
―Estás muy cerca.
―Es necesario si quiero de tu energía, los demonios con correa son más complicados de drenar su energía demoniaca, a menos de que no me ataquen si lo hago.
―¿Y tienes que acercar tu rostro así? ―inquirió con irritación.
―Te dije que es necesario, no muevas tu cara, frente con frente y nariz con nariz, tendrás que acostumbrarte a esa proximidad si me vas a dejar tomar de tu energía, también mírame a los ojos, es fundamental.
ESTÁS LEYENDO
INCUBO'S (BL)
FanfictionUn problema que parece menor, ya que es muy común que las personas no recuerden sus sueños, pero para Sebastian es una problemática que se repite al punto de que el alma por la que negoció esté en un riesgo de ser consumida por un ser que ama devora...