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Han pasado casi 13 años desde la última vez que vi a mi padre, aunque mi tía siempre le mandaba fotos mías a medida que iba a creciendo, y se vez en cuando hablábamos nunca se digno a venir a verme, contrario de lo que hacia Gustabo. Mi hermano siempre venia en las vacaciones junto con horacio,  nuestro hermano de corazon, cada vez que venían me alegraba mucho de verles y compartir toda una semana con ellos pero  uando tenían que partir, al final siempre lloraba sola en mi cuarto.

Los primeros dos años al mudarme fueron difíciles para mi, no tenía ni un solo amigo ya que me hacían de lado porque era "la rara" que le molestaba cada vez que querían dañar a los sapos en química. Pero luego conocí a mi mejor amigo de toda la vida, Damian Kerch, un chico demasiado peculiar, siempre fue el popular de la escuela pero el si era admirable, fue siempre buena persona con todo el mundo hasta con los que siempre ignoraban. Recuerdo la primera vez que hablamos y la manera en que me hizo sentir aceptada por primera vez, estaba sentada en los columpios comiendo tranquilamente un sándwich de jamón crudo y queso, hasta que se me acerco el típico grupo de brabucones populares, que eran unos completos hijos de puta, me empezaron a molestar y trataron de agarrar mi cabello hasta que llego el y freno todo lo que me estaban haciendo, todos le tenían miedo ya que era el más respetado de allí, me acuerdo perfectamente como yo soltaba pequeñas lagrimas asustadas de lo que me querían hacer con tan solo 13 añitos, se acerco a mi y me dio una paleta de mango mientras me empezaba a tranquilizar, al cabo de los minutos me ayudo a acomodar mi peinado y desde allí nos hicimos muy buenos amigos. Sonrei melancolica al acordarme de todo lo vivido con el y como lo extrañaría demasiado, la voz de mi mejor amigo me saco de mis pensamientos

D: En que piensas nechi?-sonrei ante el apodo que me dice desde la infancia y me gire hacia el
Neith: En lo mucho que te voy a extrañar, ya no nos veremos siempre y para colmo estaremos a miles de kilometros-hice un puchero

Solto una tierna risa y se acerco a mi para abrazarme

D: No te preocupes que de mi no te salvas, me escuchaste? Además haremos llamada siempre que quieras
Neith: *rei* bueno pero te me calmas que te reviento a abrazos

Ambos reimos y nos volvimos a abrazar, éramos muy cariñosos entre los dos

D:  Tenes todo empacado? Tu tía te esta esperando en el auto
Neith: Sip, me ayudas?
D: Si, pasame las maletas

Le pase tres de mis maletas y al querer levantarse hizo un gesto
D: Que llevas aqui dentro? Seguro que hasta la tostadora
Neith: No, solo lo necesario que es mi ropa, zapato, accesorios y maquillaje
D: No te quieres llevar toda la casa? Digo.
Neith: *rei* sabes que si, pero lamentablemente no puedo, deja de molestar y ayúdame

Rei y baje para poder salir de la casa, me dirigí al auto y coloque todo en el baúl, y cerre. Me gire hacia mi mejor amigo y le di un último abrazo

Neith: Te voy extrañar estupido duende
D: Y yo a ti estupida pelusa. Llamame cuando llegues si?
Neith: Sip, no te preocupes. Te quiero
D: yo mas

Le di un beso en la mejilla y subí finalmente al auto, le salude una última vez y mi tía llamada Elisa emprendió el viaja hacia el aeropuerto.

E: Nerviosa por volver a ver a tu padre?
Neith: Sii no sabes cuanto ya quiero ver su reacción cuando me vea
E: Le has avisado a Gustabo?
Neith: Nop, quiero que sea sorpresa pero el que si sabe es Horacio y me dijo que ya preparo mi cuarto, además el me buscara del aeropuerto para dejar todo y irnos a ver a Gustabo y papa
E: Bien, era mejor que le avises a el que sino tu papa te regresa
Neith: No creo que lo haga tía, además ya tengo 25 años para poder hacer lo que quiera
E: Tienes razon pero ya conoces a tu padre, igual estoy segura que cuando te vea no le importara nada-sonrio para tranquilizarme
Neith: Tienes razon-le devolví la sonrisa

 𝑴𝒚 𝒇𝒂𝒕𝒉𝒆𝒓 𝒊𝒔 𝒕𝒉𝒆 𝒇𝒖𝒄𝒌𝒊𝒏𝒈 𝒔𝒖𝒑𝒆𝒓𝒊𝒏𝒕𝒆𝒏𝒅𝒆𝒏𝒕Donde viven las historias. Descúbrelo ahora