2. Algo inesperado.

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- ¿Decir el qué a quién? - suelta Kate asomada a la puerta entrecerrada.

- ¡MAMÁ! - grita Karoline, mientras le lanza a la cara un cojín morado.

Kate cierra la puerta a modo de escudo y la vuelve a abrir al caer el cojín al suelo.

- Buenos días a ti también, hija - dice mientras pasa sin permiso de su primogénita.

- Buenos días señora Sweer - digo educadamente.

- Oh Ethan, ¿cada día la misma batallita? Llámame Kate por favor - y diciendo esto se sienta a mi lado.

- Lo siento, no me sale natural. Kate. - hago un énfasis en Kate.

Kate rodea los ojos y vuelve a preguntar.

- Bueno, ¿me pensáis contestar? ¿Qué tenéis que decir y a quién?

Karoline y yo nos miramos un momento y asiento, de modo que ella se apresura a decir:

- Ethan es gay - Karoline parece... ¿Orgullosa?

Kate se queda parada. No sonríe. Su sonrisa ha desaparecido. Ella siempre ha sido alegre.

- Fuera.

- ¿Qué? - Karoline está confusa. Y yo también.

- Fuera he dicho. Los dos - y nos empuja hacia la puerta.

- Pero... - esto es muy raro.

- QUE FUERA - grita Kate empujando la puerta y dando pues, un portazo, en cuanto los dos estamos fuera.

Nos miramos. A Karoline le brillan los ojos. No es llanto, es rabia. Tiene su genio, y no suele contenerse.

- FUERA DE QUÉ - grita abriendo la puerta de una sacudida - TE RECUERDO, GUAPA, QUE ESTA ES MI HABITACIÓN. ASI QUE SI ALGUIEN DEBE IRSE ERES TÚ. ADEMÁS, ¿QUE RAZONES TIENES PARA ECHARNOS? - ha despertado a la bestia.

Están las dos cara a cara, delante de la cama.

- Esta es mi casa, y si digo que fuera, es fuera. Las razones son obvias - tiene voz tranquila, pero es evidente que está furiosa. Y lo peor es que creo que el problema es mi sexualidad.

- NO ME DIGAS QUE LA RAZÓN ES QUE ES HOMOSEXUAL - a Karoline le gusta gritar.

- Sí - esto no me podía estar pasando a mí. Que ella, Kate, me reproche mi sexualidad... No, ella no es de esas personas.

- Mamá, la que te pide ahora que te vayas soy yo. Por favor, abandona mI PUTA HABITACIÓN ANTES DE QUE TE ARRANQUE DE LOS PELOS.

- A MI NO ME HABLES ASÍ - la tranquila voz ha abandonado el cuerpo de Kate. - SOY TU MADRE Y ME DEBES UN RESPETO.

A todo esto, están en el marco de la puerta, del cual yo he desaparecido para entrar dentro.

- CUANDO APRENDAS A TRATAR CON PERSONAS, ENTONCES Y SOLO ENTONCES, TE HABLARÉ CON RESPETO. AHORA LARGO - y dicho esto, Karoline da un portazo dejando a su madre fuera, y a los dos dentro.

Nos miramos, y no sé reconocer cuál de los dos está más confuso.

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