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Doyoung x Junghwan

¿Y si Doyoung conociera a su hada madrina?

-Enano, ¿Cómo te fue?

Kim Doyoung no se dignó en responderle a su hermano, simplemente fue directo a su recamara. Una vez entró, cerró de un golpe su puerta para dejar más que claro que no quería hablar con alguien.

Vaya noche que estaba pasando.

Sintió como su teléfono vibró en el bolsillo, pero también lo ignoró. Definitivamente no quería hablar con nadie en estos momentos, no cuando sentía que todo su mundo se estaba viniendo abajo.

Moqueando, Doyoung se dirigió a su closet para sacar una camisa vieja que utilizaba como pijama. Se quitó la corbata al mismo tiempo que pateaba sus pantalones lejos. Doyoung se sentía la persona más patética así qué ya nada le afectaba.

-Dobby, ¿por qué eres así? – El chico estaba en frente de su tocador quitándose el rímel que se le había corrido por llorar durante todo el camino a su casa. No era mucho, pero si lo suficiente como para parecer panda. – Al menos sería un lindo Panda.

- Un mapache quedaría mejor.

- ¡Qué diabl...! – varias toallitas salieron volando por la sorpresa del chico. Lentamente se giró hacía su derecha y vio a un chico apoyado en la esquina de su habitación. - ¿Quién diablos eres tú y qué estás haciendo en mi habitación?

Aquel chico misterioso se despegó perezosamente de la pared y caminó lentamente hacía el centro de la habitación. Doyoung lo siguió con la mirada, el chico parecía inofensivo. Un poco torpe, pero inofensivo al final de cuentas.

-Mi nombre es Jihoon. – El chico pasó una mano por todo su rostro hasta terminar en su cabello en un intento en vano de ser sexy. – Y yo soy tu salvador.

- ¿Mi qué?

- Tu salvador. – Obvio Jihoon fastidiado. Metió su mano en el bolsillo trasero y después tendió su mano al chico. – Ten, mi tarjeta de presentación.

Aún desconfiado, Doyoung extendió su mano y la tomó.

"Happiness, just a tear drop away" junto con una imagen de ese chico posando con su varita mordiéndose el labio.

- ¿Qué clase de mala imitación del hada madrina de shrek eres?

Jihoon indignado le arrebató la tarjeta de la mano al castaño. - Ese idiota me las va a pagar. - murmuró. - Mira niño, mi trabajo es que dejes de llorar así que dime tu deseo y en un bibidi babidi bu lo tendrás.

- ¿Entonces eres mi hada madrina?

-Hado, si no te ha quedado claro soy un niño. Ahora...- El hado madrino de Doyoung se tiró sobre la cama de este. - Dime que te preocupa bonito, antes de hacer mi magia necesito un poco de historia, algo que satisfaga mi ser chismoso.

-Bueno, pues...

- ¡Espera! - Un pedazo de cinta apareció sobre los labios de Doyoung y en menos de un segundo Jihoon tenía un bote extragrande de palomitas con mantequilla. - Lo siento, hoy tuve que cancelar mi noche de películas con Jinhwan por venir contigo y en serio que moría por unas palomitas. - Ahora sí, continua.

Con cuidado de no lastimarse, se quitó el pedazo de cinta de la boca. – Bien... - Doyoung dudó un poco, pero al final decidió confiar en aquel chico. – Soy estudiante de secundaria y estoy en el club de...

- ¡No me digas!, ¿Fotografía?, ¿Baile?, ¿Canto?

- No, ciencias. Y yo...

- ¡Tienes una feria de ciencias dentro de unos días y te estas enamorando de tu pareja de proyecto! – Jihoon comenzó a hablar cada vez más y más rápido. – Pero te diste cuenta de que son de mundos totalmente diferentes y que él esta saliendo con una bella chica por lo que su amor es prohibido como diría Selena. Leer todos esos fanfics cliché sirve de algo. - A cada palabra, el chico escupía más y más palomitas sobre el edredón del más alto. Doyoung molesto, se acercó a la cama y le arrebato el bote al ser mágico de cabello rosa y lo puso lejos de él. - ¡Oye!

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⏰ Última actualización: Mar 17, 2021 ⏰

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