𝐸𝑙 𝐴𝑀𝐴𝑁𝑇𝐸

𝑢𝑛 𝑎𝑡𝑎𝑞𝑢𝑒 𝑖𝑛𝑒𝑠𝑝𝑒𝑟𝑎𝑑𝑜

Los días siguieron pasando, Gulf empezó su tratamiento y los chicos cuidaban de él, todo estaba tan bien que sin duda Gulf no deseaba salir de esa realidad donde la felicidad era tan grande que le daba miedo

- En que piensas?- Susurró Mew observando a su amante quién observaba por la gran ventaja las gotas de lluvia que caían mientras bebía una taza de chocolate caliente

- Es extraño que Dao y Min aún no lleguen, fueron a mercar hace mucho- Habló Gulf y Mew solo sonrió sentándose a un lado de su ser querido

- Parece que aún no los conoces, hoy es sábado posiblemente estén bebiendo...- Mew habló sosteniendo la mano del menor logrando que la mirada de este finalmente se dirigiera a él

- ¿Que tal si mejor vamos a dormir?- Gulf entonces asintió a las palabras del mayor y juntos fueron a la cama sin embargo Gulf seguía luciendo preocupado

- ¿Quieres que vaya a buscarlos?- Habló Mew al ver que Gulf no estaba tranquilo y el más joven asintió casi de inmediato

- Si, no lo sé, pero es muy extraño que aún no vuelvan...- Mew entonces suspiró pesado y asintió para previamente ponerse de pie y buscar las llaves del auto

- Vamos juntos, no puedo dejarte solo...- Habló Mew y Gulf asintió así que pronto los dos estaban listos para salir de casa sin embargo el sonido de la puerta abriéndose los sorprendió

- Volvieron!!!- Habló Gulf y corrió en busca de sus amigos pero lo que encontró lo dejó sin palabras, los dos chicos cruzaron la puerta pero estaban llenos de golpes y muy mal heridos, Gulf quedó en shock al escuchar los disparos que provenían de afuera de la casa, Dao y Min disparaban pero su condición era mala, Mew rápidamente corrió al escuchar los disparos y al ver a sus compañeros se dió cuenta que estaban siendo emboscados

- Muy bien, tienen dos opciones, morir cuidando del esposo del ministro o dejarlo venir con nosotros y vivir...- Se escuchó la voz del líder contrarió pero los chicos solo seguían cuidando de Gulf

- Debemos irnos ahora...- Habló Dao y Min asintió

- Vayan primero, los alcanzaré en el auto...- Habló Mew poniéndose en posición de ataque, sus compañeros entonces asintieron sabiendo que tenían que sacar a Gulf de aquel lugar sin embargo el menor se negó de inmediato

- No me iré sin ti...- Gulf no podía dejar a Mew sólo

- No hay tiempo, si te quedas sólo se va a empeorar todo- Mew trataba de convencer a Gulf pero el menor no quería escuchar

- ¡No te dejaré!- Habló Gulf de nuevo

- Sólo llévenlo al auto...- Hablo Mew a sus compañeros y estos asintieron sosteniendo a Gulf con fuerza mientras el menor gritaba que lo dejarán volver con Mew, el mayor quién se quedó solo dentro de la casa simplemente empezó a disparar sin embargo eran demasiados, luchar él solo contra ellos iba a ser muy difícil

- Min estás muy mal...- Habló Gulf una vez en el auto, Min tenía una herida de bala en el vientre y Gulf en verdad se sentía culpable por todo

- Nos están atacando ¡necesitamos refuerzos!- Habló Dao informando a sus compañeros, el primero en escuchar el llamado de auxilio fue Nan quién no dudó en avisar al ministro y pronto un grupo iba en ayuda a las 4 personas en aquella casa

- Necesitas curación...- Habló Gulf  tratando de ayudar al mayor

- Mew no llega...- Dao observaba preocupado y con miedo de ser atacados de nuevo mientras Gulf no sabía qué hacer, no dejaba de sentirse culpable, siempre era la causa de que sus seres queridos sufrieran

- Necesitamos curarte...- Hablo Gulf y sin previo avisó salió del auto, Min y Dao lo llamaron pero al final no pudieron hacer nada, Gulf corrió hasta el interior de la casa en busca de un botiquín y de Mew quién estaba disparando sin control

- Mew...- Susurró Gulf y entonces el mayor observo al más joven y el miedo de perderlo se apoderó de él, de repente observo a otra persona quién apuntaba directo al menor así que sólo disparó y corrió en busca de su amado para luego esconderlo tras él y llevarlo hasta atrás del sofá

Sus respiraciones eran agitadas, Mew tapaba con su mano la boca de Gulf quién temblaba en sus brazos, las lágrimas rodaban por su rostro y estaba seguro que moriría aquel día sin embargo también confiaba en el hombre que cuidaba de él, aún se preguntaba cómo era que había terminado en aquel estado, siendo vigilado día y noche, preocupándose por todo y temiendo de todo el mundo, como era que había terminado de ser un chico normal a terminar en medio de un tiroteo donde él era el blanco de aquellos matones, se lo preguntaba y luego recordaba como era que había llegado a aquel infierno, infierno que lo condenaba a dormir con una persona a la que no amaba, ese mismo en el que era maltratado y humillado, donde no tenía voz y votó, su vida simplemente era un infierno y ya estaba cansado de ello; colocó entonces su mano sobre la de Mew y destapó su boca

- Debería ir con ellos...- Habló Gulf y Mew negó de inmediato

- Mi misión y mi deber es cuidarte, para que te arranquen de mi lado tendrán que matarme...- Mew se negaba a dejar ir al menor y Gulf solo lloraba

-" Gulf deberías salir de ahí ahora"- De repente una voz desconocida para Gulf se hizo presente y todo era confusión

- ¿Extrañas a tu hijo no? Ven, te enviaré con él, ya acabé con él, ahora acabaré contigo- Y con aquellas palabras el menor quedó en shock, ¿Quien era aquella persona? Su corazón pálpito con mucha fuerza y las ganas de salir se hicieron más fuerte pero cuando iba a hacerlo se escucharon más disparos, los refuerzos habían llegado, Nan y un grupo de hombres habían llegado al rescate, sin embargo no pudieron atrapar a aquella persona

- Fue quién mató a mi hijo...- Habló Gulf llorando sin consuelo y Mew solo le abrazó tratando de consolar a su amado pero sabía que aquello era imposible de hacer, lo que si sabía era que Gulf tenía un enemigo poderoso y que no lo dejaría en paz fácilmente y entonces debía descubrir quién era y acabar con él antes de que aquel hombre acabará con Gulf...