It's so sad to think about the good times (es tan triste pensar en los buenos momentos) - bad blood, Taylor swift
Año 2019
El verano ya casi llega a su fin y eso quiere decir que volvemos a la rutina de: levantarse a las siete de la mañana, tener mucho estrés por los exámenes que vendrán y no tener tiempo de hacer absolutamente nada por culpa de las tareas que mandaran los profesores a diario.
Este verano solo me ha pasado algo interesante, aunque me la he pasado más en mi casa que en la calle.
—Arriba bella durmiente—escuche la voz suave de mi madre hacer presencia en mi habitación.
El ruido de ella subiendo las persianas llega a mis oídos. Gruñó por toda la luz que a llegado a mis ojos y lo molesto que es.
—¡Ay mamá!, falta una semana para que se acaben las vacaciones déjame disfrutar mientras pueda—me cubro la cara con la sábana.
Siento su cuerpo caer sobre el mío y abrazarme.
—Por esa razón, como falta una semana para empezar el instituto, tienes que volver a levantarte a las siete de la mañana, venga arriba—anima mi madre, separándose de mi para jalar la sábana y dejar a la vista mi pijama de aguacate.
¿A las siete? Maldita sea no he dormido nada, me dormí tarde por estar leyendo. ¡solo he dormido cinco horas!
—¡¿A las siete!?¿Son las siete!?¿Mamá podrías a ver tenido un poco de compasión y haberme levantado a las nueve por lo menos?—digo levantándome de mi suave cama con pereza en el cuerpo.
—No te quejes a tu hermano también le hice lo mismo. Báñate, te esperamos a bajo para desayunar—informa saliendo de la habitación.
Logré salir de mi cama, con pereza y a punto de comerme la puerta del bañó pero logré salir de la cama. Llevo unos 20 minutos bajo el agua templada y me dan ganas de quedarme un rato más en la ducha pero mi madre toca la puerta diciendo que el desayuno se enfría.
Salgo y me pongo lo primero que encuentro, que es una camiseta blanca sin sostén (porque los odio) no tan ajustada y un pantalón chándal gris. Y bajo al comedor.
Allí está mi padre, sentando en la punta de la mesa viéndo el periódico, con los pies cruzados y muy atento a lo que lee.
—Buenos días papá—beso su mejilla cuando me acerco a él.
—Buenos días cielo. Al parecer no fui el único que tu madre despertó temprano—ríe mientras pasa la hoja de su periódico.
La manía que tiene mi madre de despertarnos temprano siempre. El dicho ese que dice "quien madruga dios le ayuda" como que se lo esta tomado muy enserio.
—Lamentable. Solo a ella se le ocurre despertarnos a la siete ¡el último lunes del verano!—alzo la voz en eso último cuando veo que mi madre se acerca.
—Tampoco es para tanto—dice la mujer que me dio la vida mientras se pone a servir jugo en los vasos.
—Me estás quitando horas de sueño, mamá—la regañe.
Cuando mi madre iba a decir algo se escuchó una voz masculina bastante familiar bajar por la escaleras.
—Ya para, me va a explotar la cabeza de tanto escuchar que te liaste con Sofía, Axel. —dice mi querido hermano quedando en el final de la escalera-Nos vemos luego.
—¡Hola familia!—grita mi hermano felizmente cuando guarda su celular.
Me quejo por su estruendosa voz.
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Mi amor prohibido [En edición]
Teen FictionDos familias, un secreto, dos corazones que se aman mutuamente, pero, ¿el amor vencerá el odio y la rivalidad que hay entre familia? ⚠️PROHIBIDO adaptaciones o copias de esta historia⚠️ #historias2021