I kissed a girl (Completa)

5. Two Girls

— ¿Hay algún nombre por el deba llamarte? —preguntó la pelinegra en dirección a Jennie—

— Jennie —respondió— ¿cuál es tu nombre? —

— Puedes decirme Lisa —respondió, después de tomarse las manos, Lisa la había guiado a una habitación, una vez dentro, el ambiente parecía haber cambiado ligeramente—

Se acercó a ella, Lisa dio otro beso en su labios labios, esta vez fue muy lento, un tanto diferente a los anterior, recorrió con su lengua sus labios, recorrió lentamente su cintura con sus dedos hasta llegar a sus hombros, luego bajó por sus pechos y dirigió sus dedos hacia le cierre del vestido que luego deslizó por sus piernas, sus sentidos estaban vueltos locos, no sabía dónde sentía más placer, su boca no le daba tregua a la de Jennie por más que su lengua luchaba con la suya. La tomó del cuello para acercarla más, se separé de sus labios para hacer un camino de besos desde su boca hasta su cuello, dio una leve mordida en él y continuó  besándola hasta llegar a su cabello. Acto seguido sus manos se apoderaron de las ajenas y me dirigió hasta un mueble y subió a Jennie nen en el.

Se acomodó entre las piernas ajenas, su zona solo siendo cubierta por la ropa interior y siguió besándole pasionalmente, los dedos de Lisa recorrían su espalda y lo único que atinaba a hacer era contener leves gemidos que comenzaban a salir de su boca, introdujo las manos entre su cabello para acercarla más a ella, deseaba que no hubiera ni un centímetro que las separara. Soltó su sostén y liberó sus pechos, ahí supo que ya no había marcha atrás, estaba a punto de suceder y lo deseaba ampliamente.

Jennie podía pensar que era algo injusto, ella casi estaba totalmente desnuda y Lis a todavía seguía medio vestida.

Bajó su boca por su cuello hasta sus pechos y empezó a besarlos, succionó ligeramente un pezón y después se pasó al otro, Jennie estaba comenzando a sentir oleadas de placer más frecuentes, antes se sentía encendida por un beso, tenerla tocando su cuerpo era algo completamente distinto. Desesperada metió una mano dentro de sus bragas para llegar a su intimidad, le encontró medianamente preparada para recibirla, apenas hace instantes estaba húmeda así que fue fácil que sus dedos empezaran a recorrerle, acercando con rapidez sus manos, Jennie se encargo de bajar el cierre del pantalón ajeno que seguía en su sitio y desabrochar el botón, quería que estuvieran en condiciones parejas lo más rápido posible. Con ambas manos comenzó a desabotonar su camisa azul para descubrir su hermoso sostén negro de encaje, desabrocho su sostén lo más rápido que pudo para sentir sus pechos contra los suyos, su pechos eran ligeramente mas pequeños que los suyos, en realidad, le daba un toque el hecho de que su camisa siguiera sobre sus hombros mientras sus pechos se frotaban.

Sus piernas en medio de ella comenzaron un ligero vaivén, Jennie desenredó su cabello para que cayera sobre ella y quedaron ambas con el cabello suelto, empezó un camino de besos hasta su ombligo, sus piernas, el camino salivoso bajó a su entrepierna, quitó totalmente su ropa interior se apoderó de su entrepierna mientras siguió besando y pasando descaradamente su lengua sobre sus muslos hasta llegar a su intimidad ya húmeda debido a la excitación. Su lengua se introdujo lentamente entre sus labios vaginales y rápidamente localizó su clítoris , Jennie dio un pequeño grito cuando eso pasó, dejando que succionara mientras la tomaba del cabello, no pudo contener los gemidos por mucho tiempo y los dejó escapar.

— ¡Lisa! —grito cuando trató de retener los gemidos que seguía saliendo sin control—

No pasó mucho tiempo hasta que llegó a un intenso orgasmo, echando  la cabeza hacia atrás porque no pudo contener las sensaciones de tan intenso placer, la noche apenas comenzaba. 

— Puedes pagarme ahora tu —dijo Lisa separando la cara de su entrepierna— vamos, se que eres una niña buena cuando quieres —