Tender Concerns

41 11 1
                                    

Volví a la escuela una semana después, seguía estando algo débil, pero fingí estar bien por las pocas personas que aún me querían alrededor. Tu aún estabas preocupado, así que me seguías a todos lados estando al pendiente de cualquier mínimo movimiento que hiciera.

"Ya, en serio te digo que estoy bien, no tienes que estar tan alerta"

Aunque me causara un poco de gracia tu actitud, a veces también me irritaba, así que no podía evitar hablarte con un tono un poco enojado, aunque luego se me pasaba cuando tú sólo hacías pucheros

"No señor, debo asegurarme de que no te pase nada malo, te pusiste muy mal allá en el hospital"

Frunciste el ceño tomando mi mano, entrelazado nuestros dedos y me arrastraste hacia el comedor ignorando mi molestia, como todo un niño caprichoso

"Es más, hoy no has comido nada. Vamos ¡yo invito!"

Y mientras hablabas de todas las cosas deliciosas que podíamos comer, lo único que hice fue sonreír con la más pura alegría.

Porque lucías muy tierno con tu torpe forma de cuidarme.

Siempre fuiste tan adorable cariño.

YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora