𝙴𝚗 𝚕𝚊 𝙼𝚞𝚎𝚛𝚝𝚎 | 𝙱𝙹𝚈𝚇

𝚃𝚃 - 𝙴𝚗𝚌𝚞𝚎𝚗𝚝𝚛𝚘 #𝟷

Esta historia es +18, canibalismo, escenas de sexo entre jotos, y misterio.

Si un asesino te diese dos alternativas de ¿Ser desmembrado o morir con un cuchillo en la mano? Claramente como ser humano, elegirías la tercera opción que resuena en tu mente: Suplicar.

Después de todo, es debido a la mentalidad humana que tenemos la necesidad de aferrarnos a la vida, queriendo completar la fase de crecer, tener nuevas experiencias y cumplir con las metas planteadas.

Sin embargo, Wang James consideraba que este era su karma.

—¡Su ... su ... e-elta ...! ¡Por... p ... por .... Fa...!

¿Quién no gritaría si viera como sus piernas eran golpeadas con un martillo de piedra?

O aún peor, ¿Cómo no agonizar si eres incapaz de medir tu dolor?

Hay varias personas que enloquecen al no poder controlar sus emociones cuando son heridos, Xiao Zhan era el vivo ejemplo de un maldito sádico que gozaba de esas reacciones.

¿Qué placer más grande se compara a ver el ceño fruncido de su víctima, mientras esta movía desesperadamente sus piernas buscando un poco de descanso en el suelo?

—Buen provecho.

Juntar sus dos manos y dar palmadas, era su manera de agradecerle a Belcebú por el alimento que se le presentaba,

Entre sus manos sostenía los pedazos de carne que acababa de arrancarle al hombre, a su vez en que chupaba las gotas que caían del cuchillo ensangrentado: —Delicia... manjar... Delicia... manjar.

Solo había una manera de describirlo.

Ante la horrorizada mirada de sus víctimas, estos fácilmente podían asegurar que el demonio conllevo a Xiao Zhan dentro de esa locura.

Pero para todo hay una razón.

El comer carne humana, tenía más de mil motivos, y beneficios.

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[ En las últimas horas, se ha confirmado la desaparición del señor James Jones, tanto la esposa como sus dos hijas menores siguen sumidas en la desesperación, por lo que ofrecen una gran cantidad de dinero si el secuestrador acepta regresarlo a casa...

—¿Cuánto me darían si les entrego su pierna como recuerdo?

Había muchas maneras de buscarlo, aunque claramente todas las personas adineradas creían solucionar cualquier problema con unos billetes de papel.

Xiao Zhan se acercó a la televisión frente suya, a pocos segundos de apagarlo.

...O si primero los oficiales lo atrapan. ]

¿Eh?

Soltó grandes carcajadas.

—¿Entendiste eso?—Su pregunta dirigida al cadáver desmembrado.

Las risas aumentaron la fuerza en el tono de volumen.

—Ellos son demasiado optimistas...

Esas palabras levantaron sus ansias y al mismo tiempo su ánimo de regresar a la cacería.

—Realmente unos tontos optimistas.

Xiao Zhan sabía cada movimiento y pasado de sus presas.

Xiao Zhan los evaluaba.