Noah Thompson:
Me despierto con el sonido del despertador, indicando que era hora de levantarme para entrar a una de los tantos turnos en el hospital.
Con esfuerzo pude terminar la carrera y ganarme un puesto en uno de los mejores hospitales de la ciudad en Trauma.Con cuidado de no despertar a Karen me levanté, odiaba despertarla tan de madrugada aparte que sabía que no podría seguir durmiendo, tendría mal humor todo el día y eso no me convenía.
–¿Amor? –Karen se removió entre las sábanas y se dió la vuelta para volver a dormir. Sonreí y tomé mis cosas para meterme a bañar.
El agua cayó sobre mi cuerpo y minutos después salí con una toalla enrollada alrededor de mis caderas, para después ponerme un boxer. Karen ya no estaba en la cama, fruncí el ceño al ver la cama vacía y camine hasta el cuarto de nuestra pequeña hija de siete años para ver si estaba ahí.
–¿Karen? –la llame, al ver qué no estaba en ninguna de las dos habitaciones–, ¿Dónde estás, cielo?
No es que el departamento fuera lo más grande del mundo pero no estaba en ningúna de los lugares donde podría estar. Extrañado regresé a la habitación y todo el aire salió de mi boca al verla frente a mí abierta en la cama, con una pequeña sonrisa en su boca y una lencería tan diminuta que mi amiguito entró en acción con tan solo unos segundos.
–Pensé que tal vez sería buena idea que te vayas con un buen recordatorio de lo que te esperará en casa.–chupó dos de sus dedos y los bajó hasta su centro, masajeandolo lentamente, me dió una de las tantas sonrisas coquetas que me daba en estás situaciones.
Con el paso de los años fuí descubriendo quién era Karen Chars, y déjenme decirles que su cara angelical de hace unos años no se comparaba en nada al demonio que tenía enfrente.
Caminé hasta ella y me arrodillé frente a ella, jalandola hasta el borde de la cama para tener más de cerca aquel lugar que me volvía loco. Con cuidado hice a un lado su pequeña lencería y pase mi lengua por aquel lugar que me volvía loco, admirando como ella se retorcía mordiendo su labio para que no la oigan, aunque a esta hora nadie debe de estar despierto.
Lleve dos a su boca y los chupo con una sonrisa, para después pasar a introducirlos dentro de ella, mientas mi boca seguía haciendo su labor en su centro. Chupando, lamiendo y de vez en cuando mordiendo cuidadosamente su centro, mientras mis dedos se movían dentro de ella.
Sus gemidos solo hacían que mi polla creciera más dentro de mis boxers, al punto de sentir que reventaria en cualquier momento. Saco lentamente mis dedos, ganándome quejidos de parte de ella y los meto a mi boca saboreando su sabor.
Sin duda mi mujer es demasiado embriagante.
Me levanto y me recuesto sobre ellas, mientras mi boca va a su cuello, mordiendo y chupando. Sus manos se aferran a mi espalda y entierra cuidadosamente sus uñas en ella, mientras gime en mi oído de placer. Bajo mi boca hasta sus pechos donde saboreo cuidadosamente sus pezones duros, Karen se arquea, provocando una sonrisa de satisfacción en mí.
Chupo un poco más sus pechos, hasta tal vez dejar una pequeña marca en unos de ellos para regresar mis besos a su boca, donde ella me recibe con gusto y deseo. Sus manos recorren mi pecho y bajan hasta mi polla para masajearla de arriba hacia abajo, provocando pequeños gruñidos por la lentitud en qué lo hace.
De un movimiento la vuelvo a jalar hasta la orilla de la cama y me arodillo de nuevo, solo que está vez no voy hacia su centro sino que colocó sus rodillas en ambos lados de mi cara y paso una de mis manos por su centro.
–Noah –Karen gime, cuando introduzco mis dedos dentro de ella.
–¿Que pasa, cielo? –mi mujer se arquea de placer y suelta un pequeño gemido.
–Te quiero sentir. –saco mis dedos y me bajo los boxers hasta liberar a mi pequeño amigo, que quería hacer presencia desde hace rato. Sin previo aviso me introduzco en ella, haciendo que suelte un placentero gemido al sentirme.
Muevo mis caderas, mientras pongo una almohada bajo de ella, para que esté más cómoda y me pueda sentir mejor. Me aferró a sus caderas y empiezo a aumentar mis movimientos, mientras ella solo gime del placer. Sus pechos se mueven de arriba hacia abajo con mis movimientos, dándome una perfecta vista de ellos.
–Mi turno. –Karen se separa de mi y me pide acostarme en la cama, con gusto le hago caso. Me sube arriba de mi y me da un pequeño beso en los labios, antes de darse la vuelta.
Su perfecta silueta queda a mi vista y aprieto con fuerza sus trasero, provocando que Karen se arquee. Con cuidado se introduce en mi y empieza a moverse sobre mi, moviendo de vez en cuando sus caderas. Apoyandose de mis piernas o las almohadas a nuestro costado empieza a aumentar el ritmo mientras que yo solo observo como su perfecto trasero sube y baja, rebotando contra mi.
Karen era una Diosa, sin duda alguna.
Cuando siento estar cerca del clímax la cambio rápidamente de lugar, estando yo arriba, mientras ella enrrolla sus piernas a mi alrededor. Me introduzco rápidamente en ella y empiezo a moverme dentro de ella, provocando que se arquee y gima. Sus gemidos eran gloria.
Sus manos se posan en mi trasero y lo aprieta, mientras yo la embisto rápidamente.
–Más ahhh –gime contra mi boca. Aumento mis movimientos hasta el punto de sentir el clímax cada vez más cerca. Karen entierra sus manos en mi espalda.
–Vente comigo. –mi mujer asiente y se arquea al momento en que ambos sentimos el clímax llegar en nuestro cuerpo.
Suelto un gruñido de placer, al sentir a Karen venirse contra mi polla. Nuestras respiraciones estaban agitadas y nuestros cuerpos sudorosos.
Beso a Karen y ella me recibe gustosa. Paso mis manos por su trasero y lo aprieto. Nuestras lenguas están un pequeño dancin de satisfacción. Su boca sabe a gloria, todo de ella lo sabe.
Cuando nos separamos me sonríe y pasa una de sus manos por mi mejilla, acariciándola despacio.
–Estoy embarazada. –su confesión me deja en shock, provocando que una sonrisa se instale en mi boca, besándola una vez más.
–Te amo, preciosa. –digo contra su boca, besándola en toda su cara.
No podía creer que sería papá por segunda ocasión. ¡Dios, sería papá por segunda ocasión!
¿Y saben lo mejor? Que sería con la mujer que amo y que me hace feliz cada maldito día.
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¡Holi!, ¿Cómo han estado?
Les comento que estaba aburrida y decidí escribir este cap, aunque puede que esté se una algún proyecto a futuro en el que estoy trabajando. De hecho he estado trabajando en muchísimas cosas que espero que les guste.
¿Les gustó el capítulo? Hice lo que pude, voy mejorando en esto de +18. Díganme en qué puedo mejorar y así:p
Les invito a qué me sigan en mi ig: @elisa_wttd donde ahí subo cosas de vez en cuando. Así podrían estar más atentos.
Sin más que decir.
Nos leemos pronto.
–E<3
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EXTRAS
Teen FictionAquí podrás encontrar los capítulos extras +18 de mis historias. -Punteria Perfecta.