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Su caminar era despacio, cual tortuga, su falda se movía acorde de sus pasos y su delicado cabello, sostenido en una coleta alta, brillaba gracias al reflejo del sol.

Era la elegancia encerrada en las murallas, con unos ojos delicados cual copos de nieves, verdes como la hojas de los árboles que renacían en la primavera.
Su presencia era el brillo del reflejo del mar cuando recibe iluminación del sol, era las brillantes estrellas que titilaban en las oscuras noches, donde su delicados ojos se cerraban adentrándose en un sueño que la transportaba a otro mundo.

No había quien lograra seguirle el paso, y para ella su caminar era perfecto, su mente entraba en un estado de inconsciencia mientras observaba los pájaros volar en la fuente donde de vez en cuando tiraban monedas en búsqueda de deseos que alegren sus desesperados corazones, que necesitan la felicidad.

Felicidad cual ella siempre tuvo, y por lo tanto, sus monedas nunca cayeron en donde ella se encontraba sentada, leyendo sus notas de astronomía.

Estudiaba el cielo, quería descubrir que era lo que se encontraba sobre su cabeza, quería averiguar el porqué de que gracias al sol, vivía.

Sabia que los ojos de los demás que caminasen se clavarían en ella, y ser consciente de ello le era agobiante, pero cual mirada que siempre los demás tenían sobre ella, debía de sostener, e ignorar, demostrando la inocencia que aún lograba manejar para manipular la idea de los demás sobre ella.

Añoraba algo más que unas murallas que le prohibían ver el amanecer o el atardecer desde el lugar donde el sol se esconde, seguramente iluminando otros lugar... Eso quería creer ella.

"La felicidad deja de ser lo mismo cuando mis sueños son encerrados en una jaula cual ave, por los monstruos que se encuentran dentro y fuera de las murallas que cuidan de mi."

Y el atardecer comenzaba a presenciarse en el cielo que iluminaba las calles de la muralla que cuidaba a los habitantes.

Su vista capturó cada pigmentación que las nubes recibían gracias al sol, que ante los ojos de un artista, era una auténtica de obra de arte, donde podrías escribir, dibujar, componer y cantar con inspiración.

un gran bullicio se comenzaba a escuchar a lo lejos, llamando la atención de la joven, quien bajó su mirada del cielo, dirigiéndola hacia sus costados, en búsqueda de donde provenía dichos gritos.

Era la legión de reconocimiento, y recordó de pronto que ellos iban a reconquistar la muralla cual hacía años había sido destruída por los titanes, sentía ilusión de ver la victoria de la humanidad, y esperaba que todo resultara bien.

Y entre los soldados de escudo azul y blanco, destacaba la joven soldado de cabello castaño y ojos bordo cual vino, su corazón había soltado un gran suspirar que demostraba lo hermosa que se le hacia ante Mooni.

Notaron por primera vez su presencia, su mirada se encontró y conectó con sus fulgurosos ojos verdes.

Sus corazones volvían a nacer al encontrarse por primera vez, declarándose así, dueñas de aquellos colores que sus miradas poseían, sincronizando sus latidos, sonriendo levemente con un gran sonrojo en sus mejillas.

—Mooni-chan. —Escuchó la voz de su hermana, quien la llamaba a los lejos. —

Ella se levantó, cortando miradas con la mujer que había capturado cada uno de los poemas que siempre había leído referidos al amor a primera vista, cerrando su libro y desviando su mirada de la legión, para así buscar a su hermana entre las personas presentes a su alrededor. —Aquí. — Se encontraban frente a frente, y la mayor de estas emanaba una energía negativa. —

—Tus clases de canto están por comenzar, baka.

—Oh, vamos entonces. —Comenzó a caminar en dirección hacia su hogar, mientras una sonrisa se marcaba en su rostro. —

Mooni era constantemente presionada por su familia para que sea alguien en su vida y poder sobrevivir por su propia cuenta, una agobiante tradición familiar.

Que se trataba en encontrar cuáles eran sus talentos, y ella poseía la mayoría de los que había practicado toda su vida, era prácticamente perfecta ante los ojos de su familia, tenía una belleza angelical e inigualable, talentos desarrollados a la perfección y una personalidad digna de respetar.

Su hermana la dejó en el hogar de su profesora, al ingresar saludó a los presentes con una reverencia que demostraba respeto hacia ellos.

—¡Mooni! —Su profesora de canto la llamó desde su oficina, con una clara molestia en su persona, por lo que la dueña del nombre se acercó. — Trabaja esa puntualidad. —

—Lo siento, no sé qué me sucedió.

—La encontré en la muralla Maria observando a la legión de reconocimiento como una tonta.

—No estarás planeando entrar, ¿No?

Ella negó rápidamente ante tal pregunta, la sola idea de imaginarse ahí dentro le aterraba.

Al finalizar su clase de canto se dio cuenta de que ya era bastante tarde, por lo que comenzó a caminar con total cuidado de regreso a casa, según tenía entendido, habitaban personas que deseaban hacerle daño.

Al pisar el piso de mármol de su hogar soltó todo el oxígeno que sus pulmones acaparaban y caminó con rapidez hacia su cuarto para higienizarse. Con su cabello húmedo y su pijama fresco bajó hacia el comedor principal, encontrándose con su familia quienes la esperaban impacientes, pues sus estómagos rugían.

Cenaron mientras conversaban sobre su día, sobre algún chisme que su padre escuchó y del helado día, el invierno se acercaba y siempre era una estación donde pesada para Mooni, puesto a que sus defensas bajaban, prohibiéndole la salida por meses para evitar que cogiera alguna enfermedad. Pero aún faltaba un mes para su encierro total, y aprovechaba el poco tiempo que le quedaba para salir, le encantaba ir hacia los límites de la muralla donde se recostaba cerca de las flores y observaba el cielo, respirando el fresco aire de su entorno.

—Mañana quiero ir al mercado de telas, ¿Me acompañas? –

—Me estás invitando porque quieres que te cargue todo de nuevo, ¿No? —Mooni observó con seriedad a su hermana. —

—¿Qué? ¡No, solo quiero pasar tiempo contigo, cada momento que pasamos juntas es hermoso para mi!

[...]

—Por favor, carga esta bolsa. —Le otorgó una bolsa con treinta metros de tela. —

[...]

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⏰ Última actualización: May 24, 2021 ⏰

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𝐈𝐧𝐝𝐞𝐩𝐞𝐧𝐝𝐞𝐧𝐜𝐞.「𝐇𝐚𝐧𝐠𝐞 𝐙𝐨𝐞 」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora