Mon petit moi

S I E T E

¿Es posible enamorarse a primera vista? Tal vez si... o también podría llamarlo enamorarse inconscientemente, con el paso del tiempo y sin darte cuenta. Cuando empiezas a sentir la necesidad de ver a una persona aunque sea por un segundo, es algo que te hace bastante feliz, o al menos a los catorce años si que te hace feliz.

Había un chico que me llamaba la atención, el problema era que nunca le había hablado, bueno si, pero solo una vez. Y me parecía algo tonto, tener sentimientos hacia alguien que no conoces. Se veía como una persona amistosa y extrovertida, pero no sabia si realmente el era así. No lo conocía. Así que guarde esos sentimientos en mi corazón. Me bastaba verlo en los recreos con su pandilla jugando policías y ladrones, era gracioso. Yo jugaba mucho a eso, hasta me daban ganas de unírmeles, pero luego me daba pena y me quedaba sentada comiendo con mis amigas.

-Oye Noa me gusta alguien ¿Podrías hablarle tu por mi? Ya le hablaste una vez así que...- Kim fue la primera amiga que hice en el nuevo colegio y ahora me estaba pidiendo un favor, estaba súper dispuesta a ayudarla, sería una forma para que confiara en mi y nos hiciéramos mas amigas.

-Hmmm ¿Ya le he hablado antes? ¿Quién es?- 

-Wayl de la clase 2- Ahí me sentí preocupada... era el chico que me gustaba ¿debía decírselo? Podría empezar a odiarme y yo no quería eso, además... yo nunca seria capaz de decirle lo que sentía, de seguro nunca se fijaría en alguien como yo, no soy tan linda a comparación de Kim, así que decidí ayudarla.

-Claro, puedo ayudarte- no sabía si lo que estaba haciendo era lo correcto, temía ser una persona egoísta si no la ayudaba, tal vez no fue la mejor decisión. Pues termine lastimándome a mi misma sin darme cuenta, resulta que como soy una cupido excepcional, terminaron juntos, eran una pareja muy linda, de verdad se querían, me volví mas cercana a Wayl resulta que si era un chico agradable y divertido, mas de lo que imaginaba. 

Poco a poco mi amor fue creciendo, lento y con miedo, pero luego me di cuenta de que eso no me llevaría a ningún lado, mas que solo romperme el corazón y un corazón roto en primer grado es peligroso, creo yo, te afecta mas de lo que debería y así fue, pero no tenía derecho a quejarme con nadie.

Regularmente no hablaba con Wayl, prefería evitarlo, creo que incluso llego a pensar que no me agradaba... Pero era todo lo contrario, era mi amor secreto e imposible. Su corazón le pertenecía a alguien mas y yo no podía hacer nada para regresar atrás por mas que quisiera. A veces el verlos juntos y como era tan atento con ella me hizo sentir un poco mal.... que va no un poco, fue bastante. Así que decidí olvidarme de el.

Cuando tenía cinco años no tenia que preocuparme por cosas así, solo tenia que estar ahí, jugar y vivir mi vida feliz, con el vestido que mi mamá escogía para mi. Cuando solo me preocupaba por que mi mochila de princesas estuviera limpia para que combinara con la de Adriana, solo que la suya era morada. O cuando iba a su casa a tomar café con pan y a jugar barbies, ahí si que había espacio para algún triangulo amoroso, como escoger quien era el mejor chico para barbie, si Ken o Max Steel. Para mi era Ken pues era apuesto y en los programas de TV siempre se preocupaba por barbie.

Todo era mas simple, no había que pensarlo tanto...