Solo una simple carta (Bakugo x t/n x Todoroki)

Capítulo dos

Hoy es fin de semana lo cual me alegra pero al mismo tiempo no me gusta...

—No podré ver a Bakugo por dos días.

Me desanimé, y triste me lanzé sobre mi cama, estaba buscando que ver en la tele, hasta que mi mamá me llamó, le dije un "voy en seguida" y baje segundos después.

—¿Que pasa?

—Oh! Cariño, ¿podrías ir a la la pastelería a recoger un pastel?— dijo mi madre.

—claro. — respondí de inmediato.

Ella me dió un pequeño papel que me serviría para que me dieran el pastel, fui a cambiarme sola la blusa que tenía, por una sudadera, y me quedé con los shorts que ya tenía puestos.

Salí y me dirigí hacía la pastelería.

—Me preguntó... ¿Cuál será el pastel favorito de Bakugo?... Cómo me gustaría hablar más con el y ser más cercana a el... pero...

—Soy muy insegura para hacer eso.— dije susurrando.

Llegué a la pastelería y entre, la fila estaba un poco larga, pero no queda de otra, mañana es el cumpleaños de papá así que pues claro que necesitamos un pastel.

—Solo esperó que esa escoria no se aparezca. — pensé.

—¿Horimiya-san?– alguien me llamó. Volteé a ver lo.

Me sorprendí.— ¿Kirishima-kun?

El se acercó hacia a mí.— El mismo. — sonrió.—vaya sorpresa encontrarte aquí.

Asentí.—¿Vienes por un pastel?

El dijo que si.— Mañana es el cumpleaños de mi madre.

—Felicitala de mi parte.— dije sonriendo.

Mientras avanzaba la fila le dije a Kirishima que se quedará a un lado para que se ahorrará tiempo, estábamos en la fila hablando de que no hemos hablado durante algún tiempo, y eso que vamos en el mismo salón.

Ya llegando a la caja registradora; le dije a el que si quería hacer su pedido primero, este se negó y me dejó a mi pasar. Luego de retirar el pastel, esperé a Kirishima, y salimos juntos de la pastelería.

—Gracias por dejarme estar a tu lado en la fila. — dijo con una sonrisa.

—No hay de que.— le respondí de la misma manera.

El se ofreció a acompañarme a casa, lo cual le dije que sí. Y empezamos a caminar, cada uno con una bolsa donde estaban los pasteles.

—Tal vez debería de preguntarle a Kirishima sobre Bakugo, así tendré más información sobre él.

—Esto...– dije.— Kirishima-kun

—¿Que pasá?

—¿T-tu y Bakugo-kun... son muy amigos no? — dije un poco nerviosa.

—Mmm.— se quedó pensando —Bueno creo que sí, Bakugo es alguien muy cerrado, pero a pasar el tiempo ya hablamos más, así que sí; somos amigos.

—ya veo...— hice una leve pausa.

—Entonces, ¿S-sabes c-cual es su f-favorito pastel sabor?

—¿Ehh?...—El me miró de una manera muy confundido.

—Que mierda!!! ¡¡¿ Mi cerebro se bugeo o que?!! ¡Va a creer que soy una estúpida!

—DIGO DIGO. ¿QUE SI SABES CUAL ES SU SABOR FAVORITO DE PASTEL?!

—rayos... Va a descubrir mi sentimientos...

—ah... A eso te refieres. — AY DIOS, CREO NO LO NOTÓ. — Bueno nunca me lo ha dicho directamente, pero creo que le gusta mucho el pay de limón.

—Cada vez que es martes  hay más postres variados en la cafetería, y veo que lo pide siempre.

Se me brillaron los ojos automáticamente. —GRACIAS KIRISHIMA-KUN! —dije muy emocionada. — d-de nada.— dijo, parecía un poco asustado por mis cambios de humor.  —Pero... ¿Y por qué la pregunta?— preguntó; lo que yo menos quería que preguntará.

—Acaso tú...—se detuvo y yo también lo hice, pero mire  un lado, seguramente tenía la cara roja, y el ya debió haber deducido que yo.... Que yo estoy... —  ¿Vas a llevar pastel para todos el día de San Valentín?

—Gracias a dios~!!!

Voltié a él, y rápidamente asentí.— Así es! Eres muy intuitivo!! —dije, mientras sentía que se me iba una gran tensión de encima.

—Ja! Lo suponía!, Ya se acerca esa fecha, tu siempre llevas algo para todos. —dijo sonriente.— eres muy amable, Hori-san.

Esta vez me sonroje por tu halagó, normalmente no se como reaccionar a estos.— a-ay tampoco es para tanto, los demás también lo hacen.

Desvíe la mirada y empezamos a caminar, ya estábamos a una cuadra de mi casa, así que me detuve.— Si quieres hasta aquí me acompañas, mi casa solo está a unos pasos de aquí.

El sintió, me despedí de el, he continue caminando, pero luego sentí una mano en mi muñeca.

—¿ki-kirishima-kun?

—Perdón por detenerte así... pero... Hay algo que he querido decirte desde hace tiempo.— dijo mientras miraba el suelo.

Yo estaba atónita, no sabía que era lo que me iba a decir.

—Y-yo... Esto...— por su tono de voz, creo que se sentía muy nervioso. Pero finalmente, levantó su cabeza y me miró directamente a los ojos.

—Hori-san, se que te parecerá algo repentino, pero...desde que me diste ese beso en la mejilla, en ese entrenamiento... No he podido sacarte de mi cabeza. — el se veía muy sonrojado.

—¿Que... Que es lo que intentas—

Se incorporó pero igual segura sujetando mi muñeca de una forma muy delicada. Y me dijo...

—¡Me gustas! Horimiya TN!... ¡Sal conmigo por favor!

El...estaba temblando, lo sentía... Pero igual se veía de tranquilo...

—¿P-porque?.... ¿Por que?