878 84 1
                                    



El sol golpeaba directamente en sus ojos causándole esa ligera incomodidad, con quejas saliendo de sus labios, logro despertarse un poco más y sentarse en su cómoda cama. Mirando a su alrededor noto que su habitación era un completo desastre, ropa – tanto sucia como limpia – desparramada por todos lados, vasos, platos y cubiertos sucios sobre su mesa de trabajo, y una enorme montaña de papales, libretas y libros descansando en su sofá.

Se lamento – y regaño – internamente no haber limpiado todo cuando tenía tiempo, pero tampoco es como si existiera alguien que lo visitara para tener la motivación suficiente y ordenar el desastre de pieza que tenía.

Haciendo memoria recordó que el resto de su apartamento se encontraba en mejores condiciones, provocando una pequeña relajación satisfactoria en todo su cuerpo.

Busco su teléfono entre las mantas y una vez hallado verifico la hora que era.

"¡Mierda!" grito exaltado, aparto todas las cobijas que tenía sobre las piernas lo más rápido que le fuera posible y corrió hasta el baño para tomar la ducha más rápida que haya tenido en su vida. Todavía húmedo debido a la lluvia artificial, se puso ropa interior limpia y lo primero que encontró en el suelo. Volvió a checar la hora en su teléfono y se movió tan de prisa como sus piernas se lo permitieran.

Eran las 9:43 a.m.

Lo que quería decir que su primera clase del día estaba cerca de cumplir los cuarenta y cinco minutos de haber iniciado. Una persona normal al darse cuenta de eso lo que haría es dejarlo pasar y llegar a la próxima hora, pero Chanyeol tenía un trabajo importante que entregar y no podía darse el lujo de cometer a la falta de no hacerlo.

Una vez listo – incluido con todas sus cosas – corrió hasta el estacionamiento de su edificio y entro a su auto. En menos de un minuto ya se encontraba manejando lo más veloz que le era permitido con rumbo a su universidad.

Rápidamente llego a esta y una vez estacionado y fuera del auto, se permitió maldecirse por vigésima ocasión en la mañana y se dirigió a su aula. Frente a la puerta se aseguro de tener todo consigo y trato de acomodar mejor sus ropas, soltando todo el aire que contuvo en sus pulmones durante esos minutos se atrevió a golpear suavemente la puerta.

Justo en ese momento deseo que la tierra se lo tragara.


























(...)

Mucho texto:

hOLAAAAAAAAAA

Aparezco,,,
Soy consciente de haber prometido que la próxima historia sería SeHo y que estoy publicando algo muy tarde PERO, me he mudado hace semana y media, estoy enloqueciendo.

Realmente quería publicar una historia SeHo pero no he tenido el tiempo de desarrollarla tanto como me gustaría, así que decidí publicar esta historia primero ya que tengo más capítulos guardados, tenganme paciencia xfa!

Sin más que decir, espero disfruten esta historia y esperen por la siguiente, ¡gracias por leer!





E X | C. S. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora