𝑁𝑢𝑒𝑣𝑎 𝐼𝑙𝑢𝑠𝑖𝑜́𝑛 •𝐻𝑦𝑢𝑛𝑆𝑎𝑒𝑛𝑔

Capítulo 20

CAPITULO 20

Después de un rato MinHyuk y Kyu me invitaron a tomar unos tragos, acepté y terminamos escapando de la fiesta que de un momento a otro se tornó aburrida y el chico del antifaz blanco ya no lo volví a ver.
Intento no tomar demasiado yo soy el que conduce, la imagen de ese chico y esos hoyuelos en sus mejillas no dejan de dar vueltas en mi cabeza, esta sensación ya no la había tenido en mucho tiempo.
-Brindemos por la presentación de nuestro compañero- MinHyuk levanta su vaso y Kyu hace lo mismo.
-Es cierto permíteme decirte que esa canción nos conmovió a todos Hyun- Kyu me dice poniendo su mano en mi hombro. -¿Tú la escribiste?-
-Asiento-
-Creo que esta debería ser tu vocación, tienes el talento y el porte de un gran cantante, todas estaban vueltas locas, seguro pagarían por verte tocar una vez más-
Mis dos acompañantes quedaron inconscientes de tanto alcohol en especial, MinHyuk, los lleve a casa a cada uno.
Ya en mi departamento acostado en mi cama, busqué en las redes del colegio las fotos que sacaron de mi presentación y vi en una de ellas estaba ese chico de los hoyuelos, hice un acercamiento y lo observo hasta que me quedo dormido
Ya en la escuela.
-Oye Kyu ¿Conoces a Heo Young Saeng? es un chico de cuarto grado-
-No, no conozco a nadie de cuarto- Kyu se encoje de hombros -¿Por Qué?-
-Encontré este cuaderno pero no sé exactamente quién es-
-Tendrás que preguntarle a alguien de cuarto-
Cuando me dirigía a el comedor del colegio, escuché un fuerte ruido seguido de muchas risas, alguien se calló, me acerqué vi que eran dos chicos, no me gustó ver cómo se burlaban de ambos, me quité mi chaqueta y se la puse en los hombros al que quedó más sucio de la espalda y además vi que se había lastimado el pie… Preferí llevarlo en mi espalda, nunca había cargado a alguien así, me sentí extraño cuando apoyó su pecho contra mi, su compañero si podía caminar nos siguió hasta el baño.
Con unas toallas húmedas comencé a limpiarlo, las pasaba con suavidad en sus mejillas, es él, el chico del antifaz estoy seguro, está apenado su timidez me lo deja claro, me sentí realmente preocupado por él no podía dejarlo era evidente que le dolía el tobillo, así que lo llevé hasta su casa, en el camino estaba callado hasta le pregunté su nombre fue una gran coincidencia al saber que él es el dueño del cuaderno que encontré pero aún no le dije nada, ya en su casa le puse hielo y cuando estaba a punto de preguntarle si él es la persona que me deja el agua en el salón de música su madre llegó cosa que me puso muy nervioso, preferí irme.

