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Pov Madisson

4: 30 am Itaewon

Nuevamente nos encontrabamos en un club, era viernes día de misa para nosotras las chicas. Este caso era distinto nos encontramos con GD y los miembros de su grupo. Estuvimos un rato charlando ya que nos invitaron a su sala V.I.P exclusiva de ellos.

¿ Bailamos ? — pregunta Jinyong — no se pregunta vamos — contesto mientras lo tomo de la mano para bajar las escaleras para dirigirnos a la pista, admito que al tomar su mano sentí una corriente de ellas. Una sensación que me encanta, está noche estoy dispuesta a pecar sólo por él.

La música sonaba por todo el club, sino me equivocaba quién se encontraba en la tarima cantando era un tal Jay Park según me dijeron las chicas. Esa canción Mommae la que comenzó todo me encontraba moviendo mis caderas de una manera sensual cosa que no sólo tenía embobado a uno sino a todos los de mi alrededor. Ji yong no podía sacar la vista de mi cintura que se movían con una sensación de tortura.

¿ Cómo es que haces esto ? — murmura cerca de mi oído pegándose a mi cuerpo aún más,cosa que sin mentirles se sintió jodidamente tan bien.

solo déjate llevar y olvídate de tu alrede... — no me dejó terminar porque me jalo quedando jodidamente peligroso de sus malditos labios.

no eso, como puedes volverme tan loco — dice a lo que intento responder pero ya tenía sus labios en los míos buscándolos con hambre, mientras agaraba mi cabello en sus manos, mientras se devoraba mis labios, de los labios a mi cuello, del cuello al escote, terminado así en su auto, donde llegamos a lo que era su casa, ambos no podíamos parar, al parecer ambos estabamos deseados esta noche. Finalmente en el departamento, como explicar el deseo que ambos cargábamos, la ropa desapareció sin aún estar en la habitación, nuevamente aquí ya en la habitación los besos comenzaron a bajar a mi cuello cosa que me erizó la piel. Jinyong tomó el control quedando encima mío mordiendo y relamiendo mi cuello, sus húmedos labios bajaban a mi pecho desesperado volvió en busca de mis labios con hambre devorando de ellos como si no hubiera un mañana.

— ¿ cómo puedes volverme tan loco madisson ? — dice el mientras sonreía, maldita sexy sonrisa que me llevo al pecado. — a la mierda todo, solamente tu y yo, que opinas — decía antes de comenzar la mejor parte de la noche.

Si así se siente el pecado, no dudaré en buscar más de ti.

"Seoul"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora