Molestia.

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Bueno, el día había empezado y parecía ser muy largo

Yeonjun suspiro al ver su ropa, no era mucho, pero la verdad es que era lo que menos le importaba

Si los padres de Soobin no querían que se casaran ni la ropa más costosa cambiaria algo

Y es que, definitivamente tenían razón, el no debería casarse con el, por que sobre todas las cosas los padres siempre esperan que quien se una a sus hijos los haga felices

Y el no podía

—Tengo hambre—Soobin a veces era más como un cachorro enorme, en estos momentos ese comentario tan simple le causó una sonrisa, rompiendo con la cadena de pensamientos que se formaron en su cabeza en esos minutos

No estaba seguro de poder seguir adelante, no estaba seguro si podria estar preparado para que Soobin lo marcara

Era muy íntimo, muy privado

Pero no podía dar marcha atrás ahora, cuando Soobin ya le había dado un anillo de compromiso, sobre el dedo de ambos descansaba un par de anillos a juego de oro blanco e incrustaciones de finos diamantes y sus nombres grabados en el centro

Por hoy quería dejar de preocuparse por todo

Y tampoco quería aceptar que amaba ese anillo, que lo llevaba con mucho orgullo

—Vamos entonces, no hagamos esperar a tus padres

...

Todo había transcurrido de manera tranquila, Yeonjun conocía conocía los señores Choi desde siempre, era una platica relajada, casi no se sentía como una charla con tus mayores

Y le había gustado pasarse el rato ignorando el tema principal

Hasta que uno de los padres de Soobin cambió de tema—Bonitos accesorios chicos—Su otro padre le miro mal, dándole un ligero codazo y es que su dinámica era muy cliche, pero muy dulce

Eran alfa y omega que había salido desde siempre, se habían casado y habían tenido dos lindos hijos, ambos alfas, pero su hijo más pequeño, prematuro y enfermizo sin duda fue su mayor preparación, al pasar los años Soobin no pudo curar sus problemas en el corazón, pero era un alfa fuerte que casi parecía estar completamente sano

Tal vez por que había obsequiado su corazón, pensaron su padres

—Nos contaran cuando estén listos, cariño—Soobin rio, negando

—Bueno, tal vez ya lo notaron, pero Yeonjunie y yo decidimos... casarnos

Eso era ¿de verdad? Ambos adultos se miraron entre ellos, la idea había pasado por sus mentes, pero que la dijeran de forma real fue impensable—¿puedes explicarnos tan siquiera cuando empezaron a salir?—El omega menor miro al suelo, se sentía tan mal al mentirles—No te confundas, Yeonjunie, tu eres como un hijo más para nosotros y no hay nadie más que deseara para mi hijo pero me parece un poco apresurado

Soobin lo pensó durante unos segundos—Yo he amado a Yeonjun desde que lo conocí, estaba feliz con ser solo su amigo, por que antes de quererlo como una pareja lo apreciaba como un amigo, como mi mejor amigo—Esa sonrisa tonta que estaba en su rostro no era nueva si se trataba de hablar de Choi Yeonjun, pero el mismo nunca la había visto, no de esa forma—Pero soy un tonto codicioso y soy muy afortunado de que esta gran persona que esta a mi lado me acepte, espero que también lo puedan hacer ustedes

Oh, claro que a su padre alfa no le quedaba ni la más mínima duda de que su hijo amaba desde siempre al omega

Pero no estaba seguro de que fuera recíproco

Y el, sobre todas las cosas quería que su niño fuera feliz, no con la lastima ni agradecimiento, con amor—¿y tu, Yeonjun?

El Omega se aclaro la garganta, mierda, ahora que iba a hablar esperaba no arruinar las cosas—Se que pueden haber muchas personas en el mundo, pero estoy seguro que su hijo fue la mejor que el destino pudo enviar para mi, por que no hay nadie más que conozca en la vida que me haga sentir como el, tranquilo, feliz, apreciado y escuchado, por que en esta sociedad discriminatoria donde todos dicen que solo sirvo para limpiar una casa y tener buenos hijos el me miró por lo que era, por ser yo, es amable, bueno y muy listo, y...—Esto se estaba saliendo de las manos, pero ya que había comenzado a hablar no podía detenerse, así que miro directamente al alfa del que estaba hablando—Estoy feliz de casarme contigo, no podía ser nadie más que tu

Soobin se quedó completamente inmóvil ante las palabras de Yeonjun y no pudo evitar besar de forma tierna su mejilla,

Ambos padres los observaron con detalle

Y a ambos no les quedó duda, estaba enamorados, aún si Yeonjun no lo aceptaba

...

—Wow, fue la cena más intensa de mi vida—Soobin y Yeonjun acaban de regresar de la casa de este último, su madre no había tardado ni dos segundos para llenarlos de preguntas y felicitaciones, pero la verdad es que fue un día complicado y ambos solo querían llegar al apartamento y vestir con sus ropas de vagabundo para descansar

Yeonjun asintió, saliendo del baño después de cambiarse—Los anillos ¿donde los conseguiste? Son preciosos, pero no debiste, se ven muy caros—El ver ese anillo en su mano hacia las cosas tan reales y tan verdaderas

Que no sabía que pensar

—Son lo que merecíamos, solo nos casamos una vez en la vida

—Gracias

—¿gracias?

—Por todo, por estar aqui—El omega se sentía confundido, por que parecía que estaba mirando a su mejor amigo con otros ojos desde que habían planeado casarse

Hasta el punto que tuvo muchas ganas de unir sus manos, de olfatear su cuello

Y eso no estaba bien

Por que era incapaz de tener una relación física sin llorar o tener un ataque de pánico. Y Soobin no se merecía a alguien  como el

Pero se permitió contestar al abrazo, aspirando su aroma y abrazándolo de vuelta

Independientemente de todo, aun si Soobin le gustaba no podía más que ser su amigo

Y esa idea le estaba matando

𝗧𝗵𝗲 𝗣𝗿𝗼𝗯𝗹𝗲𝗺 | SooJunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora