Noche de brujas [TaeWin; NCT]

Capítulo Único

 Hoy era el único día en que los muertos podían vagar por el mundo de los vivos. Hoy era el día en que los demonios andaban sueltos, ellos estaban aquí, estaban en nuestra tierra.

 O eso era lo que les decían en la escuela. Así eran todas las historias que los amigos de Winwin se dedicaban a contar a los niños de grados menores con fin de asustarlos. Cuando llegó al instituto, tuvo clases normales como siempre, pero en la hora del receso sucedió algo inusual. A lo lejos el chico rubio pudo divisar a sus amigos, todos se encontraban en una especie de ronda, prestando total atención a lo que Lucas y Yuta relataban. Winwin había llegado casi a la mitad de la historia.

— Hace mucho ya que el hospital fue dejado fuera de uso. Dicen que fue abandonado con los pacientes que padecían viruela y decidieron encerrarlos ahí para evitar la trasmisión dejándolos solos, así poco a poco fueron olvidados— relataba el castaño, Lucas.

 Intentó hacer oídos sordos a lo que contaban, nunca le habían gustado ese tipo de cosas, siempre terminaba con escalofríos por todas las partes de su cuerpo. Sin poder evitarlo, recordó cómo sufría de pesadillas que constantemente estaban atormentando su sueño, negó rápido con su cabeza tratando de evitar ese pensamiento.

— ¿Estás bien, Winwin? — le pregunto en un susurro, Yuta.

— Seguro lo estás inventando, Lucas hyung — hablo restándole importancia Ji Sung.

— Claro que no, el hospital es real, se encuentra pasando el cementerio— hablo seguro—, pero lo único malo es que no hay manera de rodearlo, debemos cruzarlo.

— Deberían dejar de hablar tonterías— regaño a los más jóvenes el chico rubio.

— Pero, hyung...— intentó refutar Renjun.

— Deberías de venir con nosotros, Winwin hyung— hablo el castaño—. A menos que seas un cobarde.

 La mirada de Yuk Hei era retadora, intentando lograr una reacción por parte del rubio. Suspiro, ese niño intentaba sacarlo de sus casillas, pero no lograría.

— No deberían ir, ese hospital se cae en pedazos de lo viejo que esta ahora, ¿Y si llegan a tener un accidente? — intento hacerlos entrar en razón.

— Nada pasara, Winwin hyung— tranquilizo, Renjun.

— Hyung— Lucas lo llamó—, hablas del hospital como si ya hubieses estado ahí.

— Claro que no, solo es lo que escuché de algunos sunbaenims.

— Yo propongo esto— hablo Lucas, llamando la atención de todos—. Porque no vamos a la fiesta de Jungwoo, pero antes de eso pasamos un rato por el hospital. Un poco de diversión antes de festejar no nos haría mal a ninguno.

— A mí me parece bien— aceptó Ji Sung.

 El sonido de la campana sonó marcando el fin del receso, los más jóvenes se fueron rápidamente abandonando el lugar primero que los mayores.

— Deberías venir con nosotros— le dijo Lucas antes de emprender su caminar hasta llegar a su salón.

 Algo no le gustaba de todo esto. Nunca le había gustado ir al cementerio ni siquiera cuando iba a visitar a su difunta abuela. Su cuerpo se tensaba y sentía que lo observaban. Muchas veces había evitado ir al cementerio diciéndole a su madre que se sentía mal o que debía hacer algún proyecto para la escuela. Por suerte su madre siempre creía en él. Por dentro se sentía apenado con su abuela, pero se prometió que un día iría a visitarla sin importar lo que él sintiese, llevando hermosas flores.