Es día de práctica en el salón de música, recuerdo que debo devolver las cuerdas que había tomado, tenía unas en casa así que no las utilicé, gran sorpresa me llevé al entrar, y comprobé lo que sospechaba, el chico de la fiesta de halloween, el dueño del cuaderno, el que me deja agua y galletas es él, se trata de la misma persona, está dormido sobre su mochila, me inclino y paso mis dedos con suavidad en sus suaves mejillas, abre los ojos de golpe parece estar aterrado por haberme visto, aquí frente a él, fue descubierto, entiendo su reacción, en verdad me da mucha ternura.
Se disculpa una y otra vez por estar aquí, no entiende que para mí significa mucho lo que ha hecho, por eso no me sentía tan sólo al momento de practicar con mi guitarra, algo me decía que estaba acompañado y me sentía bien, él me dijo que lo ha hecho porque le gusta mi música, que tonto por un momento imaginé algo más… Aún así lo invité a comer, me siento agradecido y conmovido por lo que ha hecho, él pensó que me molestaría y me sentiría acosado pero es todo lo contrario, está muy tenso intento platicar con él mientras nos traen los alimentos, preferí no profundizar sobre lo que me pasó en casa.
Cuando lo dejé en su casa, lo abracé, su cuerpo pegado al mío me transmitió una calidez especial… diferente, me sentí con la necesidad de quererlo proteger, esto comienza a darme miedo, este sentimiento...
Cada vez que voy al comedor de la escuela mis ojos lo encuentran con facilidad me dirijo a él y en vez de hablarle simplemente le toco la cabeza, sé que es extraño… sin darme cuenta lo observo desde donde estoy… ¿Qué me está pasando?
Hoy ya no se ocultó para verme tocar la guitarra, su compañía me da tranquilidad algo que necesitaba mucho desde hace semanas, comenzaba a sentirme solo de hecho, creí que la soledad era mi mejor cura, pero no es así… Cada vez estoy más seguro de que Saeng siente algo por mí, su actitud, la forma en que me mira en que me habla, cómo su cuerpo reacciona cuando me tiene cerca… He querido ignorar todo eso porque hay algo que no puedo evitar, la culpa, porque le prometí algo a Jae, amarlo por siempre y a nadie más, no puedo traicionarlo, es lo menos que se merece después de lo que le hice… estuve apunto de besarlo, pero enseguida vino a mi mente su sonrisa su voz diciendo mi nombre, no pude hacerlo, esa misma noche llore otra vez su recuerdo me persigue, veo mi celular y decido marcarle a Yunho para preguntarle la dirección del columbario donde están las cenizas de Jae, en fin de semana voy, me puse mi mejor ropa, así como a Jae le gustaba, frente a su fotografía y sus cenizas comienzo a llorar, -Se que prometí amarte por siempre, te he pedido perdón una y otra vez y ahora que estoy aquí te lo vuelvo a pedir, perdóname fui un cobarde-
Lloré hasta el cansancio me quedé ahí parado en silencio por varios minutos tal vez una hora o mas, limpio mi rostro y camino para salir pero entre el silencio escuché el sollozo de alguien, caminé lentamente y me sorprendió ver a Heo Young Saeng llorando igual que un niño, casi tengo el impulso de ir y abrazarlo, no me gustó verlo así, pero lo pienso un poco no quiero interrumpirlo, escucho que pide perdón a su papá, no pude soportar más y me acerqué dudé un poco pero lo tomé del hombro, sus ojos llenos de lágrimas me miraron, sus mejillas completamente mojadas, las limpie con mis pulgares lo abracé, y él correspondió, ¿Porqué apareces en mi camino así de la nada?

Lo invité a comer y me di cuenta de que él al igual que yo carga con una culpa, no quiso contarme los detalles mucho menos yo, creo que aún no existe esa confianza entre nosotros, además no sé qué podría pensar de saber que tuve un novio y lo que le hice, pensara que soy un imbécil… o el simple hecho de saber que no me gustan las niñas...
Lo observo mientras come, la manera en que mastica y mueve sus labios, como se acomoda sus gafas cada vez que se deslizan por su nariz, su timidez lo hace ver aún más adorable… debo bloquear estos sentimientos… o si no...
Mi auto de descompuso, debería preocuparme porque se supone que es nuevo, pero una parte de mí se siente emocionada, Saeng está realmente preocupado, por no poder llegar a casa, nos quedaremos en un hotel, busqué el mejor de la zona, nos tuvimos que quedar los dos en una sola habitación , cuando él se metió a dar a una ducha aproveché para ir a una tienda de ropa que estaba cerca para comprar una pijama, tenía que escoger rápidamente y encontré la perfecta para él, estaba de espaldas usando la bata de baño le di lo que compré pude ver que su mirada se iluminó al verla, cuando se la puso lucía tal como lo imaginé, ya acostados Saeng me miró a los ojos fijamente hasta que se quedó dormido yo lo seguía mirando, se comenzó a mover, quedando abrazado a mí, yo no sabía qué hacer, me quedé inmóvil, hasta que se revolvió en mi pecho sonriendo.