31. ¿Y tú por qué lloras?

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Taehyun correspondió con preocupación a su abrazo, estrechándolo con fuerza entre sus brazos.

Podía sentir como el cuerpo de Beomgyu temblaba y tenía ligeros espasmos por sus sollozos.

Esperó con paciencia a que Beom se separara, pero al ver que este no tenía intenciones de romper el contacto entre ellos, decidió dar el primer paso y poner algo de distancia.

- ¿Me dirás lo que ocurrió? – preguntó con una voz suave, sus manos se posaron en sus mejillas tratando de borrar los rastros que dejaban las lágrimas, siendo esto inútil, pues las nuevas gotas de agua salada no paraban de brotar de sus cuencas.

- Por ahora... solo quiero estar así – Taehyun asintió, comprendiendo que aún no quería hablar de ello, caminó hacia el sofá de la sala y se sentó en este, palmeando sus piernas, indicándole a Beomgyu que se sentara en ellas.

Eran pocas las veces que se encontraban en aquellas situaciones, usualmente era Taehyun quien se encontraba en la posición del mayor, pero al verlo tan vulnerable, recordó las cosas que Beomgyu hacía para hacerlo sentir mejor.

Beomgyu apenas se sentó en las piernas de su novio, lo rodeó son sus brazos y oculto su rostro en su cuello.

Taehyun solo podía sobar su espalda mientras sentía como su camiseta comenzaba a mojarse.

Era una persona sensible, aunque su rostro permaneciera serio, lloraba en cada situación con mucha facilidad y ver a su novio llorar no fue la excepción para eso.

Su respiración se alteró comenzando a preocupar a Beomgyu, quien sintió el cambio en la conducta ajena.

Al levantar su vista observó con ternura el rostro sonrojado de Taehyun, sus ojos estaban húmedos y una traviesa gota había caído de uno de ellos.

Sus labios tocaron una de sus mejillas, llamando su atención.

- ¿Y tú por qué lloras? – dijo dándole un leve golpe en la nariz.

- Porque no soporto verte triste – su voz sonaba amortiguada, producto del nudo que sentía en su garganta.

- No llores amor – tomando el rostro de Taehyun entre sus manos lo llenó de besos, como ya acostumbraba a hacer, repartió besos en sus parpados, mejillas y labios, siendo estos atrapados entre los contrarios para dar comienzo a un suave beso que los tranquilizó a ambos.

Juntó sus frentes antes de separarse por completo.

- Hey, debería estar consolándote yo a ti, no al revés – se quejó, un pequeño puchero adornando sus labios, logrando que Beomgyu olvidara todos sus problemas por unos segundos.

Algo que amaba de Taehyun era que nunca paraba de sorprenderlo, sus expresiones aparecían en momentos tan extraños y cada una le fascinaba más que la otra.

Se acercó a sus labios dejando un suave piquito, no pudiendo resistirse a la ternura que este representaba.

- No digas eso, también puedes llorar si quieres y yo puedo consolarte si quiero – una leve sonrisa apareció, logrando alegrar a Taehyun.

Le gustaba ver a su novio así, sonriendo, feliz, no en el estado en que llegó.

Haciendo uso de la poca fuerza que tenía, logró levantarse del sofá con su novio entre sus brazos dirigiéndose poco a poco hacia su habitación, donde lo dejó en su cama.

Se recostó a su lado, le era más cómodo hablar con él en ese lugar.

Quedaron ambos cara a cara, los dos tenían los ojos algo hinchados, pero las lágrimas finalmente habían dejado de correr.

- Mi madre no lo aceptó – tardó unos segundos en procesar lo que había escuchado, pero aunque lo hizo no podía comprenderlo.

- ¿No aceptó qué? - Beomgyu mordió su labio antes de continuar.

- No aceptó lo nuestro, pero no te preocupes, no fue porque eres tú... o bueno, no porque eres específicamente tú, si no por lo que tienes entre las piernas – las mejillas de Tae se colorearon ante el último comentario, pero aun así la preocupación fue instantánea.

Solo atinó a darle un abrazo y hacerle caricias hasta que se durmiera, él conocía mejor que nadie lo que era el rechazo por parte de la familia.

Aun así no podía dejar de pensar en lo diferentes que eran sus situaciones y lo duro que debió ser el golpe para su novio, era demasiado cercano a su familia, a su madre.

Si a él le dolió partir sin tener la más mínima cercanía con su progenitor, no podía ni imaginarse lo que estaba sintiendo Beomgyu.

Pero estaba bien, saldrían adelante.

Aunque todo el mundo les diera la espalda ellos se apoyarían entre sí, no importaba que tan mala fuera su situación.

Cold [ Beomhyun ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora