𝙇𝙤𝙫𝙚 𝙈𝙖𝙯𝙚 | Namjin

Capitulo 2: Certezas

El movimiento de cuencos y cubiertos causó un ruido que llenó el aire.

Por supuesto, no eran cuencos simples, ni siquiera cubiertos. El primero estaba hecho del cristal más refinado, el segundo, de la plata más pura. Y eso significaba, para todos los presentes, que eran diferentes. Solo el hecho de que fueron capaces de obtener cosas de este valor los hizo automáticamente mejores que el resto.

El anfitrión sentado en la punta de la mesa parecía extremadamente satisfecho consigo mismo. ¿Cómo podría no estarlo? Su equipo tenía un abogado que acababa de ganar un caso difícil y recibió mucha atención de los medios de comunicación. Junto a este, había un ingeniero que comandaba la construcción de un gigantesco edificio comercial en la parte más rica de Seúl. En el lado opuesto estaba Park JongIn, rector de la Universidad Federal de la capital, que estaba pasando por un escándalo en su institución y tenía como abogado a Kim Namhae, el mismo responsable de esa cena.

Namhae era un hombre muy inteligente. Siendo amigo de las personas adecuadas, tus enemigos ni siquiera tienen oportunidad. Mostró energía en cada botón que cerraba el blazer caro, en cada movimiento elegante para llevar el tenedor y el tazón a sus labios, luego los limpió con una servilleta de lino. El reloj, cuyo precio iba acompañado de muchos ceros, a veces reflejaba la luz de la lámpara de araña que colgaba sobre la gran mesa de comedor, alcanzando directamente los ojos del joven que se sentaba en el otro extremo y casi se dormía con las conversaciones monótonas, que deberían, pero no despertó ningún interés: yo.

- Ya nos hemos encargado de su renuncia. - Vuelvo a prestar atención a lo que estaba sucediendo fuera de mi mente nublada por el aburrimiento. - Sé que deberíamos haber hecho esto tan pronto como nos enteramos, pero es un asunto muy complicado. Un profesor tan bueno, que ha sido parte de la Universidad durante años... Él estaba pasando por problemas financieros, así que no podíamos enviarlo lejos así como así.

- ¿Y la chica? ¿Está diciendo la verdad? - El ingeniero bebe un poco de vino en silencio, sin ocultar el tono desacreditado.

- Sí, Lo hace. - El anfitrión afirma.

- En ese momento ella no quería denunciarlo, ¿qué podríamos hacer? - Park lo justifica. - Lo mejor era respetar su voluntad. Pero ahora todo se resolverá.

El tema termina con la explicación. El decano parecía aliviado de haber sonado convincente para todos los oyentes, pero en realidad sabía que sus palabras habían sido dictadas por su abogado, quien le había aconsejado sobre qué decir para deshacerse así de la responsabilidad de lo que su negligencia había causado.

Y, de hecho, podría estar tranquilo. A los otros hombres ni siquiera les importó mucho. Había cosas más relevantes de las que preocuparse que una chica que había sido violada en un lugar que se suponía debía ser seguro, y que había pasado por un trauma psicológico que probablemente la seguiría a través de la vida.

- Mi hija lo comentó. Aparentemente, nadie sabe quién es. - La voz del otro abogado me saca de mis pensamientos, y aunque tomaron el asunto a medias, tenía una idea de lo que se trataba.

- Este chico es un problema. - Jongin sonaba más preocupado por ello que por la otra situación. – Sus palabras impulsadas por ese tonto sentido de la justicia pueden tener consecuencias, principalmente porque otros creen en él. Y si terminan motivados...

- Pero, ¿qué dice RM? - Mis ojos se mueven hacia el hombre en el extremo opuesto, que había hablado con curiosidad.

-Tonterías... Dirigido a algunos profesores, yo y cosas que ocurren en el campus. Estábamos tratando de hacer lo menos complaciente posible con eso que ocurrió, sobre todo porque algunos estudiantes ya estaban protestando y causó un ruido que no necesitábamos. Pero decidió hablar y luego toda la universidad está hablando de ello. En las protestas, en las redes sociales... - El hombre suspira.