Andrew, Adrián y Félix son tres hermanos de la gran familia agreste pero aquí veras las locuras y amores de los tres hermanos que daran una vuelta de 360 grados al mundo.
el amor no esta prohibido pero es peligroso
tu vida llegara a su fin si te e...
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Los pasos eran constantes por los pasillos de los pocos empleados que trabajaban en ese enorme y simbólica mansión que representaba el poder que tantos lujos les daba a los pocos miembros de esa familia que pertenece a la elite de Francia.
Un hombre de edad avanzada caminaba con pasos constantes y calmados por las escaleras hacia el primer piso, observando aquellas paredes que conformaban esa mansión tan elegante con detalles que le produjo una pequeña sonrisa por los recuerdos que le invadía al momento que se acercaba al primer piso.
-Padre- dijo un joven de una cabellera rubia revoltosa con ojos fuertes de un color morado claro con una sonrisa tan amplia con ligera malicia
Mientras se dirigía al mayor que se encontraba camino a la sala principal al observar a aquel hombre que le crio desde su más temprana edad con esos potentes ojos celeste que eran tan distintos al suyo que había generados tantos rumores durante años.
-Así que llegaste Andrew- dijo con pequeña sonrisa con el semblante serio que le caracterizaba - y ¿Adrián?- pregunto con una ceja levemente alzada que provoco que el cuerpo del joven temblara por unos momentos.
-Debe estar en su habitación, padre-contesto tratando de calmar su ligero temblor en su cuerpo ante la mirada inquisitiva del mayor para recibir un asentimiento mientras le seguía al destino establecido- ¿De qué se trata esta reunión padre?, ¿Volverá?-cambio de tema manteniendo su sonrisa traviesa que le caracterizaba.
-Eso también quisiera saber- dijo un joven alto de cabellera rubia con ojos celeste como el profundo océano, sorprendiendo a los presentes, generaron que volteen ante su presencia con diferentes emociones en sus rostros-¿Andrew?- pregunto sorprendido ante el abrazo del menor de esa familia quedándose tieso.
-Tanto tiempo Félix-dijo mientras lo apretaba más fuerte soltando una leve risa ante lo quieto de su hermano, estaba-si sigues así, nunca conseguirás novia- dijo alejándose unos pasos manteniendo su sonrisa.
-¿Es por eso que tienes tantos escándalos?- dijo mientras se acomodaba su ropa ante el nerviosismo del menor mientras él retrocedía ante las palabras de su hermano-o ¿las faltas a las sesiones?-dijo volviendo a su postura anterior alzando su ceja manteniendo su semblante frío.
-Hermano, estás aquí- exclamo de alegría, un joven con ojos esmeralda que contrastaba con esa sonrisa tan amable
Atrayendo las miradas hacia la escalera donde se encontraba parado para luego bajar y poderse al costado de los demás para avanzar hacia la sala de estar tras un "sentémonos "del mayor
Los jóvenes siguieron al mayor, acomodándose en los muebles tan cómodos y elegantes, de colores neutros y un simple, pero elegante arreglo de flores en la mesa de centro, generando un suspiro del menor, quien solo rodaba los ojos ante aquella monótona y trivial conversación de aquellos que llamaba familia.
-Terminemos con esta estúpida farsa de "la familia Ingalls"- menciono mientras dejaba aquella taza con un delicado té de menta mientras miraba a los presentes que generando un que sus miradas en su joven cuerpo lo fastidiara lo suficiente para hacer una ligera mueca-al final somos Agreste ¿no es cierto?-comento con ironía tensando a los presentes.
Soltó un suspiro ante aquellos "integrantes de su familia" mientras se levantaba de su asiento y caminaba al costado de su hermano mientras mostraba una sonrisa burlona mientras sus ojos brillaron con malicia.
-Andrew- llamo el adulto al apartar un instante la tasa que sostenía en su mano de sus labios-vuelve a sentarte y compórtate- ordeno para luego volver tomar aquel líquido ante las atentas miradas de sus hijos.
El joven de ojos lilas soltó una ligera risa con burla mientras ampliaba su manera desvergonzada frente a los integrantes de aquella habitación, haciendo que varios se erizaban ante aquel comportamiento.
-Padre- dijo con sarcasmo mientras colocaba sus manos sobre los hombros de su hermano mayor- no tienes que preocuparte más nuestra familia- menciono con una amplia sonrisa llamando la atención de los demás-llegó tu heredero, padre- soltó con veneno de aquellos delicados labios.
-Andrew- regaño el joven de ojos verdes como las esmeraldas- no le hables a si a nuestro padre-volvió a regañar mientras negaba viendo al menor con enojo-compórtate como un Agreste-continuo el regaño mientras clavaba sus unas en sus palmas de las manos al hacerlos puños.
Aquellas provocaron que el joven heredero de aquella enorme familia que vivió entre lujos y fama soltara una ligera carcajada.
