Te Haré Recordar

Capítulo 03

Las personas se hartan, llega un punto en donde tú subconsciente llega al límite, tu corazón se harta y empieza a crear barreras de acero.

Creo que ni a mi peor enemigo se lo deseo, eso de estar tú completamente enamorado, pero que esa persona no lo esté de ti. Eso es lo más horrible que puedes sentir, te enamoras, te ilusionas, para que esa persona solo te vea como un amigo mas sin importar tus sentimientos asientes levemente con la cabeza. Poniendo por alto los sentimientos de él y hasta el último los tuyos, pisoteándolos como un chicle de tu zapato.

Escuchas como se va rompiendo tu corazón, empiezas actuar indiferente hasta llegar al grado de que esa persona te pregunta que tienes, es a veces tan ciega que no ve, no escucha lo que tus ojos le dicen.

Pero bueno tú aceptaste vivir así, con todas sus buenas o malas cosas.

Pero como he dicho anteriormente el corazón se harta y es cuando tú te empiezas a apartar, para que justamente se empiece a crear la barrera de acero.

By Harry

Cerré el libro en mis manos, llevaba una semana en el hospital, ¿será cierto lo del libro? Si es así no quiero que Louis se empiece hartar de mí.

Los relámpagos iluminando el cielo, haciendo que me dé un escalofrío, la ventana de la habitación de Louis, llena de gotas, toda la ciudad iluminada por las luces de la noche y una que otra vez por los relámpagos. Hace una hora que se despertó y se volvió a dormir no digo nada, más tarde lo darán de alta.

En esta semana estuve pensando muy raro de ti Styles tengo que dejar a Louis ir. Sin mí, estorbando en su vida, será mejor.

Terminará la universidad, se enamorará de otro y a mí me dejara atrás, siendo feliz pero sin mí.

Tengo que dejarlo ir.

~~

-Louis tenemos que hablar - me senté en el enorme sillón de living.

-¿Qué pasa Harry? - su voz se escuchó quebrada, sin ganas. 
Yo cause eso.

-Llama a Jay y dile que pase por ti mañana y te lleve a tu departamento.

-No entiendo

-Te dejo en libertad- cerré los ojos fuertemente pasándome las manos por la cara - Tú me pediste tres días para enamorarme, no funciono o eso es lo que tú piensas, yo no te pedí tiempo tan solo te aprisione, has estado más de un año encerrado, más de un año conmigo literalmente, pero a pesar de todo ese tiempo acepto mi derrota, tú nunca volverás a enamorarte de mí por eso te dejo en libertad

Me levanté dispuesto a salir de ahí no quería que me viera llorar.

-Harry - voltee y lo primero que sentí fueron unos cálidos labios sobre los míos seguidos de unas gotas saladas.

¿En qué momento había comenzado a llorar?

¿En qué momento Louis empezó a llorar?

Miedo es un sentimiento que invade todo tu cuerpo desde el más pequeño hueso hasta al más grande. Te ciega completamente. 
No te das cuenta lo que en verdad vale. 
No te das cuenta que solo por el miedo puedes perder a una persona. Sólo por no enfrentarlo. Eso es el miedo como cuando un niño de cinco años le tiene miedo a la oscuridad por temor de que el coco salga y se lo coma. Ese mismo miedo lo sufren. Los adultos pero en este caso no es el coco, es la palabra y gran sentimiento llamado amor.

Era un beso cálido, suave y lento. Que en cada movimiento se sentía el gran inmenso amor que por tanto años ocultaron. El beso se volvió más intenso, pero sin perder la ternura. Louis suspiro, dejando salir una risita. 
Era lo que ambos deseaban, pero ninguno de los dos se atrevía a dar el primer paso. 
Los truenos se hicieron presentes, las luces se apagaron. Uno que otro relámpago iluminando la casa.

La luz de la pasión se veía en cada uno. 
Las palabras sobraban. 
Las caricias hablaban por si solas. 
Los ojos verdes chocaron con los azules.

Louis creía escuchar a los ángeles cantar, Harry pensaba que Louis era un ángel.

Pasó su mano por su mejilla tocándolo como si fuera muñeco de porcelana cuidando no romperlo. 
Tenía miedo que en la más mínima caricia, todo el encanto se acabará. 
Sus movimientos eran brutos. 
Subieron juntos las escaleras tomados de la mano, como dos tontos enamorados, dirigiéndose a la habitación del menor. 
La lluvia seguía, entre penumbras busco el picaporte abriendo lentamente la puerta. 
Todo estaba oscuro y en ocasiones se iluminaba a causa de los relámpagos. 
Tomó a Louis por sorpresa cargándolo, dejándolo en el acolchonado colchón, sus labios se volvieron a juntar con mayor intensidad que el primer beso. 
Fue bajando sus manos lentamente alrededor del pequeño cuerpo de su amante, recorriendo cada parte de su cuerpo. Admirándolo. 
Una pequeña sonrisa traviesa apareció en sus labios. 
Sus manos llegaron al final de su camisa, levantándola lentamente recorriendo con sus pulgares su delgado abdomen.

Se acercó a su oído - Eres tan hermoso - le susurro
Tomando entre su boca el lóbulo de su oreja haciendo estremecer.

La ropa poco a poco fue sobrando quedando regada en algún lugar de la habitación.

Pequeños jadeos se escuchan por parte de los dos. Tomo sus manos, haciendo rodear su cuello con ellas, para después dejar escasos besos y una que otra marca que el día de mañana se notaria. 
-Vamos Harry... - gimió
-Shh... - dejo un beso en sus labios -Te amo...

Tomo su miembro estimulándolo un poco más, abrió más sus piernas, adentrándose a su entrada.

-Ah... Dios

Su mano paso por su ya sudoroso cabello. Dejando un corto beso en su frente.

-Tranquilo - susurro

Agarro sus caderas, para meterse completamente.

-Ah... Harry... Duele... - una pequeña lágrima se escapó bajando por su mejilla, que el rulado rápidamente seco con un beso.

-Mírame Lou- su sonrisa era cálida, le dio tranquilidad al castaño

Sus ojos verde esmeralda brillaban con intensidad, con deseo.

Sus uñas se clavaron en su espalda.

-Muévete

Hizo caso y empezó con lentas embestidas, tomo si miembro empezando a masturbarlo.

-Harry...

Se curvo, separando su espalda del colchón, pequeñas gotas de sudor bajaban por su frente.

El ambiente era cálido, lleno de amor, lleno de caricias tiernas.

Las embestidas eran más fuertes, intento que su mano fuera al ritmo de ellas. 
Esa sensación de cosquilleo los sintieron los dos, ese cosquilleo en la panza recorriendo hasta su miembro... 
-Louis...- grito el menor corriendose dentro de Louis, lo masturbo un poco mas haciéndolo correrse, en su mano y parte de su abdomen.

Dejo un beso en la comisura de sus labios. Tapándose con las cobijas.

-Te amo - le susurro
-Te amo Lou- lo beso tiernamente 

*****

HOLA

ESPERO QUE LES GUSTE SI ES ASÍ DEJEN UNA HERMOSA ESTRELLITA O COMENTARIO.

NO SE POR QUE ESTOY GRITANDO

Ah solo dos capítulos más y se termina la segunda temporada de 72 Horas Juntó a él.

Besos :)