Alteración de edades.
Leve mención del minsung.
—Fóllame— pidió la rubia y pensar que todo el día me estaba ignorando.
En cuestión, Rosé es una maldita mujer que lo único que logra es hacerme enloquecer cada día más.
Suspiré observándola desde arriba, sus ojos cristalinos y con las mejillas de un color carmesí, linda.
No pasó mucho tiempo para empezar a penetrarla haciendo gemir a ambos de satisfacción, la miro y el estrés repentino que me causa se esfuma.
—Joder— maldecí por lo bajo sosteniéndola de la cintura llegando más profundo. Me acerqué a ella y me perdí en su cuello, ella olía malditamente bien.
Exacto, todo en ella es malditamente irresistible.
—T-te amo TaeHyung—
¿Enserio? No me ilusiones, maldita sea. Tal vez es mentira. Ella es alguien indescifrable, realmente me tiene impaciente cómo me trata.
Cuando llegamos al tan deseoso orgasmo se vistió y se fue.
Sí, era mentira.
ヽ(≧□≦)ノ
TaeHyung no era alguien que podría considerar agradable, ni tan poco paciente. Por esa misma razón no entendía como una pequeña rubia podía hacerlo caer ante sus personalidades definidas.
—Estúpido— murmuraba cayendo en cuenta de aquello.
Por el otro lado, Rosé era definida con la palabra «dulzura», bueno en parte tenían razón, ok no.
Posiblemente si TaeHyung presenciara a una Rosé siendo "buena" se reiría en su cara.
—Ambos son unos idiotas— Jungkook su mejor amigo habló cuando vio como el peliazul miraba para nada discretamente a la parejita, Park farsante Roseanne y Lee perfecto Minho.
Aunque siendo sinceros, TaeHyung sabía que aquella pareja era falsa, no solo por las noches de sesión que tenía con la rubia, si no también por las miradas de amor que Minho le tiraba Han Jisung.
Ambos amigos cubriéndose mutuamente al no saber lo que realmente sentían. Miedo a caer a lo que tanto habían alejado, estereotipos estúpidos que no permitían el amor entre chico y chico, y una vida que estaba todo planeado sin tu consentimiento, donde el amor de tu vida no estaba en los planes de tus progenitores.
Donde dos jóvenes preferían fingir que todo estaba bien, que ellos seguirían siendo los perfectos hijos, creyendo que eventualmente aquellos sentimientos se desvanecerían volviendo a sí a su no tan conforme vida.
—¿Qué pasó?— preguntó de forma suave la rubia a su "novio".
—El ya no quiere nada conmigo, me dijo que no podía seguir así— Rosé no se esperó que aquel chico de aspecto rudo como era Minho se viera tan vulnerable en ese momento.
—Jisung es alguien inteligente, es obvio que no va a seguir fingiendo no saber que tarde y temprano ustedes tendrían que terminar para unirnos en matrimonio, es mejor acabarlo antes para no sufrir demasiado.
Lee apretó el puño cansado de la misma situación, cansado de no poder amar a Han como se debía, cansado de ver como su novia seguía intentando no correr a los brazos de Kim cuando él sabía que Rosé no era alguien que se contenga por demasiado tiempo.
—Y, ¿Cuándo hablarás con Kim?
Minho la vio temblar levemente mientras tragaba duro.
—No lo sé, nunca más lo volveré a contactar, lo prometo— respondió torpemente la chica. El pelinegro resopló, ambos terminarían realmente jodidos e infelices si no hacían algo al respecto.
—¿Enserio debemos hacer lo que nuestros padres quieren?
—No tenemos muchas opciones para elegir, es obvio que no podemos hacer nada al respecto con la decisión de nuestros padres.— Rosé susurró mientras se dejaba caer en la mesa de la cafetería donde estaban.— Deberíamos escaparnos— soltó sin saber el fuerte impacto que causaría en Minho.
—¿Deberíamos?
Exactamente como sus palabras fueron pronunciadas Minho se paró bruscamente de su asiento. Dejando a una Rosé bastante confundida.
Dos días después se perdió todo rastro de Minho dejando a unos preocupados padres sin saber donde se encontraba su único hijo.
Cuando Rosé fue a visitar a la familia Lee, ellos le dijeron que no se preocupara porque encontrarían a Minho y los planes de matrimonio se repondrían.
Y lo único que Park pudo pronunciar es «Lo siento pero no aceptaré el matrimonio»
Ella antes no había rechazado a los Lee por su padres, ella aceptaría cualquier cosa por ver a sus padres orgullosos, pero en ese momento solo podía velar por la felicidad de Minho y la de ella misma. Esta vez pondría su felicidad antes que todo.
Con una leve inclinación salió de la casa de los Lee.
Empezó a correr escuchando los gritos de la Señora Lee atrás suyos pero importándole muy poco las groserías que le lanzaba.
Corriendo con desesperación a la casa de posiblemente la única persona que enserio la amaba como ella era en realidad.
Cuando llegó tocó firmemente la puerta, cuando la puerta se abrió vio al peliazul que sin querer terminó amando.
—¿Qué haces aquí?— fue la pregunta del más alto.
Sin nada que responder se paró de puntas y dejó un casto beso en los labios contrarios.
—Te amo TaeHyung.
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Pretty bad- Taerosé (one shot) ✔
Fanfiction«Exacto, todo en ella es malditamente irresistible»