Reflexiones

La habitación

Una habitación completamente vacía, sin un suspiro de alguien cerca, nada que pueda rodearme. Cada vez esa habitación empieza a llenarse, un ropero, una cama, libros, peticiones, el espacio es más chico. Camino por dónde puedo, pero ya estoy sentada en una mesa, las cosas siguen apareciendo, y debo de mantenerlas. Desperté con una toalla en mí rostro. Sigo intentando estar de pié, pero la cantidad de cosas me ha llevado hasta el techo, puedo tocarlo. Ya no hay donde estar, mí lugar se hizo estrecho, está invadido, no puedo pararme, ni estirarme, me mantengo acostada, observando el techo. Y en mí mente solo recorre un pensamiento: ¿Por qué dejaste que esto pasará y no lo frenaste cuando pudiste? Llegaste al límite.