Que se jodan todos

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La ira o enfado...

Me la pase una semana sin salir de casa, no quería ver a nadie, ¿tan difícil es de entender?

Madre sigue diciendo que necesito un psicólogo, mis amigos afirman que no estoy bien que necesito hablar con alguien, pero y qué si no quiero.

Mi casa está patas para arriba, eso sólo me hace recordar como se encontraba la habitación aquella vez, trataba de verle el sentido a eso, de qué servía el desorden. Es cierto, se sentía bien tirar las cosas al suelo, nunca me había enojado así... ¿Estaba enojado? Sí, lo estoy.

Estoy enojado con mi madre, qué podría saber ella si ella no estuvo en ese cuarto, qué podrían saber mis amigos si ellos no lo conocían tan bien como yo lo hacía. También estoy enojado con él, por dejarme solo, por irse de repente sin despedirse.

—Hoseokie hyung —. Ahí está otra vez—. Debe salir, salgamos a algún lado, podemos hablar. Por favor ya han pasado seis días.

Y eso no es suficiente, los odio por no darle importancia a esto, como si fuese tan fácil, como si no hubiese pasado, los odio.

Los odio a todos, no tienen idea de nada, son unos idiotas sin sentimientos y me dan asco...

—¡¡VAYANSE!!

—Pero, hyung...

—¡¡Largo!! ¡Ojalá que se jodan todos!

Silencio.

Parece que desistieron, cómo se atreven a venir así, nadie los invitó, yo no los invite, no quiero su compañia, no quiero la compañia de nadie, no necesito a nadie, lo necesito a él pero también me dejó, todos son una basura.

Llega la ira, el enfado por la muerte como fruto de la frustración.

My TimeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora